Cardito de Puchero constituye una historia de dignidad y superación personal, un cuarto de siglo de educación en do mayor. Juan Rincón Ares, que ha puesto alma y vida en un proyecto que ha transformado Andalucía de verdad, a través de la alfabetización y fomento de la cultura, relata con inusual ternura y sencillez las vicisitudes de la educación de adultos y, por tanto, de la evolución social de esta tierra. Con acento en El Puerto de Santa María, claro. El libro, editado por El Boletín Cultural, dirigido por Eduardo Albadalejo, muestra los nueve relatos que Rincón ya colgó en internet, donde este profesional y escritor vocacional, que ha ganado más de ochenta premios literarios, mantiene un buen número de blogs. La construcción de la educación de adultos, desde los cimientos de la efervescente sociedad de los albores de la democracia, muestra a "una generación olvidada a la que sacamos de sus casas", en concreto un amplio colectivo de madres, mayoría silenciosa que sin pretenderlo han cambiado las cosas en Andalucía, "han modificado la mirada del mundo" merced a un proceso permanente que sigue en marcha, aunque de otro modo. Echa la vista atrás Juan Rincón y recuerda a las madres que valoraban la poesía sin entenderla, por su valor estético, y aprendieron a amar la vida, la música, la palabra, como factor de crecimiento, una manera de elevar la autoestima de un pueblo."El 95% de los alumnos de educación de adultos eran y son mujeres", certifica Rincón, quien apunta una significativa anécdota: "Al comienzo nuestra labor se topaba con la incomprensión general, sobre todo de los hombres, los maridos, que incluso daban ultimátums a sus esposas: o el centro de adultos o yo. Así de radical. No soportaban el nuevo papel que empezaba a desempeñar la mujer en la sociedad". El tiempo pasa despacio, pues tales circunstancias aún pesan en el ambiente, y a veces se antojan piedras angulares del machismo latente. Por ventura, muchas mujeres se rebelaron y hoy Juan Rincón puede sentirse orgulloso de recibir llamadas o cartas de los hijos de la educación de adultos. "Me escribieron dos nietos de Rosa la Pistola, agradeciéndome que haya recuperado la memoria de su abuela. A esos niños los dormí yo en clase", recuerda mientras observa con nostalgia de futuro la foto de portada del libro.Corrían otros tiempos cuando la educación de adultos se instaló por vez primera en un local de la calle Cantarería, una vivienda alquilada a la que derribaron los tabiques para convertirla en aula. Sillas sobrantes de colegios, material de prestado y una ilusión enorme. "La educación de adultos ha evolucionado mucho, pero sigue por detrás, a la cola de la educación en general, pese a su aportación. Pero las diferencias se van reduciendo", señala Rincón, igual que los niños cada vez son más adultos y los adultos menos niños. Hoy, en plena era de la informática, abundan los analfabetos virtuales, incide Rincón, que distingue entre analfabetos totales, analfabetos funcionales cuya ausencia de vocabulario impide acercarse a la información disponible, y los que sufren la brecha digital, que son legión, los futuros excluidos. La educación de adultos de hoy emplea la informática, el entrenamiento de la memoria, la tolerancia social y la importancia del idioma para los inmigrantes. Ucranianos y rumanos, comunidades cada vez más numerosas, que aprenden el español a empujones. Los rumanos se enseñan mutuamente, son rápidos, pero los ucranianos avanzan a toda velocidad, "en dos meses aprenden perfectamente el castellano". La educación de adultos de hoy habla también inglés, y sufre en sus carnes los grandes fracasos de la Secundaria, en especial la pobreza del lenguaje de los chavales, incapaces de llamar a las cosas por su nombre. "Los mayores del centro, por ejemplo, te dicen que antes no participaban en conversaciones por vergüenza, por escasez de vocabulario, y esa pobreza del lenguaje oral se antoja grave entre muchos jóvenes que no saben expresarse con propiedad". Esos chavales serán adultos tarde o temprano.Rincón cree que la educación de adultos ha perdido encanto y eficacia al entrar en el sistema ordinario y basarse en resultados. "Se trata de ganar en felicidad, en calidad de vida, y no en titulaciones". "El día que se deje de invertir en educación de adultos habrá que hacerlo en salud mental", certifica el autor, quien subraya que "ejercemos de antidepresivo con más poderío que cinco pastillas".El libro de Rincón, crónica social portuense y espejo de muchas familias humildes, ve la luz tras pasar por muchos despachos oficiales, y ha sido posible merced al impulso del editor Eduardo Albadalejo. La primera edición está a punto de agotarse. Está llegando al corazón de la gente.
