martes, 30 de septiembre de 2008

Dos poemas inéditos de Dylan

Son 23, se publicarán en breve en un libro muy especial, la colaboración de escritor y fotógrafo, en torno a estampas de figuras de Hollywood, pero el diario New Yorker ha adelantado un par de poemas inéditos de Bob Dylan, que transcribo a continuación.

after crashin the sportscar
into the chandelier
i ran out t the phone booth
made a call t my wife. she wasnt home.
i panicked. i called up my best friend
but the line was busy
then i went t a party but couldnt find a chair
somebody wiped their feet on me
so i decided t leave
i felt awful. my mouth was puckered.
arms were stickin thru my neck
my stomach was stuffed an bloated
dogs licked my face
people stared at me an said
“what’s wrong with you?”
passin two successful friends of mine
i stopped t talk.
they knew i was feelin bad
an gave me some pills
i went home an began writin
a suicide note
it was then that i saw
that crowd comin down
the street
i really have nothing
against
marlon brando


death silenced her pool
the day she died
hovered over
her little toy dogs
but left no trace
of itself
at her
funeral

Triana vive

Más fotos de la Bienal de Flamenco, en su noche dedicada al rock andaluz. Por una vez, Washy dejó la cámara y se hizo una foto con el superviviente de Triana, Eduardo Rodríguez Rodway, con quien compartió un rato en los camerinos rodeados de músicos de ayer y de hoy. Observen la ilusión que le hace a Washy el momentazo histórico, ehin?, con su "coacola fresquito" en la mano y un mito viviente del rock andaluz a su vera. Triana vive, en la memoria, en los discos y en la persona de Eduardo, que dejó por un día su retiro de Los Caños para reivindicar a los auténticos Triana y rendir su particular tributo a Tele y Jesús de la Rosa. El mes próximo se cumplen veinticinco años de la muerte de Jesús de la Rosa.
Por cierto, recomiendo la visita de Gato Andaluz, que está colgando emepetreses y videos, amén de informar sobre grupos nuevos o legendarios de este rincón. En el blog se pueden escuchar ya todos los temas que interpetó Lole Montoya en la Bienal. Pondré más fotos esta semana, que el viernes toca Cai en Chiclana.

http://www.youtube.com/watch?v=CUoENH0u7Ic Ahí va otra versión de "Tu frialdad" en la Bienal, quizá con mayor calidad.

http://www.youtube.com/watch?v=DWHPgEZjBcI

http://www.youtube.com/watch?v=nzLpw2OZGfM Y aquí, dos temas de Guadalquivir en la misma noche

Cortesía de Washy, Alex Bossano y Arrajatabla. Salud !

Años de perdón, Robinjú


Todavía quedan Robin Hoods por el mundo mundial, al menos eso invita a pensar el pelotazo bien repartido que ha dado un tocayo catalán a diestro y siniestro. La historia tiene mandanga. Palo en do mayor al sistema financiero para cubrir las necesidades sociales de algún rincón del planeta. Casi 500.000 "leuros" sisados a los tíos gilitos. Con la que está cayendo, suena significativo y curioso. Ahora que parece que la gente más divina se roba a sí misma para que otros ladrones de guante blanco intervengan en su pobreza millonaria para que entre ambos siga la fiesta del miedo, un Robin Hood se autoinculpa y mete baza en la conciencia del money money. Y lo cuenta con pelos y señales. Ahí va un enlace que me pasó el otro día Eduardo Albadalejo, a la sazón editor de El Boletín Cultural. Como es largo de contar, léase con atención. Porfavó ...



sábado, 27 de septiembre de 2008

Dos atunes en el paraíso

En la foto de Jorge Garrido, el flamante pregonero del Carnaval de Cádiz, y músico de renombre universal, Javier Ruibal, junto al histriónico Pablo Carbonell, "el de Atunes en el Paraíso", como le conoce ya la gente pese a su historial de cómico, pop-rockero y entretenedor. Ruibal, el portuense, puso su arte al servicio de la banda sonora de tan hermosa película del gaditano. Y aquí están, como dos marineros en tierra, en el "backstage" del concierto de Tequila, TnT y Delinquentes, en la Alameda de Jerez. Vaya par de pájaros de buen agüero. La exquisitez de uno, la espontaneidad del otro, exponentes dispares de la sencilla profundidad de esta tierra, que si fuera por sus poetas, sus músicos, sus pintores y sus artistas en general (incluyendo al artista que no vive del arte, el artista de la calle que lo mismo trabaja en una farmacia que come del subsidio), se parecería aún más al paraíso.
Javier, que anda ya enfrascado en el pregón, emocionado y en vilo ante tamaña responsabilidad, cantará en 3 de octubre en la legendaria sala Galileo Galilei, que conoce desde sus inicios su magia y destreza, y en diciembre tocará dos noches en el no menos mítico Pay Pay de Cádiz. Por cierto, a su vera, Carbonell, a su estilo, tampoco sería mal pregonero para un futuro no muy lejano, ehin? Claro, que superar a Ruibal a partir del Diez será complicado. El intrincado mundillo del Carnaval, un mundo aparte, ha aplaudido su nombramiento con unanimidad, consciente de la calidad literaria, musical y humana del personaje. Ruibal, cantante, compositor, guitarrista, será en febrero un personaje. Ni crisis, ni cambios climáticos, ni coyunturas, el Carnaval de Cádiz es una cosa muy seria. Recuerden si no la letrilla de Tres Notas Musicales, el extraordinario cuarteto del Peña y el Masa, quienes cantaron en plena Guerra del Golfo: "Hay qué ca-sualidá, ahora una Gue-rra Mun-diá, la gente no respeta ni que estamos en Carnavá".

¡Tequila pa estos chavales!

