viernes, 3 de octubre de 2008

Haciendo el Canelo

Canelo murió hace seis años, fue atropellado frente al hospital donde permaneció doce años esperando a su infortunado "dueño". Canelo era el perro de todos. Todo Cádiz se miraba en los elevados instintos de Canelo para sentirse vivo. La gente mimaba a Canelo porque era suyo. El chaval, que además ejercía de playboy por los contornos de la Residencia, supo ganarse el cariño general en un rincón tan sensible, la puerta de la clínica gaditana, imagínate cuántas historias vivió Canelo en carne ajena, cuántas miradas intercambió y cuántos silencios pudo compartir a lo largo de los días, las tardes y las noches. Canelo poseía un reloj y una agenda invisibles, amén de un sentido común nada humano. Canelo fue atropellado a la vera de la parada de bus, ya era viejo, veía regulá y sus movimientos en nada recordaban a aquel perrito mozo que llegó una mañana para quedarse. El conductor se dio a la fuga. Pero cuentan que se arrepentirá de por vida, que no lo hizo adrede, que pasó muchas noches sin conciliar el sueño, que soñó con Canelo una y otra vez ...
No recuerdo de quién es la foto, pero doy fe, es el auténtico Canelo, el Paul Newman de la Residencia.
Vecinos, ecologistas, amigos y familiares del fallecido reivindicaron del tirón un homenaje al perro del pueblo, como lo bautizó Antonio Burgos en una columna. Canelo fue capaz, incluso muerto, de unir a las dos federaciones de vecinos, grupos políticos y asociaciones de diversa intención. El concejal popular José Blas Fernández impulsó decisivamente la iniciativa y Canelo tiene una calle en Cádiz, junto al hospital, y nadie la ha tocado, nadie la ha pintarrajeado en más de cuatro años. Pepe Blas, que así llaman al peculiar edil gaditano, apareció en un documental de la BBC en torno a la figura de Canelo, a quien, por cierto, le salvó la vida años antes. Pepe Blas, a instancias de los ecologistas, firmó el indulto de Canelo, perro callejero por antonomasia, perro sin papeles, el perro de todos. Las malditas perreras han truncado muchas vidas demasiado pronto, pero jamás pudieron con Canelo, Tuvo que ser un puto coche. Un golpe, pero nunca el olvido. Canelo, dice la leyenda, jamás olvidó a su "dueño", le esperó cada día, pero su "dueño" nunca bajó. La fábula sigue viva en Cádiz. Pepe Blas sigue trabajando en el Ayuntamiento, muchos lustros ya. Nadie le ha explicado aún por qué se cayó de las listas del Senado, pese a su indiscutible labor, que han elogiado hasta sus adversarios socialistas. Por cierto, Pepe Blas y el socialista Federico Pérez Peralta protagonizaron un rifirrafe verbal que recordó viejos tiempos, cuando los políticos sabían insultarse con arte y categoría, con clase o sin clase pero con calidad. Resulta que Federico, otro tipo peculiar que luce barba de nazareno y calcetines de colores, calificó la tarea urbanística de la alcaldesa como "Derribos Martínez", ya se sabe que doña Teo, que no se anda con rodeos, quiere tirar medio Cádiz pa que resurja de sus cenizas en 2012. Pepe Blas, hombre irónico con retranca y agilidad mental, contestó del tirón y acuñó el término de "Cierres Peralta". Derribos Martínez, Cierres Peralta. El "age" de Cádiz, doble sentido con denominación de origen. "Po" a ver si unos y otros se dejan de hacer el canelo, que Cádiz también lleva años esperando.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Qué arte joío, lo estás bordando. ¿Tú no le estarás echando ná raro al café por las mañanas?.
No obstante, si Canelo hubiese sido gato Teófila ya lo habría cortao los güevos y le hubiera practicado la vasectomía por mucho que bramara el Foro en defensa de la Familia, aunque si se lo conculca por alguna ayudita más para la restauración de la Catedral lo mismo miran para otro lado, o aquello de que tu mano izquierda no sepa lo que hace la otra… y no me desvíen el tema hacia el onanismo.
Qué bien retratas a estos dos personajes del submundo político de Cadi-Cadi, ambos llevan un buen montón de años democráticos pegados al Ayuntamiento como si fuesen caciques liberados del minifundio insular gaditano. Uno que sí su abuelo, otro que si el claqué... y al final la casa por barrer y los intereses gaditanos sin remendar
Si bien la providencia le tiene puestos livianos castigos, al Sr. Blas no poder recordar su condición de senador aforado en cualquier litigio, y a "Chiqui" las listas alternativas que le crecen en su partido.
En fin, mis más sinceras felicitaciones

Anónimo dijo...

Hola Enrique. ¿Has leído "Tombuctu" de Paul Auster? Es una novela que parece inspirada en la historia de Canelo, aunque ambientada en los Estados Unidos. saludos.

Enrique Alcina Echeverría dijo...

Perdón por la demora, contesto del tirón a los dos.
Juan, gracias de nuevo, tú que me ves con buenos ojitos ... me gusta que aproveches para brindar tus sensaciones y opiniones. Jaja, no desvíen el tema hacia el onanismo, muy weno lo tuyo, minifundio insular, un mundo aparte, políticos profesionales al servicio de lo imposible .... oye, por cierto, me echarán algo al café? voy a investigar, pero en verdad ya vine un poco colgao de fábrica, jeje.
Hola Santi, ese libro de Auster no lo he leído, aunque lo he visto por ahí, así que voy a mirar, se habrá fijao Auster en Canelo? Sería un pelotazo, ehin? No es un escritor que me haga mucha gracia, pero quizá sea por prejucios. Leí Brooklyn Follies, voy a mirar el que me dices, ehin?, lo mismo sale una historieta perruna medio gadita. Canelo Forever !!