Mayo 08, El Puerto (Diario de Cádiz)
sábado, 31 de mayo de 2008
viernes, 30 de mayo de 2008
Paganini, Tembleque y las orejas del Lobo Lucas
La ciudad que no sonríe sólo se preocupa por cosas serias: el "fúrbo", el capillismo ilustrado y el Carnaval eterno. También se miran mucho los edificios pachuchos y los proyectos imposibles, así como la línea del cielo. La gente anda penitente en el año de los grandes cabreos. A un paso del Parri-cidio, no sólo vale correr detrás de la pelota y de la quimera multicolor. La gente pide huevos, "menos millones y más cohone", y don Antonio piensa montar una huevería en los bajos de Carranza. Bajos instintos en Carranza, el mundo al revés, violencia policial irracional contra los hinchas irreductibles, que no pillaban un disgusto de tales dimensiones en el último lustro. Cinco años hace que el Submarino emergió del Pozo, ni que hubiera pasado un siglo. Más de quince años atrás nació el Submarino gadita tras una noche memorable, taquicárdica promoción versus el Málaga, el próximo rival a tumba abierta, gol de José González, estrategia de Ramón Blanco, nuestro señor de los milagros, penalti salvador de Juan José, el último servicio del mítico Sandokán a la causa amarilla.
"Fernando, el portero malaguista, intentó ponerme nervioso, así que hablé con el árbitro y me eché hacia atrás", recuerda Juan José, que caminó despacio, mientras el silencio recorría la espina dorsal del estadio, el mundo se paró durante un kilométrico instante y Juan José la clavó por toda la escuadra. "Menos mal que metí el penalti, porque no me renovaron; si lo fallo me cuelgan", bromea el gran lateral, que tenía 34 años. "Cosas del fútbol. Hugo Vaca y Ramón Blanco, que ejercían de secretario técnico y entrenador, tomaron la decisión de dejarme fuera, pero siguen siendo buenos amigos míos".
Años antes, cuando Juan José triunfaba en el Real Madrid y en la selección, fue Amancio quien le marginó durante un tiempo. "No decía ni mi nombre, me llamaba de usted, me apartó sin justificación, las manías del fútbol" señala el bravo jugador, que cita a Parri como uno de los extraños casos del año. El año en que el Cádiz jugó con fuego.
Cuando el Cádiz se situó a cuatro puntos del ascenso, o quizá antes, a don Antonio se le ocurrió la genial idea de montar un despacho de "sobraos", jamás hubo tantos "sobraos" en Cádiz, por la gloria del funesto presidente que empezaba en "balda" y terminaba en "ano", a quien don Antonio hizo weno en unos meses, lo vendió todo, hasta el alma, siempre nos quedará Raúl López, catorce millones de "leuros" tendrán la culpa, el público, muy mal acostumbrao, ha saltado más vale tarde que nunca y Lucas Lobos siente nostalgia de futuro. Si hubieran fichado a Lobos antes, el Cádiz estaría en Primera; y si no lo hubieran soltado en esta rocambolesca temporada, no estaría la gente penitente haciendo números azorá perdía, piensa pa sus adentros un cadista de toda la vida, de los que pasaron de Primera a Segunda B en un periquete, y vicerveza fresquita. Visite Tembleque, descubre Tembleque, alucinarás, reza la publicidad turística de la bella localidad toledana. Desde la batalla de las Navas de Tolosa (1212), nada igual se recuerda, a Cádiz le mola el DoceDoce, y a los guardias, las banderitas andaluzas con estrellas coloradas. Ahora, en plena era del surrealismo amarillo, los brigadas aplauden y la poli pega, en Tribuna miran con lupa a los hinchas buenos, haber saltado antes, oiga. A este paso (de horquilla) no habrá problema para reubicar a los tribuneros y doña Tecla se comerá con papas el stadium de la liga de champiñones. La solución, no obstante, pasa por el pájaro jaula, el monumento a Casa Crespo, homenaje al ascenso del 78. Hay que regalarle una réplica del pájaro-jaula a Del Nido, pa que se deje meter mano el filial sevillista, a Del Nido le gustan los pájaros-jaula. Y a la Policía, la caña, de ahí que el Libi proponga la creación de una patrulla policial pa recoger la chatarra y así dar de comer al pájaro-jaula, que tiene un saque tremendo. Ya lo advirtió: cuidado, que el pájaro puede hacer nido. El genial carnavalero también apunta, con su habitual retranca, que el Cádiz tiene menos puntos que el Chiquilicuatre ese, y no vea lo que duele.
Otra vez fuera de bromas, Juan José considera injusto cargar contra los técnicos, demasiado han tenido Calderón y Procopio con comerse el marrón y acabar quemados de tal trance. "Si el equipo no ha funcionado con ningún técnico será por otra cosa".
Don Antonio ya ha pillado las entradas para asistir a la obra de Paganini que "echan" en el festival Manuel de Falla, pero alguien le tiene preparada una bromita pesada, la copla que cantaron en el Falla "Los que van como Cádiz", chirigota cangrejera que viene al pelo. La letra resume la temporada de aquella manera, ni que la hubiera escrito la vidente de Trille. "Antoñito Muñoz era un empresario que vino a Cádiz/ pa levantarlo, pa defraudarlo y pa salvarlo". De forma altruista, claro, y al final por poco vende hasta el tarro de réflex del masajista. "Si lo dejamos vende todo el hachís del frente cadista". Pero Antoñito se fue, dejando en el cargo a quien rimaba con las dos manos, que trajo a Del Bosque y García Remón de una tiraíta, "y si no se trajo a Guti fue por su fama de mariquita". Se trajo a Dani del Betis y a Parri del Albacete, y por mitad del camino "va y nos la mete, va y nos la mete". Como comentario de texto, vale pal fin de curso.