A riesgo de recaer en el gripazo, sudando antibióticos alrededor de gente en camiseta, rocanroleamos con Tequila en Jerez. Casi treinta años después de la primera y penúltima vez. Como dos chavales, Ariel y Alejo encandilaron a siete mil personas con una colección de canciones redondas. Tocaron temas de sus cuatro discos (78/81), amén de una versión de Moris, el sensacional Sábado a la Noche que, por cierto, grabaron los Tequila junto al legendario rockero argentino, no en vano pertenece al álbum Fiebre de Vivir. Fiebre de vivir, curioso. Bronquitis aguda, rocanrol terapéutico. Ariel estuvo inmenso, a medio camino entre el pop adolescente y el rock maduro, Tequila y los Rodríguez. Y Alejo se metió al personal en el bolsillo, sobre todo al femenino, claro. Y al final fue "obligado" a quitarse la gorra. Las chavalas jóvenes se sabían los grandes éxitos de memoria, increíble pero cierto, y los mayores bailaron sin apuro, recuérdese que en aquella época estaba mal visto saltar a la pista de baile a zafarse de los fantasmas a toda pastilla. En aquella linda época, en cambio, los menos prejuiciosos disfrutaban de lo que había: rock sinfónico, rock andaluz, tardojipismo, nueva ola, rock urbano madrileño, rock catalán, todo mezclado. Lo mismo alimentábamos el espíritu con Imán que liberábamos adrenalina con Tequila o, un poco más tarde, Nacha Pop, otro grupo fantástico que fue marginado incluso por sus coetáneos, por no comulgar con la superficialidad de los pelos de colores y los músicos malos. Tequila eran buenos, unos cuantos majaretas lo comprobamos en la discoteca Cisne hace tres décadas. Ofrecieron dos pases de una hora. Estuvieron arrebatadores, unos pequeños Stones con acento criollo y mucha desvergüenza. El otro día, ya talluditos, renovaron su pasión por el rocanrol con intensidad y energía. Respetando casi todos los arreglos de sus composiciones originales, prueba fechaciente de que se hicieron a conciencia, los nuevos Tequila enamoraron a la gente. Y condensaron en cien minutos la trepidante evolución de aquellos años y de aquellos chavales, que en tres discos pasaron de la crisis de la pubertad a la libertad del joven buscador de sensaciones, hasta la madurez cortada en seco. ¿Qué habría sido de ellos, y de nosotros, si hubieran durado al menos diez años? Hoy, como ayer, los Tequila vuelven sin ánimo de trascender, recomenzando de cero, con humildad y, sobre todo, ganas de pasarlo bien.
Algo significativo. Nos encontramos en la barra con un conocido músico, también de cuarenta y tantos, que ilustraba sus años de aprendizaje de esta guisa: "En casa escuchaba a Pink Floyd, y en la calle, a Tequila. Y no me perdía un concierto de Cai". En cuerpo y alma.
La foto es de Jorge Garrido, que también bailó lo suyo.

viernes, 26 de septiembre de 2008

Artificios

Fuegos de artificio. El Puerto remató la faena del verano con fuegos de artificio. Una escandalera en do mayor disfrazada de concurso pirotécnico, pa pirarse del estío a lo bestia. A partir de ahora los concursos públicos de harán en la calle, por lo visto, y además no costarán un euro al contribu, contribu, contribuyente, qué palabra más repelente. A ese lentísimo ayuntamiento le molan los fuegos de artificio, se ha sumado a la carrera de la mercadotecnia de las palabras, lanzadas al vuelo como los cohetes de la feria infinita del querer y no poder, del poder y no querer, alehop circense de propaganda masiva. Y el que la coja, pa él. A propósito de propaganda, a ver si retiran ya el cartelón de Julio Iglesias en la entrada de El Puerto, que ya sabemos que vino, cantó y triunfó.
La traca continúa, se deduce ahiora la intención de los munícipes de emplear recursos de recaudación en misiones de comunicación. Vamos, que anuncian una radio y una tele públicas, a estas alturas, con la que está cayendo, con las fatiguitas que van a pasar los medios de información privados que sobreviven a la maraña de oficinas de comunicación, directores de comunicación, controladores de vuelo de la información más sensible. Los buenos resultados de los fuegos de artificio de otras ciudades ahí están, y la tedeté también. Sálvese quien pueda. Van ya arrastrándose algunos aspirantes a salir indemnes de la quema. Qué lástima.
Demasiado artificio para sacar de quicio. Entre tanto, sube la marea, que trae algunos momentos del ayer, facturas para hacerse el longui y un porvenir aún por establecerse, amén de algunas palabritas altisonantes, declaraciones que sitúan a este rincón a la altura que no merece. Menos mal que todavía hay gente imperdible, objetores de la mala educación para lo pueblerino, insumisos de la tontería supina, familias fuera de la ley que arrojan petardos contra el mundo mundial. Cada uno lleva su razón, y los niños un bocata de nocilla, qué merendilla. El futuro ya no es suyo. Fuego cruzado bajo el cielo azul y rojo.

Septiembre 08, El Puerto, Diario de Cádiz

En un lugar de la Bienal ...

Pa que digan que el rock no es cultura. Nuestro enviado especial en la Bienal, el gran Washy, nos proporciona una crónica gráfica social de la noche de rock andaluz en la Bienal de Flamenco. Hoy toca esta foto intergeneracional, caimanes de alta categoría muscial y humana. De izquierda a derecha, el teclista de Cai, Blas Lago, imparte lecciones del Manco de Lepanto a sus congéneres Iñaki Egaña, legendario bajista de Imán, y Diego Fopiani, el más grande, batería, voz y alma de Cai, que mira a la cámara como musitando por bajini: "¿Quillo, qué, has visto qué camisa tan chula me he puesto? Estoy más wapo que la Leti en el Diez Minutos". Ni que decir tiene que Cai lo bordó e Imán puso el Califato Independiente patas arriba.
Dejo unas cuantas sorpresitas, habrá más imágenes y sonidos.

http://www.youtube.com/watch?v=CrrvWQCpz0A Este enlace corresponde al tema "Extraña seducción", de Cai, en la Bienal.


http://www.youtube.com/watch?v=aHLcUrKS8_8 Alameda y Eduardo Rodríguez Rodaway, único superviviente de Triana, interpretando "Tu frialdad".


http://www.youtube.com/watch?v=xHFrsTD8dik Ahí va "Soñé contigo/Noche Abierta", de Cai.


http://www.youtube.com/watch?v=Tb1JWY_oDps "Alegrías de Cai", de Cai.


http://www.youtube.com/watch?v=hg3sy9Ilwnk "Si tú te vas", por Pata Negra.


Cortesía de DJ Washy, a la sazón también Frutos del Islam, y Javi Montano.

http://www.rtve.es/resources/mp3/8/3/1221952869938.mp3 Y aquí, aunque parece que va un poco lento, un enlace con parte del concierto retransmitido por Radio3, que me ha enviado Fernando Lobo, que disfrutó junto a su hermano Ignacio de tan magno acontecimiento. Salud.

jueves, 25 de septiembre de 2008

Al rico rescate del planeta

Nos va a costar caro el humor del Gran Mandao de los petrodólares, que apareció otra vez con cara de malas pulgas para dar la buena nueva al mundo: Talacozamuymal. Plan rescate del rico irresponsable. Mil millones de hambrientos. Si hay pasta para salvar a los bancos, había pasta para reducir las diferencias, si hubiera voluntad no habría tanta desvergüenza, no hay derecho, ni escrúpulos, ni tan siquiera un poco de pudor, que los estamos mirando, oiga, que se les ven hasta las ideas, que no pararán hasta hacerse con el botín, a riesgo de mandarlo todo al carajo. Eso, al carajo. Los americanos del norte se abandonan al comunismo, intervención total, sálvese quien pueda. Los americanos del sur ponen la nota armoniosa, y el dedo en la llaga, y ofrecen una llamada de atención. Cuidadito con los pobres. La presidenta chilena, la Bachelet, habló con propiedad, y con solidaridad, pues su país posee la independencia que le confiere el cobre, musho cobre, nitrato de sentido común para un loco mundo. Nuestro Zapatero, en cambio, dio un poco de apuro ajeno al anunciar que vamos a adelantar a Francia en renta per cápita, per cápita de pene, que cantaban los Alegres Divorciados, gran chirigota callejera de Cádiz. Zapatero, pisha, que no eres Nadal, y dile a Bono, no al crecepelo Bono sino el de U2, que no sea tan sieso y populista, que hable menos y cante más, que se repite más que la morcilla expréss. Por cierto, a propósito del fin del mundo, ya sabemos a ciencia cierta que la teoría del calentamiento global no anda descaminá, que Al Gore da en el mismo clavo. Si don Bigote Besucón ha dicho que el cambio climático es imposible y que la verdad incómoda es mentira, y que los enemigos del planeta no viven más allá de las montañas borrascosas, no falla, lleva la razón Al Gore. Al carajo.

