Taladrando la ciudad, hasta destilar oro puro de las entrañas fenicias, es lo que pretende el Pepé en El Puerto. Ya sabemos lo que significa PP, dos parkings privados más, y lo que te rondaré, morena. Un año de nada. Moresco y cía emulan lo peorcito de Teófila y cía y ni siquiera vislumbran las virtudes de la gestión de la señora Martínez en Cádiz, que no parecen pocas. Ese Lentísimo Ayuntamiento portuense, en cambio, ha optado por la publicidad a tropel, paginitas y cuñas huecas de contenido que salen carísimas al contribuyente, mentiras a medias, pamplinas a estas alturas de película, y poco más. Política virtual. Y la decepción por bandera. Y la paradoja como razón de ser. Si los socialistas suben o se dejan subir los precios hasta límites insospechados, apaga la luz y vámonos, el PP predica con el mismo ejemplo contradictorio y endilga un veinte por ciento en la factura del agua y la basura. Los papeles no engañan: de 93 a 127 euros en un mes, por citar un ejemplo ilustrativo. Puñalada trapera para ir tirando (cohetes contra la crisis), más de treinta euros de recargo al mes. La desaceleración de la poca vergüenza. Política basura. Estamos rodeados. Menos mal que, según el alcalde, el subidón perpetrado por Apemsa redundará en la calidad del servicio, ya nos quedamos más tranquilos, ¿ehin?, igual que nos enternece la calidad del servicio de polis locatis, el caos de vías y sobras y otras lindezas. Y el poder sigue en manos del factótum, a este paso le van a pagar la multa y hasta el cartón de tabaco al innombrable, la vida sigue igual, el mismo pvp. La ciudad sigue pendiente, por cierto, de que desenmascaren a los mangantes de antes. ¿Dónde quedó la limpieza prometida?
Y ahora, los aparcamientos subtérraneos, en la senda del PP de Cádiz, gran amante del queso de gruyere, que va a levantar a los fenicios de la siesta entre Canalejas y el Pemán. Pues los peperos de aquí, lo propio, ¿será una franquicia de Parkings Privados? Los vecinos de la Plaza de Toros se suben por las paredes. Si no tuvieron bastante con una década de botellón multitudinario, les queda el pedazo de obra y luego el pago diario del impuesto revolucionario a los dueños del país, digo del alquitrán. Talacozamuymal.
Junio 08, El Alambique, El Puerto (Diario de Cádiz)
viernes, 20 de junio de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
3 comentarios:
Pero qué más da Enrique. Tenemos los carnavales; tenemos el Cádiz F.C; la Victoria; el pescaito frito; mil y un millones de bares con tapitas y cervecitas; transatlánticos en el muelle; una avenida nueva (maravillosa);¡otro puente! "Qué más da Enrique" te dice la pública opinión de conformistas desidiosos del mucho hablar entre birras y el poco hacer con el alma. Tanto "sálvese febrero aunque escueza" nos tiene agilipollados y, a la hora de la verdad no se patentan los cojones en la voz de los que gritan como las olas en el Campo del Sur. Qué más da Enrique.
Un saludo,
Eduardo Flores.
Me gustó lo de "poco que hacer con el alma" y las olitas del campolsur. Es verdad lo que dices, qué más da ... Tenemos también la semana santa, la interminable semana santa. Se podría hacer, entre veras y bromas, una réplica del temazo de Sabina, el de las mil razones pa no cortarse las venas. Tantas cosas maravillosas son pa matarse ... un saludooo
Ahora que lo dices, un tema cojonudo. Mas la réplica en Cádiz tendría el mismo eco que un alarido en una azotea. Sigue así Sr. Enrique. No dejes de taladrar nunca los ojos de los innombrables, y de aclarar los míos.
Un saludo.
Publicar un comentario