El queso manchego, el azafrán y el caldillo de papas son productos típicos de Tembleque, que también muere por los Carnavales, la Semana Santa y la pelota redonda. Quien mal empieza, acaba chungo del tó. Hasta cierto punto, claro. Ocho victorias en la primera vuelta, sólo cuatro en la segunda, y ahora los demagogos atribuyen las culpas a los jugadores, a los hinchas y a los técnicos buenos, bonitos y baratos. Ahorrando disgustos, que es gerundio.
Observen con atención las estadísticas acerca de las liguillas de ascenso a Segunda, ahora que queda claro que el Cádiz no es de Primera. Ocho veces lo ha intentado el Baracaldo, siete la Gramanet, seis la Cultural Leonesa, cuatro el Granada, y no hubo manera. El verdadero Submarino Amarillo, con perdón para los recalcitrantes, lo intentó en el 92, no hace tanto, y mira tú la que ha liado. Aquella liguilla la disputó contra Gerona, Salamanca y Balompédica Linense.
La noche del 20 de junio de 1991, con el recordado Juan Gómez "Juanito" en la grada, sin cámaras de televisión y en un indescriptible ambiente de tensión y porfías, el Málaga cayó en desgracia, en vías de extinción, y el Cádiz apuró la leyenda. El domingo, en Málaga, con las tornas cambiadas, se juega otra promoción.
Juan José sueña con la victoria en La Rosaleda. "¿Y si volvemos a dejar al Málaga sin la Primera?"
Mayo 08, Submarino Amarillo (Diario de Cádiz)
"Fernando, el portero malaguista, intentó ponerme nervioso, así que hablé con el árbitro y me eché hacia atrás", recuerda Juan José, que caminó despacio, mientras el silencio recorría la espina dorsal del estadio, el mundo se paró durante un kilométrico instante y Juan José la clavó por toda la escuadra. "Menos mal que metí el penalti, porque no me renovaron; si lo fallo me cuelgan", bromea el gran lateral, que tenía 34 años. "Cosas del fútbol. Hugo Vaca y Ramón Blanco, que ejercían de secretario técnico y entrenador, tomaron la decisión de dejarme fuera, pero siguen siendo buenos amigos míos".
Años antes, cuando Juan José triunfaba en el Real Madrid y en la selección, fue Amancio quien le marginó durante un tiempo. "No decía ni mi nombre, me llamaba de usted, me apartó sin justificación, las manías del fútbol" señala el bravo jugador, que cita a Parri como uno de los extraños casos del año. El año en que el Cádiz jugó con fuego.
Cuando el Cádiz se situó a cuatro puntos del ascenso, o quizá antes, a don Antonio se le ocurrió la genial idea de montar un despacho de "sobraos", jamás hubo tantos "sobraos" en Cádiz, por la gloria del funesto presidente que empezaba en "balda" y terminaba en "ano", a quien don Antonio hizo weno en unos meses, lo vendió todo, hasta el alma, siempre nos quedará Raúl López, catorce millones de "leuros" tendrán la culpa, el público, muy mal acostumbrao, ha saltado más vale tarde que nunca y Lucas Lobos siente nostalgia de futuro. Si hubieran fichado a Lobos antes, el Cádiz estaría en Primera; y si no lo hubieran soltado en esta rocambolesca temporada, no estaría la gente penitente haciendo números azorá perdía, piensa pa sus adentros un cadista de toda la vida, de los que pasaron de Primera a Segunda B en un periquete, y vicerveza fresquita. Visite Tembleque, descubre Tembleque, alucinarás, reza la publicidad turística de la bella localidad toledana. Desde la batalla de las Navas de Tolosa (1212), nada igual se recuerda, a Cádiz le mola el DoceDoce, y a los guardias, las banderitas andaluzas con estrellas coloradas. Ahora, en plena era del surrealismo amarillo, los brigadas aplauden y la poli pega, en Tribuna miran con lupa a los hinchas buenos, haber saltado antes, oiga. A este paso (de horquilla) no habrá problema para reubicar a los tribuneros y doña Tecla se comerá con papas el stadium de la liga de champiñones. La solución, no obstante, pasa por el pájaro jaula, el monumento a Casa Crespo, homenaje al ascenso del 78. Hay que regalarle una réplica del pájaro-jaula a Del Nido, pa que se deje meter mano el filial sevillista, a Del Nido le gustan los pájaros-jaula. Y a la Policía, la caña, de ahí que el Libi proponga la creación de una patrulla policial pa recoger la chatarra y así dar de comer al pájaro-jaula, que tiene un saque tremendo. Ya lo advirtió: cuidado, que el pájaro puede hacer nido. El genial carnavalero también apunta, con su habitual retranca, que el Cádiz tiene menos puntos que el Chiquilicuatre ese, y no vea lo que duele.