miércoles, 24 de septiembre de 2008

Un mojón en la escalera

Cosas de vecinos. El otro día apareció un mojón en la escalera. Olía pa to sus muertos. La gente pasaba. Qué pestazo. Vaya mierda de día. Nadie movió un dedo durante horas. Normal. Cualquiera se acercaba al lugar del crimen. No vamos a entrar en detalles morfológicos, que se te va a atragantar la tostá. Pero vamos, grandiosa la cagada, una cagada de perro en condiciones, de pastor alemán parriba. ¿Quién ha sido? Yo no ha hesho. Silbemos el Puente sobre el Río Guay. Disimula, Jacinto. Al cabo de la tarde, ya con las pituitarias pidiendo socorro o anestesiás, alguien colgó un cartel en el descansillo de la escalera. Como vivimos en el bajo, presenciamos el espectáculo en primera fila. El cartel decía algo así como "límpialo, guarro", en tono desagradable e imperativo. Anónimo gaditano. El reloj apenas marcaba las horas, el cartel hizo efecto, al fin, a la noche. Otro vecino contestaba, esta vez con boli rojo, al manifiesto endiñado con letras de ordenador. Yo no ha hesho, bla, bla, bla, cobarde, nos veremos en la calle, te voy a partir la cara, atentamente suyo, el capullo del quinto. Silencio en la sala. Chitón hasta hoy. La gente pasa y se mira de reojo, musita algo sobre el tiempo y hasta luego, Lucas. Por bajini nadie sabe lo que esas boquitas pueden largar sobre sus vecinos. El presidente de la comunidad, que es mi padre, también nuestro vecino de arriba, pondría paz si fuera necesario, gracias a su talante y sus dotes expresivas. Como buen gaditano, al presidente le gusta hablar fuerte en medio de la escalera, a ser posible con las puertas abiertas de par en par, y conoce al dedillo la vida y milagros de sus prójimos más próximos. Ya sabremos quién se ha cagao. Por mi pare que el gato ya lo sabe. Tenemos un gato callejero, adoptado sin papeles ni ná. Nuestro gato es sociológico, retrata a todos los personajes del bloque, igual que el mojón pero bastante más aseadito, pues el gato viene por la mañana a lamerse las heridas y tomar el sol, a dormir la mona y a descansar tras relajar el cuerpo y la mente, a contarle sus batallitas al mundo cuadrado. El gato, de quien se ha encariñado una vecina que le sirve comida todas las noches y le deja entrar a casa a ver la serie de la Primera, ha provocado sensaciones dispares. Unos lo ven necesario porque trinca los ratones al vuelo y se los papea en el jardín común. Otros se lo echan a sus niños pa que hagan barbaridades con el pobrecito, que menos mal que de tonto no tiene un pelo. El gato se cuela por las rendijas, por las ventanas, por la puerta cuando alguien se despista. Otros se han ofrecido ya pa pegarle un tiro y zanjar la cuestión con su "mejor" intención. Otros temen que su perrito faldero reciba un gañafón, un arrepellón o algo. Y otros pasan. Esta mañana encontramos al gato en el sillón del lugar de trabajo jugando a la pleyesteichon. Un día traerá a los amigos, malas compañías que paran ahí detrás, tras los matorrales, al borde de la ciudad, y montarán un guateque. Queda invitado el perro que se cagó en la escalera. Mientras tanto, suena la pieza de Sui Generis, que cantase también Tequila: "Mister Jones abrió la puerta, vio a su madre recién muerta, y la sangre en el chaleco se limpió. Guardó a su madre en el ropero, le puso más leña al fuego, y el invierno muy crudo se avecinó. Llamó a su esposo y le dijo: Mamá está muerta en el ropero, por supuesto yo la asesiné. Ella puso mal la mesa, le hundí un hacha en la cabeza, y la sangre el tapizado me manchó. Y Mister Jones trabajaba, y su esposa asesinaba, y los chicos correteaban por ahí. Se comían los pajaritos, los perros y los gatitos, y otros bichos que vagaban por ahí. Y llegó la Policía con dos carros y un tranvía, para toda la familia encarcelar. Yo no sé por qué sargento nos lleva al destacamento, si somos una familia muy normal, bom bom bom, si somos una familia muy normal".
Cualquier parecido con la realidad es mera coincidencia.