Otra vez fuera de bromas, Juan José considera injusto cargar contra los técnicos, demasiado han tenido Calderón y Procopio con comerse el marrón y acabar quemados de tal trance. "Si el equipo no ha funcionado con ningún técnico será por otra cosa".
Don Antonio ya ha pillado las entradas para asistir a la obra de Paganini que "echan" en el festival Manuel de Falla, pero alguien le tiene preparada una bromita pesada, la copla que cantaron en el Falla "Los que van como Cádiz", chirigota cangrejera que viene al pelo. La letra resume la temporada de aquella manera, ni que la hubiera escrito la vidente de Trille. "Antoñito Muñoz era un empresario que vino a Cádiz/ pa levantarlo, pa defraudarlo y pa salvarlo". De forma altruista, claro, y al final por poco vende hasta el tarro de réflex del masajista. "Si lo dejamos vende todo el hachís del frente cadista". Pero Antoñito se fue, dejando en el cargo a quien rimaba con las dos manos, que trajo a Del Bosque y García Remón de una tiraíta, "y si no se trajo a Guti fue por su fama de mariquita". Se trajo a Dani del Betis y a Parri del Albacete, y por mitad del camino "va y nos la mete, va y nos la mete". Como comentario de texto, vale pal fin de curso.
El queso manchego, el azafrán y el caldillo de papas son productos típicos de Tembleque, que también muere por los Carnavales, la Semana Santa y la pelota redonda. Quien mal empieza, acaba chungo del tó. Hasta cierto punto, claro. Ocho victorias en la primera vuelta, sólo cuatro en la segunda, y ahora los demagogos atribuyen las culpas a los jugadores, a los hinchas y a los técnicos buenos, bonitos y baratos. Ahorrando disgustos, que es gerundio.
Observen con atención las estadísticas acerca de las liguillas de ascenso a Segunda, ahora que queda claro que el Cádiz no es de Primera. Ocho veces lo ha intentado el Baracaldo, siete la Gramanet, seis la Cultural Leonesa, cuatro el Granada, y no hubo manera. El verdadero Submarino Amarillo, con perdón para los recalcitrantes, lo intentó en el 92, no hace tanto, y mira tú la que ha liado. Aquella liguilla la disputó contra Gerona, Salamanca y Balompédica Linense.
La noche del 20 de junio de 1991, con el recordado Juan Gómez "Juanito" en la grada, sin cámaras de televisión y en un indescriptible ambiente de tensión y porfías, el Málaga cayó en desgracia, en vías de extinción, y el Cádiz apuró la leyenda. El domingo, en Málaga, con las tornas cambiadas, se juega otra promoción.
Juan José sueña con la victoria en La Rosaleda. "¿Y si volvemos a dejar al Málaga sin la Primera?"
Mayo 08, Submarino Amarillo (Diario de Cádiz)
jueves, 29 de mayo de 2008
Guajira, Guantanamera
El Gobiennnno niega que los viajes a Guantánamo procedentes de la Base de Rota integrasen un plan de traslado forzoso de presos por parte de la Cia, pese a los informes del Parlamento portugués revelados esta semana. Ya nos quedamos más tranquilos: los aviones no llevaban personas secuestradas por la cara ni presuntos bin ladens trincados por la inteligencia yanqui, si es que a Bush le queda algo de inteligencia. Los lusos descubrieron el pastel y el amigo americano nos toma por ilusos. Viva la madre superiora. Hay gente muy mal pensada, como los que denuncian submarinos amarillos nucleares en el Peñón de Gibraltar. Asimismo, el valiente Gobiennno españó, valiente Gobiennno, dice que el personal y el material transportados no pertenecía a la Cía, sino al ejército de los Usa, menos mal, nos quedamos ya del todo tranquilos, ehin? Los vuelos fueron autorizados, of course, y el Gobiennno no oculta nada, está entregao a la causa de la libertad y la democracia, tralará ...
Guantanamera, Guajira, Guantanamera ...
Guantanamera, Guajira, Guantanamera ...
miércoles, 28 de mayo de 2008
Por encima de la media europea
La poca vergüenza hispana suele rondar la media europea, a menudo hay que lucir un parche en el ojo pa fardar de buen empresario en la Piel de Toro. España ofrece el título mundial de falta de escrúpulos, masters del universo, el que no corre vuela, aquí te pillo aquí te mato y mil refranes más. A las pruebas nos remitimos del tirón, un par de ejemplos de ná. Hoy dice el Gobierno que la factura de adsl es barata por estos lares, los diez megas con voz se sitúan por debajo de la media, hablará de la media en la cabeza que se encasquetan los grandes ladrones, léase las firmas punteras del sector fullero, los megabandidos. Luego, con la boca pequeña admiten que los dos megas son un timo, si es que realmente no nos dan megas por liebre. En fin. A propósito de la brecha digital en la cabeza, un mandamás del grupo Deprisa, que ha anunciado la venta de Digital Plus, cita un dato revelador para certificar la buena salud del invento: en España se pagan cuarenta euros mensuales de media en la parabólica, mientras que en Europa apoquinan diez euros. Es decir, nos toman por tontos, van de listos y encima se ufanan de ello. Significativo. Manos arriba. Prestigiosos cuatreros exportamos al mundo. Mejor no comparar la oferta y la demanda, mejor no cabrearse con el descenso de calidad de los servicios, directamente proporcional al subidón de precios. Del salario del miedo, ni hablar.