La Isla: crimen y castigo

Hubo cachondeíto hasta en las letras de Carnaval. El Cádiz volvió con "la cara partía", cinco goles en el zurrón y el corazón en vilo. La directiva, presidida entonces por Manuel Vieira, que sólo unos días después daría paso a la era Márquez Veiga, la que puso los cimientos del Submarino moderno, agarró tal mosqueo que la misma noche de autos sancionó a cuatro futbolistas por "falta de pundonor", que es como decir "vergüenza torera" o cataplines. Por entonces, los derbis contra el San Fernando sí que eran derbis. El Cádiz retornaba a la senda de Segunda, no se distinguía precisamente por ser el primer equipo de la provincia, y para colmo de paradojas históricas, mantenía excelentes relaciones con el Xerez. Ese año, el Cádiz rizó el rizo, cambió de directivos, entrenadores, cambió de cara y se salvó de rebote, merced al goal average, pese a perder en la postrera jornada en Murcia. Ese año al Cádiz le metieron cinco en La Isla. Crimen y castigo. Este año ambos llegan escaldados, tras un comienzo fulgurante de campeonato. Visite Cuenca.
A Adolfo Bolea, santo y seña del cadismo, le expulsaron la jornada anterior contra el Plus Ultra y no pudo jugar en La Isla, así que su memoria, la memoria selectiva que poseen los futbolistas, no ha grabado a fuego aquella derrota tan cruel. El club le sancionó, cuatro partidos le cayeron por parte de la Federación, y se avecinaron momentos críticos en el club. "Me expulsaron por dar una patada a un rival que había lesionado a Pallás", recuerda el fino jugador cadista, quien cita la alineación de carrerilla pero no retiene ninguno de los cinco tantos ni por asomo. Ese año temblaron los cimientos del Cádiz. El banquillo, que quemaba a fuego vivo, acogió a Camilo Liz, Juan Bejarano y Diego Villalonga. La Liga resultó decepcionante, el Submarino sumó hasta nueve derrotas consecutivas, pero salvó la categoría porque el Almería no derrotó al Rayov en la decisiva jornada. Un gol de diferencia. A lo justo.
Escoció tanto la goleada en La Isla que, la misma noche, la directiva mantuvo un encuentro de urgencia para "cortar cabezas", entre la indignación de la afición, que volvía con la cabeza gacha. Cuenta el Diario de la época que la medida, sanciones pecuniarias a los jugadores cadistas, pasó antes por el Ayuntamiento, Todo pasaba por el Ayuntamiento. Casi igual que hoy, pero sin libertad. Libertad sin ira. Ira, ira, un viaje barato a Cuenca ...
El legendario Bolea, que conocía a la perfección los misterios del viento de Levante y sacaba los córners con maestría, destaca que los derbis contra el San Fernando fueron de garabatillo. Durante muchos años, fue e derbi por antonomasia. "Pero nunca pasaba nada, terminabamos tomando copas los jugadores de ambos equipos, La rivalidad siempre ha existido más entre el público que entre los futbolistas. Ahora es peor", remarca, no sin antes acordarse de jugadores como Pedrusco, Lorente, los hermanos Sornichero, Arteaga padre, un chavalito llamado Manolín Bueno que voló antes al Real Madrid, el valladar García Verdugo, que vino del Xerez por 800.000 pesetas, o el portero Pepe Sierra. "Hoy el fanatismo alcanza a todos los partidos, vamos a ver qué pasa mañana, lo ideal es que sea una fiesta, que la gente disfrute de volver a ver a ambos clubes juntos en la misma categoría". Ambos llegan curados de espanto y de humildad. "El fútbol es así", sentencia Bolea. "El otro día me iba fijando en el resultado del Cádiz. Dos a cero y dije, eah, ya está todo ventilado. Llegó el primet tanto del Conquense y dije: bah, ya quedará poco. Y de pronto ocurrió lo que ocurrió y me dije: me cago en la mar ..." Con pocas palabras basta. Demasiadas palabras no sirven de bálsamo, ni de mentiras para el alma. Van ya por ahí pidiendo sanciones para los futbolistas, más cortinillas de humo, y los prepotentes de siempre se cuelgan de las derrotas ante el equipo de Cuenca. De Primera a Segunda B en un pis pas, a ver si nos aclaramos. Por cierto, ya que hablamos de rivalidad y de prepotencia, bromean con cierta sorna los chilenos sobre los argentinos, a quienes consideran "agrandados", tan "agrandados" que se pavonean de haber salido subcampeones de Las Malvinas. Vaya gracia. Hay gente pa tó. Mañana habrá guasa en La Isla, yo que tú me bajaba en Bahía Sur a hacer unos mandaos. Derbi de cercanías, haya paz, tranquilidad y buenos alimentos. Ya pasaron los tiempos en que los cadistas volvían de campo isleño con "la cara partía", pero no metafóricamente sino literalmente, oiga. Haciendo Bahía, que es gerundio.
Curiosamente, gajes del destino, un año tan horroroso fue seguido de una gran cosecha de fútbol. Márquez Veiga y Riera rozaron el ascenso a Primera . El alcalde José León de Carranza ordenó a Márquez Veiga hacerse con las riendas del club, como pa negarse, y el flamante presidente no tuvo otra ocurrencia, feliz por otra parte, que firmar al entrenador del San Fernando, José Luis Riera, el mismo que había propinado tal paliza a los amarillos meses antes. "El fútbol es así". La mayor parte de la plantilla cambió de aires, no así el eterno Bolea, quien vio cómo ese año el Cádiz lograba su primer punto más allá de Carranza con un empate en La Isla. Visite Cuenca. Cuenca es única. Tierra de ajoarrieros, truchas y zarrajos, vaquillas enmaromadas y desfiles de peñas que, curiosamente, celebró sus fiestas patronales el domingo 21 de septiembre, fecha histórica, la conquista de los cristianos y el 2-3 en Carranza.

Septiembre 08, Diario de Cádiz

domingo, 21 de septiembre de 2008

El penúltimo vals

Magia e imperfección. Esta película se estrenó en Cádiz hace treinta años, en un ciclo de rock organizado en la Casa de la Juventud, y fueron cuatro gatos a verla. Iba más gente a los discoforums. Iban a escuchar discos. El último vals, ver para creer, ver para escuchar. Hoy como ayer, pura leyenda del cine musical, la cinta ofrece un monumental concierto, la despedida de The Band, en el Día de Acción de Gracias de 1976. Primera incursión de Martin Scorsese en el mundo del rock. El director colocó siete cámaras en torno al escenario del Winterland, San Francisco, y firmó un documental soberbio, crudo, directo, sobrio y algo melancólico. Levon Helm y Robbie Robertson, los líderes del grupo, ya no se hablaban. Los artistas invitados se pusieron hasta la colcha, desde Neil Young, que inicia dos veces "Helpless" con estalactitas en la napia, hasta el enorme Van Morrison, que pega patadas al aire. Eric Clapton, que pasaba por momentos bajos, causa escalofríos con su guitarra, Emmylou Harris se muestra sencillamente como la reina del country, La Banda suena compacta e inspirada en la escena, y sus músicos favoritos, a modo de compendio enciclopédico, dejan a la gente sin respiro. El concierto sigue vivo. Tres décadas después, Bob Dylan mantiene su esencia. Esos días del 76 salía de un breve retiro, con careto de pocos amigos, para realizar una sensacional demostración de arte accidental, en la peli se ve, se siente a los músicos, se palpa el caos ordenado de The Band, a quienes les basta con mirar de reojo a Dylan para conocer los siguientes pasos. Dylan, cómo no, puso objecciones a Scorsese. A última hora se negó a que filmasen su pase. Alarma general en el Winterland. Dylan iba a estrenar su fallida película de arte y ensayo, "Renaldo y Clara" y le entró el siroco. Hubo que suplicarle en los camerinos. "Bueno, vale, pero sólo un poco". Dylan colocó a dos matones junto a las cámaras, marcó estrechamente a Scorsese para limitar la grabación. No aparece su entrada, ni la primera pieza. Eso sí, "Forever young" y la postrera "I shall be released", cantada al unísono por todos los participantes, no tienen precio. Scorsese no se ha superado desde entonces. Y mira que lo ha intentado, otra vez con Dylan y los Stones, pero The Band, que no tuvo suerte a lo largo de su carrera, era una banda de cine. Y esta película, que se tradujo en disco triple, la banda sonora del rocanrol por antonomasia. Siempre joven.

Septiembre 08, Cultura, Diario de Cádiz

sábado, 20 de septiembre de 2008

Cabeza de ratón, cola de león

Tres de tres. Vamos a por el Conquense de José Luis Perales. Un velero llamado libertad. Cabeza de ratón, cola de león. Como dijeron el otro día en Teleteo, tó emocionados tras la parada militar aérea, Cádiz ya es capital del cielo. Pasó la cortina de humo, se fueron de rositas los malandrines de aquí y los "mangatarios" de acullá. Llevarán el tema al Congreso de los Diputados, con la que está cayendo. Aquí cada uno oculta sus vergüenzas como puede, hay que tenerlo muy en Cuenca, ya lo advirtió Vilches. Lo mismo en nueve meses la situación embarazosa se torna en fiesta infantil y saca la cabeza el niñato de Segunda, A o B, por Hache o por B, aunque sea de penalti. ¡No, de penalti no! El otro día preguntaron a Enrique sobre las razones de la caída en picado del Submarino y el hombre se mostró sintético y castizo: "Se juntaron las cosas". ¿Qué ocurrió en el vestuario, buen hombre? Muy simple, divide y perderás. Demasiadas diferencias, demasiado paripé, aprendiendo de los errores que es gerundio. Oh, Cádiz, un equipo con muchos recursos. Y poca vista en los despachos y las teles. Este año, como muchas décadas atrás, hay que esperar al Estudio Estadio del Lunes o al As Color de los martes para ver al Cádiz, no tiene suerte Teleteo, gran exclusiva mundial. Pronto podría haber más noticias, prende la tele, trinca el control remoto, dirige a tus jugadores, como en la play station pero pirata total. Ya queda menos pa que el Cádiz esté de nuevo donde merece, en Primera. Dicen que subirá sin pasar por Segunda, sus cohone ahí. ¿Cogerá un atajo? Convendría no tomar el atajo de la prepotencia, al final el camino se hace largo y tortuoso. Y te dan hasta cosquis.
Ya no se sabe quién es la nuestra, Canal Sur u Onda Cádiz, dos maneras de entender la vida alegre y divertida, y de arrojar el dinero de todos por la borda, o de lucirse, se están luciendo, pisha, Canal Sur no echa cuentas a la Segunda B. La temporada pasada comenzó a retransmitir encuentros del Pozo en la jornada vigésimo segunda, un poquito tarde, ¿non?, y perdonó la vida al personal que no participa del ppv, pagar para vencer, ni de los chanchullos de la Sexta. Así que Teleteo, ni corta ni perezosa, se encuentra negociando un posible trasvase para hacerse con los derechos de televisión del Submarino. A este paso termina dando la final del Falla, atento a la jugada. Cuentan que Teleteo estaría dispuesta a ofrecer los choques del Cádiz hasta por internet, jugando por la banda ancha, agenciáte un adsl en condiciones no te vayas a quedar colgao en lo mejor del querer. La gente se había mal acostumbrado, un estadio de Primera, una afición de Primera, un equipo con muchos recursos. La cura de humildad no ha hecho sino comenzar ¿Mushasho, por dónde eshan al Cádiz?
El publiquito de hoy se ha habituado a asistir a su propia existencia por la tele, no concibe una tarde sin rayos catódicos, no se cree que años atrás sólo retransmitían un partido de Primera, luego dos, ahora todos, hasta la Segunda B de otros grupos, con las castas de Canal Sur. "Hay que saber leer los partidos", apunta Pejiguero, como si el fútbol fuese enciclopédico. "Contra" menos cultura, más lectura de partidos. El Cádiz parece un libro abierto, tó transparente, y la gente va todas las tardes a las bibliotecas públicas, a leer partidos. "Ayer me leí enterito el Antequera-Puertollano". Premio.
Afilan las plumas los poetas populares. Ya tenemos pregonero, el gran Javier Ruibal, pero queda mucha tela por cortar, rimas y leyendas populares, se admiten apuestas sobre el color de las coplas del año que viene, cien euros a quien rime en condiciones a Toedtli, el ariete con cara de vieja, quien necesita unas pocas de sesiones del wiji pa perder un poco de peso específico. Eso sí, ya lleva el doble de goles que Gastón Casas, venido a menos con la crisis inmobiliaria. ¿Qué crisis? Un equipo con muchos recursos trae a un tipo con "más menos" Gracia que qué y de pronto el equipo halla su estado de gracia sin pamplina alguna. ¿Alguien entiende si acaso de la misa la mitad? Ya van por ahí largando fiestas los listos de turno, los mismos que el año pasado confiaron ciegamente en el innombrable, y luego en el impresentable, y luego en los imponderables. Hable, no se calle. Cabeza de ratón, cola de león, he ahí el dilema. Un velero llamado libertad. ¿Y cómo es él? ¿A qué dedica el tiempo libre que le deja su condición de prejubilado del sector churretoso? ¿En qué lugar se enamoro de ti? Como en los anuncios del Cádiz, Parte de mi Vida, los dichosos anuncios con "más menos" gracia que qué, el Cádiz es un ladrón que me lo ha robado todo, canta Perales turulato perdido, no está colgao JLP, mezclando letras de baladas y pasodobles, tres por cuatro, tres de tres, vamos a por otro perrito piloto.

Septiembre 08, Submarino Amarillo, Diario de Cádiz

viernes, 19 de septiembre de 2008

Un plan de cojones

Ministerio de Economía y Hacienda
LEG. DEL ESTADO
Rango: REAL DECRETO
Organismo emisor: Ministerio de Economía y Hacienda
Número de la disposición: 845
Fecha de la Disposición: 23/05/2007
Fecha del BOE: 23/05/2007
Marginal del BOE: 14963
Número de LA LEY LEGISLACION: 3546
VOCES
DERECHOS FUNDAMENTALES Y LIBERTADES PÚBLICAS


BOLETIN OFICIAL DEL ESTADO 23/05/2007


El Sr. Presidente pondrá en marcha en los próximos días un Plan Nacional de Empleo.
EL Plan de Emergencia Nacional de Empleo, que será conocido por sus siglas como PENE, tiene por objeto parar la crisis actual reduciendo la plantilla estatal.
Para que tal reducción se produzca de la forma más justa y equitativa posible, se acelera la jubilación de los empleados de mayor edad, facilitando la retención de los jóvenes a quienes se les confiará el futuro del Estado Nacional. Este mecanismo de selección entrará en vigencia inmediatamente y se llamará Jubilación Obligatoria De Empleados y Trabajadores Estatales (JODETE).
Los empleados JODIDOS tendrán la oportunidad de buscar otros trabajos dentro del Estado. La única condición para que puedan iniciar la búsqueda, es la de requerir al PENE una autorización para que se revise si su situación laboral es compatible antes de jubilarse.
Este período de evaluación será llamado Plan Acelerado de Jubilación Anticipada (PAJA).
Todo empleado que hayan sido JODIDO y esté en PAJA, puede solicitar una revisión final. Esta última fase se denominará Posibilidades Optimas Laborales de Volver a la Organización (POLVO).
La política del programa estatal establece que los empleados pueden disfrutar de un solo POLVO y de dos PAJAS, pero pueden ser JODIDOS tantas veces como el Gobierno de España lo juzgue necesario, por la acción del PENE del Sr. Presidente.