martes, 27 de mayo de 2008
De Astilleros a los Beatles
El caballero Villegas, a quien jamás escucharán hablando mal de alguien, abre la puerta de sus recuerdos, sus anhelos y sus ilusiones. A los 85 años, don Enrique retorna al Carnaval con la humildad de los más grandes: "He dicho a mi hijo Juan Miguel y al grupo que lo hagan con sencillez y sin petulancia, no vayamos a creernos que vamos a desbancar a nadie. Nuestra meta es que nos escuchen en silencio y que aplaudan si les agrada la comparsa. Si te pones a presumir puedes pegarte un batacazo".
El hombre que dejó su trabajo de Astilleros por una temporada y terminó girando ocho años con sus Beatles de Cádiz, el amigo competidor de Paco Alba, onubense de Cádiz, baluarte de la fiesta señera del sol, medalla de oro de Andalucía, tío del mejor futbolista que ha dado Cádiz (Pepe Mejías) y suegro de uno de los grandes renovadores de la chirigota (Paco Rosado), canta ahora el pasodoble de medida. Vellitos de punta. El sello de Villegas impregna la sala, repleta de trofeos, placas y misceláneas, y una letra sobre el tiempo evoca nostalgias de futuro.
"Le di un título a mi hijo, que manejaba otro, y se echó a reír, pues se trata del mismo significado, coincidimos sin ponernos de acuerdo. Quizá se decida por mi idea para la comparsa. Yo tenía mucho miedo, de mí no ha salido escribir la música a la comparsa, y acaso alguna ayuda en ciertos textos, pero me convencieron mis hijos". Contubernio familiar. "Gracias a Dios me mantengo bien mentalmente, se me olvidan pocas cosas, lo principal me lo sé de carrerilla. Y como la soledad es muy "joía", mis hijos, que me veían retraído y a veces deprimido, acordaron entre ellos animar el cotarro. Suena de categoría el cotarro de Villegas e Hijos, marca registrada.
En su casa de la avenida del soterramiento, el legendario autor enciende las luces del túnel del tiempo. "Ese año (1961), Paco no salió, porque se mosqueó con el tercer premio que le dieron a los Mamarrachis, y su gente se enteró de que yo había compuesto un pasodoble, que al final interpretaron los Gitanos Errantes en el Falla. En esta misma mesa les canté la letra a Chatín, Miguete y Charpa. Yo estaba loco por ellos, pero debía buscar otro destino". Ya se sabe que Villegas entabló amistad con El Brujo en el bar Pepín, los domingos de banda de música en la plaza Mina y de media limeta de vino de Chiclana. "Él me dijo: Métete. Pero no quise seguir su mismo camino musical, no está bien eso de copiar". Así que reinventó la música de la luz hasta dar con la tecla sensible del Carnaval gaditano y dirigir el grupo más célebre que se recuerda más allá de Puertatierra, los Beatles de Cádiz. De pronto, todo se transformó, "de salir en una murga a ser famoso por ahí hay un trecho. Mi intención era dar a conocer Cádiz, por eso llevábamos el escudo de la ciudad en los trajes. Teníamos trajes de invierno y de verano, pantalones de mil cuadros, blusas rojas con cordoncillos dorados, y el escudo en el corazón. Todo el verano viajando. Entonces se gastaban las orquestas uniformadas, no como ahora, que van todos en chándal".
"Pasar por el mundo sin haber hecho ná, que no quede rastro de ti, debe ser algo doloroso", sentencia Villegas con su habitual elegancia. Y recuerda como si fuer ayer la noche en que José María Pemán presenció una actuación de los Beatles en la sala Pasapoga de Madrid, o los percances que sufría el Peña cuando se arrojaba en lo alto del bombo sobre la pista, una manera estrafalaria de hacer mutis. "Estuvo a punto de matarse varias veces. El Peña andaba cortito de memoria, pero poseía un arte descomunal, cantaba bien y parecía un actor de Hollywood. Y era disciplinado al máximo, contra lo que se pudiera pensar de él". Y relata una peripecia envuelta en chicle hinchable y sifón, un bubble boom que terminó con un beatle colgado de los cables de la luz". En una foto, que Enrique señala con el dedo, aparece el Peña con un brazo escayolado. "Tuve que salir en ocasiones para hacer de bombista en las tournés. La fiebre por los Beatles nos trajo contratos diarios, a veces dos o tres galas diarias, hasta que los verdaderos Beatles de Liverpool se fijaron en nosotros".
Villegas asegura que se reunió con el mismísimo Brian Epstein en "El biombo chino", una sala de fiestas de mediados de los años sesenta. Miguelín, el torero de Algeciras, ejerció de intérprete. "Los Beatles tenian las creencia de que nos mofábamos de ellos, y Epstein vino a comprobarlo. Cuando escuchó nuestras pamplinas (Villegas canta 'Hablemos del jamón', una parodia de Raphael), se meaba de risa. Lástima que se mató en un avión. Sabe Dios. Si no hubiese muerto habríamos actuado juntos en un show previsto en Liverpool. Me lo dijo él". La certera memoria de Villegas quizá sufra una pequeña laguna, pues Epstein murió en 1967, poco después del encuentro, pero no lo hizo en accidente de avión sino en extrañas circunstancias. Dicen que se quitó la vida. Los Beatles de Cádiz eran pa matarse de risa, nadie lo duda.
Los escarabajos gaditas proporcionaban unas 150 pesetas semanales a Villegas, el jornal que ganaba al mes con los hermanos Ortega, en su faceta de fotógrafo. Villegas dejó los Astilleros, "pedí un permiso y me tiré ocho años dando vueltas con los Beatles". Villegas tuvo que ser un gachó apuesto, un galán de la época, a tenor de sus hechuras actuales y de sus relatos en color sepia: "Yo hacía fotos a la gente en el Palillero, los retrataba caminando, y estrenaba sombrero y abrigo, iba yo poco elegante ..." Bohemio y soñador.
La infancia de Villegas es un paraíso en el Falla, la felicidad completa, las operetas que tanto gustaban a su padre. El paraíso de Cádiz, que "es como el cielo o el olimpo", se ubica en el Falla. Villegas vuelve al Falla dos décadas después. Las Quince Piedras, Los Comuneros, Los Pescadores Fenicios, "un sentimiento colectivo". "El Carnaval es una sentimiento, y antes era un sacrificio. Cuando empecé sólo veía a mis hijos dormidos, cuando llegaba de los ensayos. Muchos gaditanos se sacrificaron, en tiempos tan duros, para hacer reír o soñar a una ciudad, para dar diversión al resto de gaditanos".
El primer contrato de los Beatles, una gala en Ceuta, hizo coincidir al grupo de Villegas con un jovencísimo Camarón de la Isla, año 65. "Conocí a Camarón en los reservados de la Venta Vargas, no tenía ni dieciséis años. Camarón siempre fue muy callado. La gente que habla mucho no llega a ser artista porque se le va la fuerza por la boca". A Villegas, el sargento del club de los corazones solitarios, se le ilumina la mirada, entra en su despacho y vuelve con otra copla de nuevo cuño. La canta y el mal espanta.
El hombre que dejó su trabajo de Astilleros por una temporada y terminó girando ocho años con sus Beatles de Cádiz, el amigo competidor de Paco Alba, onubense de Cádiz, baluarte de la fiesta señera del sol, medalla de oro de Andalucía, tío del mejor futbolista que ha dado Cádiz (Pepe Mejías) y suegro de uno de los grandes renovadores de la chirigota (Paco Rosado), canta ahora el pasodoble de medida. Vellitos de punta. El sello de Villegas impregna la sala, repleta de trofeos, placas y misceláneas, y una letra sobre el tiempo evoca nostalgias de futuro.
"Le di un título a mi hijo, que manejaba otro, y se echó a reír, pues se trata del mismo significado, coincidimos sin ponernos de acuerdo. Quizá se decida por mi idea para la comparsa. Yo tenía mucho miedo, de mí no ha salido escribir la música a la comparsa, y acaso alguna ayuda en ciertos textos, pero me convencieron mis hijos". Contubernio familiar. "Gracias a Dios me mantengo bien mentalmente, se me olvidan pocas cosas, lo principal me lo sé de carrerilla. Y como la soledad es muy "joía", mis hijos, que me veían retraído y a veces deprimido, acordaron entre ellos animar el cotarro. Suena de categoría el cotarro de Villegas e Hijos, marca registrada.
En su casa de la avenida del soterramiento, el legendario autor enciende las luces del túnel del tiempo. "Ese año (1961), Paco no salió, porque se mosqueó con el tercer premio que le dieron a los Mamarrachis, y su gente se enteró de que yo había compuesto un pasodoble, que al final interpretaron los Gitanos Errantes en el Falla. En esta misma mesa les canté la letra a Chatín, Miguete y Charpa. Yo estaba loco por ellos, pero debía buscar otro destino". Ya se sabe que Villegas entabló amistad con El Brujo en el bar Pepín, los domingos de banda de música en la plaza Mina y de media limeta de vino de Chiclana. "Él me dijo: Métete. Pero no quise seguir su mismo camino musical, no está bien eso de copiar". Así que reinventó la música de la luz hasta dar con la tecla sensible del Carnaval gaditano y dirigir el grupo más célebre que se recuerda más allá de Puertatierra, los Beatles de Cádiz. De pronto, todo se transformó, "de salir en una murga a ser famoso por ahí hay un trecho. Mi intención era dar a conocer Cádiz, por eso llevábamos el escudo de la ciudad en los trajes. Teníamos trajes de invierno y de verano, pantalones de mil cuadros, blusas rojas con cordoncillos dorados, y el escudo en el corazón. Todo el verano viajando. Entonces se gastaban las orquestas uniformadas, no como ahora, que van todos en chándal".