Palacio de la Moncloa, 23 de Mayo de 2007





Jose Luis Rodríguez Patatero
Presidente del Gobierno

martes, 16 de septiembre de 2008

Javier Ruibal, pregonero del Carnaval de Cádiz

"Me siento más gaditano que nunca". Nervioso, con las ideas revoloteando "a cien por hora" y mariposas en el estómago, Javier Ruibal reaccionaba con inusitada ilusión al nombramiento. Será el pregonero del próximo Carnaval. Aceptó del tirón la oferta de Teófila Martínez. "Me honra, es una alegría que te propongan ser la llave de la fiesta". El segundo portuense que obtiene tal honor, tras Rafael Alberti, que lo hizo en 1981 y de cuya muerte se cumplirán precisamente diez años en 2009. Ruibal, escasas horas después de recibir la llamada de la alcaldesa gaditana, todavía le daba "mil vueltas a la cabeza". "Ahora me queda dejar el pabellón bien alto y darle a los gaditanos un pregón que guste y divierta".
El cantante, guitarrista y compositor Javier Ruibal, que a sus cincuenta y tres años atesora un indiscutible prestigio en el entramado musical, granjeado desde 1978 a través de una prolífica y exquisita trayectoria, ya fue pregonero del Carnaval portuense, y también participó en el espectáculo de Pasión Vega que prologó dos años atrás la fiesta gaditana, "pero una cosa es ir de tapadillo", bromea, "y otra muy distinta salir ahí (plaza de San Juan de Dios) a pecho descubierto".
Muy aficionado a todas las cosas de Cádiz, y amante del Carnaval en todas sus facetas, Ruibal recorre cada año las calles de La Viña y alrededores para paladear la fiesta en primera persona. Disfruta una enormidad de la frescura y calidad de las chirigotas callejeras, no en vano se distingue por su amistad con Los Fantasmas, pero también valora el concurso del Falla. "Con los años, ir al teatro Falla y escuchar a las agrupaciones, sin amplificaciones y con total naturalidad, me produce infinitas emociones, muchas y muy diferentes. El Falla también posee su encanto. Yo no soy partidario de los concursos, pero el certamen del Falla es mucho más que eso, es una exhibición del arte de Cádiz". Arte que impregna numerosos pasajes de la obra de Ruibal, basta citar canciones como "La Reina de África" o "Toíto Cádiz lo traigo andao", que contienen guiños a la Tacita de Plata y el espíritu de la tierra condensado en ritmos hermanos y luces de alta mar. La música de Ruibal encaja en Cádiz (y su departamento) a la perfección ("me siento muy de aquí"), por su luminosidad y la apertura de miras, la multiculturalidad, como se dice ahora, que precisamente se asoma al mundo.
"Será un placer", reiteraba algo azorado el artista, quien, a pesar de ser un poeta buscador de aromas sugerentes y belleza, no hallaba palabras para definir el momento. "Será un recuerdo imborrable, un acontecimiento único. Vamos a ver cómo sale la cosa", aputaba con su habitual humildad. "Mi compromiso, a partir de ahora, se centrará en configurar un espectáculo que, en sí mismo, tenga calidad y agrade al personal, un pregón que se sitúe a la altura de lo hecho hasta ahora". Su teléfono celular echaba chispas, literalmente, desde que el Ayuntamiento dio a conocer la buena nueva y Ruibal rimaba con más veras con Carnaval, que, ya se sabe, carece de rival.
Más gaditano que el mismísimo Moré, tocado ya por la varita mágica del febrero por venir, Ruibal compatibilizará tal responsabilidad, que en Cádiz se antoja más importante que un discurso ante la Onu, con la composición de nuevos temas y la preparación de un álbum en directo con tintes clásicos. Proyectos "menos concretos que el pregón", cuya estrella no dejaba de volar por su mente, como las aves del paraíso.
Con siete discos a sus espaldas, desde el descatalogado "Duna" hasta el celebrado "Lo que me dice tu boca", pasando por "Pensión Triana" y "Contrabando", Ruibal puede presumir de disponer de una carrera intachable, peculiar e independiente, plagada de obras sobresalientes y pasitos bien dados, "sordo a los cantos de sirenas industriales", como escribió Felipe Benítez Reyes. El escritor roteño, otro "novio del mundo" que tal baila, maestro de la palabra, define así las dos caras de Javier Ruibal: "Tímido y poderoso, cosmopolita y arraigado, íntimo y expansivo, melancólico y fiestero, barroco y popular. Ruibal hace música con todas las músicas, porque la patria de los músicos es el universo mismo". Eco sefardí y magrebí, influencias de rock y jazz, folklore hispanoamericano, flamenco, blues ... Ruibal toca todos los palos en su particular mundo creativo. Medalla de Andalucía, embajador cultural de este país por medio mundo, heredero de la generación del 27, compositor de temas para Ana Belén, Martirio o Pasión Vega, amigo íntimo del gran Sabina, que le abrió algunas puertas en los años ochenta, y de los poetas que veranean en Rota, el artista portuense se atrevió con los ritmos puramente chirigoteros en la banda sonora de la película del gaditano Pablo Carbonell "Atún y chocolate", esos "atunes en el paraíso" que han dado la vuelta al planeta Cádiz. Pero Ruibal es capaz de tocar el suelo y el cielo, de bajar a las catacumbas de la tradición y alzarse a la modernidad del sonido intransferible. Lo mismo reinventa el folklore mundial, desde su particular visión que le confiere guardar un trocito de cada continente en la cabeza, hasta ponerle poesía a Erik Satie, de llenar de oloroso y fino las bodegas del Vaporcito de El Puerto o saborear la gloria de Manhattan. Sones de ultramar para varias generaciones de sibaritas. De Cádiz a Nueva Orleáns, de Chicago al Caribe, de El Puerto a Cai. Ruibal, capaz de convertir lo sencillo en obra de arte, cualidad por cierto muy carnavalera, siempre se ha mostrado orgulloso de que los autores del Carnaval gaditano seleccionasen sus músicas para confeccionar sus popurrís. Antonio Martínez Ares, precisamente el pregonero de la última edición, fue el primero en hacerlo, cuando sus Calabazas entonaron el canto a la Tierra de Ruibal.
Para colmo, el hijo de Javier, de su mismo nombre, toca la percusión desde muy pequeño (ahora integrado en el grupo de su padre) y su hija Lucía baila de categoría, hace poco actuó en la sala Pay Pay de la calle Silencio.

Septiembre 08, (Diario de Cádiz)
La foto, en la que Javier se asoma al mundo a través de las máscaras de culturas diversas, es de Fito Carreto

viernes, 12 de septiembre de 2008

El mundo por Montero (la fiesta del fútbol)