"Pasar por el mundo sin haber hecho ná, que no quede rastro de ti, debe ser algo doloroso", sentencia Villegas con su habitual elegancia. Y recuerda como si fuer ayer la noche en que José María Pemán presenció una actuación de los Beatles en la sala Pasapoga de Madrid, o los percances que sufría el Peña cuando se arrojaba en lo alto del bombo sobre la pista, una manera estrafalaria de hacer mutis. "Estuvo a punto de matarse varias veces. El Peña andaba cortito de memoria, pero poseía un arte descomunal, cantaba bien y parecía un actor de Hollywood. Y era disciplinado al máximo, contra lo que se pudiera pensar de él". Y relata una peripecia envuelta en chicle hinchable y sifón, un bubble boom que terminó con un beatle colgado de los cables de la luz". En una foto, que Enrique señala con el dedo, aparece el Peña con un brazo escayolado. "Tuve que salir en ocasiones para hacer de bombista en las tournés. La fiebre por los Beatles nos trajo contratos diarios, a veces dos o tres galas diarias, hasta que los verdaderos Beatles de Liverpool se fijaron en nosotros".
Villegas asegura que se reunió con el mismísimo Brian Epstein en "El biombo chino", una sala de fiestas de mediados de los años sesenta. Miguelín, el torero de Algeciras, ejerció de intérprete. "Los Beatles tenian las creencia de que nos mofábamos de ellos, y Epstein vino a comprobarlo. Cuando escuchó nuestras pamplinas (Villegas canta 'Hablemos del jamón', una parodia de Raphael), se meaba de risa. Lástima que se mató en un avión. Sabe Dios. Si no hubiese muerto habríamos actuado juntos en un show previsto en Liverpool. Me lo dijo él". La certera memoria de Villegas quizá sufra una pequeña laguna, pues Epstein murió en 1967, poco después del encuentro, pero no lo hizo en accidente de avión sino en extrañas circunstancias. Dicen que se quitó la vida. Los Beatles de Cádiz eran pa matarse de risa, nadie lo duda.
Los escarabajos gaditas proporcionaban unas 150 pesetas semanales a Villegas, el jornal que ganaba al mes con los hermanos Ortega, en su faceta de fotógrafo. Villegas dejó los Astilleros, "pedí un permiso y me tiré ocho años dando vueltas con los Beatles". Villegas tuvo que ser un gachó apuesto, un galán de la época, a tenor de sus hechuras actuales y de sus relatos en color sepia: "Yo hacía fotos a la gente en el Palillero, los retrataba caminando, y estrenaba sombrero y abrigo, iba yo poco elegante ..." Bohemio y soñador.
La infancia de Villegas es un paraíso en el Falla, la felicidad completa, las operetas que tanto gustaban a su padre. El paraíso de Cádiz, que "es como el cielo o el olimpo", se ubica en el Falla. Villegas vuelve al Falla dos décadas después. Las Quince Piedras, Los Comuneros, Los Pescadores Fenicios, "un sentimiento colectivo". "El Carnaval es una sentimiento, y antes era un sacrificio. Cuando empecé sólo veía a mis hijos dormidos, cuando llegaba de los ensayos. Muchos gaditanos se sacrificaron, en tiempos tan duros, para hacer reír o soñar a una ciudad, para dar diversión al resto de gaditanos".
El primer contrato de los Beatles, una gala en Ceuta, hizo coincidir al grupo de Villegas con un jovencísimo Camarón de la Isla, año 65. "Conocí a Camarón en los reservados de la Venta Vargas, no tenía ni dieciséis años. Camarón siempre fue muy callado. La gente que habla mucho no llega a ser artista porque se le va la fuerza por la boca". A Villegas, el sargento del club de los corazones solitarios, se le ilumina la mirada, entra en su despacho y vuelve con otra copla de nuevo cuño. La canta y el mal espanta.
Mayo 08, Crónicas Urbanas (Diario de Cádiz)
lunes, 26 de mayo de 2008
Paripé y realidad
La foto de Fito Carreto, perteneciente a la serie "Paseantes", retrata un momento concreto, o quizá varios a la vez, en tierra de nadie. Ceuta, el moro cristiano, ayer y hoy, tradición y pamplineo, la religión del pueblo invisible, los colores de nunca jamás, su tabaco, gracias. Ficción y surrealismo, miradas en movimiento y la moda del quieto parao, personas y muñecos, mentira y verdad a medias. Justo lo que encuentra la gente de cualquier parte aquí y ahora. En el europeo norte de África preocupa más una polémica sobre cocinitas, una bronca en torno a platos decorados o bocatas de chorizo, que un informe devastador sobre la situación socioeconómica de los indígenas conformistas. Las desigualdades a cara descubierta pugnan versus la superficialidad e hipocresía reinantes. Ayer, por ejemplo, y saltando de tema en tema, el chiquilicuatre era un engañabobos, y hoy, al comprobar que le dio coba a catorce millones de españolitos, es un dios del share, por mi mare, y del rating, por tutatis, y la gente se cree que la gente es tonta. Por no hablar de los kamikaces políticos y los columpios asesinos de la cultura impopular. La foto de Fito, en realidad, no necesitaba palabras.