El Vapor irrumpe con sus tres bocinazos de rigor. Cuidado con la cabeza. El viaje más breve, de Cai a El Puerto y viceversa, sugiere ecos futbolísticos, personales e intransferibles. Una leyenda del fútbol de la Bahía, Enrique Montero, trae a la memoria derbys para el futuro y un caudal de magia y precisión a través de los ríos del paralelismo del balón: Guadalete, Guadalquivir, clase y distinción, alegría de vivir y cantos truncados, goles al olvido y lesiones que marcaron una época. Montero habla como jugaba, confiesa su amor a los colores que se enfrentan este fin de semana, por primera vez en muchos años. Renueva su pasión por el fútbol mancomunado. Un hombre de Primera a quien no se le caen los anillos, el hombre que supo vencer a la adversidad tras sucumbir al dichoso mal de los ligamentos cruzados. Cádiz y Rácing Portuense, en clave de salud deportiva, parné maldito y amor mutuo, ligan muchos sentimientos cruzados. Quien no ha visto jugar a Enrique Montero no sabe lo que es una tarde de recortes en seco, pases al hueco y toques de distinción. El mundo por Montero. Lugares comunes de un destino de ida y vuelta, tan hermoso como cruel. Como la vida misma.
"El sábado, en la grada, tendré una serie de sentimientos encontrados", reconoce el fino estilista que jugó en ambos clubes, amén del San Fernando y del Sevilla que le catapultó a la gloria del deporte. "Hombre, que gane el mejor, pero yo prefiero que lo haga el Portuense porque va a necesitar más puntos a lo largo del campeonato. El Cádiz estará arriba, pero el Rácing intentará hacerlo lo mejor posible, con altas miras pero consciente de lo complicada que es la Segunda B".
Montero augura un "bonito derby", piensa en voz alta sobre la ilusión que despierta este año la Liga entre los aficionados de la Bahía. "El fútbol de la Bahía saldrá favorecido por los derbys de este año. Y el partido del sábado, gracias a la impresionante afición del Cádiz, se presenta quizás con un estadio lleno a rebosar, como nunca, el Cuvillo ofrecerá una de las entradas históricas. Hubo llenos en partidos de Copa del Rey (Atlético de Madrid hace años, Valencia hace poco), pero en Segunda B pocas veces se vivirá un acontecimiento parecido".
"Que sea una fiesta del fútbol", que el fanatismo quede arrinconado para siempre, que los mayores den ejemplo, que "los niños puedan ir al fútbol con sus padres", son los deseos más urgentes de Montero. "Que no haya grescas, que las aficiones compartan una tarde inolvidable". Amén.
Montero nunca jugó en un campo con césped artificial, y eso que pisó multitud de campos a lo largo de su brillante carrera. "El césped artificial no termina de hallar la aceptación general, no resulta tan conseguido como el césped natural". No hay color entre el fútbol natural, del que Montero siempre fue un adalid con mayúsculas, y la vida de laboratorio. "El ritmo de juego parece diferente, el balón adopta una velocidad rara, un bote extraño. Este césped es ideal para los chavales de la cantera, pero no para los profesionales", sentencia desde su experiencia. No en vano, además de ejercer de futbolista, que como los toreros nunca se retiran del todo, Montero lleva muchos años vendiendo productos deportivos, así conoce el paño al dedillo, desde "las botas sintéticas de hoy, que no les llegan ni a la suelas de los zapatos a las botas de canguro de antes", hasta los balones actuales, balones demasiado livianos, "con una fina capa de cuero" y poco más. Balones contra natura, la dictadura de las franquicias del fútbol como negocio. El otro fútbol, el de corazón, llama la atención a Montero en todas sus vertientes, desde la pasión provincial de este año hasta "la euforia que se apodera de la afición española en estos días, gracias a la victoria en la Eurocopa. Hay que aprovechar esta ilusión reinante por el bien del deporte". A favor del viento y del destino.
El destino quiso que Enrique Montero, quien a sus cincuenta y cuatro años, nacido en el 54, sigue poniendo apellidos a su tienda de deportes del simbólico Camino de los Enamorados portuense, fuese rechazado por las categorías inferiores del Rácing y firmase del tirón por los juveniles del Sevilla. Otra perla al limbo, la cantinela se repite cada año. El infantil de San Marcos tocó el cielo del primer equipo del club hispalense con dieciocho años, luego supo foguearse en el San Fernando para volver al Sevilla por la puerta grande. Cuarenta goles en 247 partidos en Primera. Y varias lesiones funestas, una de ellas previa al Mundial del 82. Tres veces internacional, una victoria histórica en Wembley y, de pronto, la luz de Cádiz a su disposición. Cuatro años brilló Enrique en Cádiz. Manolito Cardo lo trajo cuando el gran Pepe Mejías voló alto, allá por 1986, y tuvo tiempo de disfrutar de la mejor temporada de todos los tiempos, la Liga de Víctor Espárrago en Primera. Así que hasta que, a los treinta y seis años, por fin, se enfundó la camisola del club de su tierra, el Portuense, hasta su retirada en el 92 de fastuosos recuerdos. La historia se escribe pronto, se vive a tragos, se cuenta despacito, se juega en un campo sembrado de esperanzas. Montero rubricó páginas hermosas del fútbol hispano. Arte a raudales, seriedad profesional, visión de juego, y muchas casualidades juntas.
Montero confirma la gran casualidad de aquella noche del Trofeo Carranza. El Sevilla eliminaba al Palmeiras pero perdía a su gran pelotero por mor de una lesión desgraciada que impidió al portuense fichar por el Barcelona. "Estaba hecho. Esa misma noche me iba a Barcelona". La noche anterior, Miguel Muñoz tocó la puerta de la habitación de Montero, en el hotel Jerez. Joan Gaspart, por entonces vicepresidente del club culé, aguardaba abajo. El Barsa ofrecía el doble a Montero. Y pagaba 150 millones de pesetas al Sevilla y dos jugadores: Esteban y Lobo Carrasco, el traspaso más caro de la historia del Sevilla. No pudo ser. Montero iba a ser sustituido, ya con el partido a favor, pero una entrada criminal de un zaguero carioca truncó su futuro inmediato. "Cosas de la vida", apunta Montero, que no vive del pasado. Estos días sólo piensa en el sábado. Su corazón late entre dos aguas.

Septiembre 08, Submarino Amarillo (Diario de Cádiz)

Milagros

El día que cierren los bancos, por orden facultativa, un cielo de nubes negras se abrirá a la vida contemplativa, la crisis dejará de ser un problema artificial y el personal volverá al barbecho. A lo hecho, pecho. Dicho y hecho. Nuestra Señora de los que llegan a los justo a final de mes se ajusta las gafas ahumadas para observar el panorama black & guay. Y lo que te rondaré, morena. Corren tiempos de limosnas millonarias y fullerías políticas. Una ayudita, por favor. Los ricos también lloran. El modelo económico mentiroso, estilo divide y vencerás, se va al mismo garete, ya era hora. Una de catástrofes. Ya venden entradas para la catástrofe mayor. Dolby sistem. Los listos de siempre acumulan pa cuando cese la tormenta, mientras tanto, mientras los tontos nos tragamos tanto cuento chino. ¿Escampará algún día? El dinero será papel mojado, como la palabra de los políticos, y las personas recuperarán nombres y apellidos para terror y vergüenza ajena. Apocalipsis chungaleta, oiga. Por ahí van sorteando coches y pisos, hay que tener mal gusto y escaso sentido de la oportunidad. Rife usted un poco de felicidad, verá qué alegría más grande. El día que salte la banca, estaremos todos rodeados. Salgan de uno en uno y con la frente bien alta, ahí, ahí, con orgullo y dignidad. Ya pagará el inglés el vino que se ha bebido. Por cierto, ¿ahora de qué morirán las familias que durante tantos años hicieron equilibrios en el alambre del qué dirán, a costa de la economía sumergida? Tanto rollo, tanto paripé, tantos bancos prestándose al juego fácil, blanqueando que era gerundio, especuleichon a tomar por saco. A estas alturas, hay gente que debe hasta de callarse. ¿Y el chalecito de las afueras? Aguardando que recalifiquen el cielo. ¿A cómo está el metro cuadrado de insatisfacción? Más duro será el pellejazo. El día que las personas tomen sus propias decisiones, ¿qué será de las ciudades? El Puerto será más verdadero. Las calles del centro no dormirán solas. Y en los contornos del tiempo quieto, la mala hora dará paso al fin del sueño. Milagritos despertará liberada.

Septiembre 08, El Puerto (Diario de Cádiz)

jueves, 11 de septiembre de 2008

Piratas en el hipermercado

¡Piratas en el Cortinglé! Deuvedés piratas de Bob Dylan, Bruce Springsteen, Police, Tom Petty y numerosas vacas sagradas del rock de todos los tiempos all over the world en un momento dado. ¡El Cortinglé vende deuvedés piratas! El enemigo en casa, que sea por muchos años. En las últimas semanas, la gran superficie, y otras de sus mismas hechuras, ofrece de refilón jugosas obras maestras, acaso sin saber su procedencia alegal o en poder de ciertas licencias para despacharlas. Pero el concierto de Dylan en Woodstock 94, el homenaje a sus treinta años de carrera en el Madison, un deuvedé con temas sueltos en directo, una biografía audiovisual y el concierto de las Leyendas de la Guitarra en Sevilla no disponen de la autorización del trovador ni de su casa discográfica. Eso, fijo. Disfrazados de oficialidad, en algunos casos, o descaradamente piratas, en otros, estos cinco ejemplos bastan para ilustrar el actual caos de la industria, que da palos de ciego en busca de la hegemonía perdida quizá para siempre. Las estanterías se desnudan de compactos y se llenan de deuvedés. Algo es algo. El concierto de Woodstock se me antoja extraordinario, el tributo a Dylan en el Madison viene muy disimulado, sin apenas créditos, y contiene el tema de Sinnead O'Connor abortado por el público, que no incluyó el disco ni el video. En el concierto de la Expo de Sevilla, donde Dylan estuvo errático, confuso y remolón, se omite la participación de Miguel Bosé, menos mal, que se coló de rondón como organizador de aquello y fue "amablemente" invitado a najarse por el público. Cantó "Sevilla", horror, envuelto en bailes de salón. Hay otros deuvedés aún más irregulares como los que piratean por el morro el Unplugged del 94, alguna maravilla como Simple Twist of Fate y Hurricane en la tele yanqui o escenas descoloridas del Concierto para Bangladesh, junto al recordado George Harrison. Ahora mismo, merced al youtube, cualquiera puede ponerse pirata.

sábado, 6 de septiembre de 2008

Los padres del rock andaluz, en la Bienal

Ojo al cartel. Los padres del rock andaluz, en la Bienal de Flamenco de Sevilla. Y con la reaparición del único superviviente de Triana, Rodríguez Rodway. Tocará veinte minutos cada artista, aunque lo bueno sería eternizarlo y que nos dieran las tantas. Sorprende con desagrado la distancia sideral que separa a Lole de Manuel, en el propio cartel, y que figure Pata Negra pero no Veneno, de lo cual se deduce que no participarán Kiko y Raimundo. Ojalá deduzcamos mal y sea una reunión total. Imán, Cai y Guadalquivir confirmarán sus felices retornos con piezas nuevas, las tres formaciones legendarias pretenden editar nuevos discos para no vivir de las rentas, aunque la historia y los aficionados, creo yo, les permitan de todo a estas alturas, lo mismo que a Alameda, Tabletom y, por supuesto, los pioneros, Smash. Uf, demasiadas emociones juntas. Como en los festivales de doce horas de antaño, pero en microcápsulas. Ojo al cartel. Todo un lujo. Consuma rock andaluz. Y descubra también nuevos talentos, que los hay a manojitos en cada uno de los rincones de esta tierra, no sólo de rock con raíces, sino de todas las hechuras posibles. Ni que decir tiene que el festival contará con ausentes de relumbrón: los muertos, desde Jesús de la Rosa y Tele Palacios hasta Silvio, y algunos grupos señeros como Medina Azahara, que siguen al pie del cañón. La cita será el 20 de septiembre en Sevilla. La noche anterior, Cai, Onza y el genial Malikian tocarán en el Festival de Músicas Avanzadas de Jerez, en el bellísimo Alcázar donde, precisamente, reapareció Imán hace un par de años. Ahí, y en el festival de Montilla, se encendió la mecha del rock andaluz bumerán.

miércoles, 3 de septiembre de 2008

Un mundo peligroso


Ya lo dijo el Supermatón Bush para mostrar su apoyo al rey de los papafritas: "Vivimos en un mundo peligroso". No, espérate. Metiendo más miedo al once ese, marchando otro negocio de metralletas y mala conciencia, no les bastó con forrarse a costa de su pueblo, van a por otro perrito piloto. El peligroso Bush, que ha destrozado la economía de medio mundo con su paranoia al servicio del parné fácil y criminal, piensa promocionar desde ya los mejores campos de concentración del planeta, Guantánamo, Cuba Libre, Bacardí con Limón, los Muertos del Último, huracanes con nombre falso, tormentas en el desierto, precios a la altura del betún, fábricas de crisis, ceremonias de confusión. Estos días vuelve el mundo peligroso, tras sus pacíficas vacaciones, y lo hace con negritos entrando en Europa a bordo de pateras, tiroteos de todo a cien, mucha mierda y demasiadas faltas de ortografía. Vivimos en un mundo peligroso y necesitamos que usted tenga miedo para actuar a nuestro antojo, cobrarles la convidá y planificar el futuro de la gran oligarquía del mundo. Por cierto, el amigo del peligroso Bush parece que anda metido en líos de faldas multiculturales e incoherencias, digamos que está probando su propia medicina, no sé qué tendrá más peligro, un bulo sobre su vida privada o el gran rumor sobre las armas de destrucción masiva ... el del Bigote huye hacia adelante, con los cuernos, mi capitán, tras cubrirse de gloria al decir que E$paña escribió una de sus más hermosas páginas de la historia por mor de la foto de las Azores. Doscientos muertos. Quieren más muertos. Los muertos dan mucha vida. Los muertos alegran las cuentas corrientes de los más vivos. Los muertos llenan telediarios sin necesidad de currelárselos.
Mientras, al otro lado del asombro, la crisis españolita se muere de risa, los diarios buscan parados, nuevos ricos hundidos en la miseria, jamones de pata negra descoloridos y morbo, mucho morbo. No buscan la razón de esta sinrazón, pa qué, no se vaya a enfadar el anunciante. Crisis por los cohone. La soberbia del caprichoso Occidente. ¿Y los pobres de verdad? ¿Dónde están? ¿Suplantados por peticionarios de becas fraudulentas, ocultos en el camión de la basura mientras los pobres ricos lloran su mala fortuna, ya no podrán invitar a mil personas a su boda, ni comprar siete coches, ni callar al niño con regalos sin fin, ni fardar ante el vecindario, ni mirarse al espejo, porque el espejo se ha roto.