domingo, 25 de mayo de 2008
Amaral toca madera
Ahuyentar la soledad, espantar la decepción, tocar las puertas del infierno, caminar sobre el alambre y convertir la melancolía en intento de himno juvenil. Eso pretende Amaral en su nueva colección de canciones, diecinueve temas que integran el doble disco del dúo aragonés. Esta semana saldrá a la calle "Gato negro, dragón rojo", aunque el público ya ha podido conocer un par de avances, colgados de modo gratuito en la web del grupo. Cosas de la crisis discográfica. El álbum aparecerá en numerosos formatos, incluido un librodisco y una caja que contendrá la máscara del gato. Tocando madera, oiga.
El blues de la generación perdida habla de la brecha entre la juventud verdadera y la juventud dermoestética, y pese a que no se trata de una letra redonda abunda en la incomprensión mutua: "Dices que yo no tengo nada en la cabeza/ me miras, me juzgas, me condenas". Veletas, cometas, cielo y suelo, barreras del sonido por atravesar, kamikaces y artistas del equilibrismo vital, temas existencialistas, pseudoprofundos, que se cierran con el final de la inocencia. Clichés del rocanrol aún por explotar, poses y posos que Eva Amaral y Juan Aguirre suelen emplear con cierta habilidad, entre el pop, el rock, la psicodelia y el folk de nuevo (?) cuño. Desde que tocaron en calidad de teloneros en la gira de Bob Dylan de 2004, los maños hallaron fórmulas diferentes y un público mayorcito que complementa a los adolescentes que siguen a la banda en una década de actividad musical. Por cierto, Amaral volverán a coincidir con Dylan, el 28 de junio en un festival en Ávila, y quizá compartan la pieza del juglar de Minnesota que promociona la Expo de Zaragoza, "A hard rain's a gonna fall", que ellos reinterpretan en castellano en la versión "Llegará la tormenta". Bastante flojita, por cierto, a tenor de las críticas feroces de los dylanitas hispanos.
Ya se ultiman las fechas de la gira de Amaral, que pasará por Málaga el día 21 de junio y volará a Londres, a Hyde Park, para participar en un homenaje a Nelson Mandela.
El quinto disco en estudio de Amaral, que rompe tres años de silencio tras "Pájaros en la cabeza", cuenta con la colaboración estelar de Peter Buck, de Rem, el grupo Pereza, el líder de Deluxe y los hermanos Ferreiro, Iván y Amaro.
Más novedades, en este caso internacionales, que se suman a la eclosión de conciertos y festivales. El gran Tom Waits cantará por primera vez en España, el 12 de julio en San Sebastián y el 14 y 15 en Barcelona. Y los Coldplay actuarán gratis en Barcelona el 17 de junio, el mismo día de publicación de su esperado disco, "Viva la vida".
Mayo 08, Cultura (Diario de Cádiz)
El blues de la generación perdida habla de la brecha entre la juventud verdadera y la juventud dermoestética, y pese a que no se trata de una letra redonda abunda en la incomprensión mutua: "Dices que yo no tengo nada en la cabeza/ me miras, me juzgas, me condenas". Veletas, cometas, cielo y suelo, barreras del sonido por atravesar, kamikaces y artistas del equilibrismo vital, temas existencialistas, pseudoprofundos, que se cierran con el final de la inocencia. Clichés del rocanrol aún por explotar, poses y posos que Eva Amaral y Juan Aguirre suelen emplear con cierta habilidad, entre el pop, el rock, la psicodelia y el folk de nuevo (?) cuño. Desde que tocaron en calidad de teloneros en la gira de Bob Dylan de 2004, los maños hallaron fórmulas diferentes y un público mayorcito que complementa a los adolescentes que siguen a la banda en una década de actividad musical. Por cierto, Amaral volverán a coincidir con Dylan, el 28 de junio en un festival en Ávila, y quizá compartan la pieza del juglar de Minnesota que promociona la Expo de Zaragoza, "A hard rain's a gonna fall", que ellos reinterpretan en castellano en la versión "Llegará la tormenta". Bastante flojita, por cierto, a tenor de las críticas feroces de los dylanitas hispanos.
Ya se ultiman las fechas de la gira de Amaral, que pasará por Málaga el día 21 de junio y volará a Londres, a Hyde Park, para participar en un homenaje a Nelson Mandela.
El quinto disco en estudio de Amaral, que rompe tres años de silencio tras "Pájaros en la cabeza", cuenta con la colaboración estelar de Peter Buck, de Rem, el grupo Pereza, el líder de Deluxe y los hermanos Ferreiro, Iván y Amaro.
Más novedades, en este caso internacionales, que se suman a la eclosión de conciertos y festivales. El gran Tom Waits cantará por primera vez en España, el 12 de julio en San Sebastián y el 14 y 15 en Barcelona. Y los Coldplay actuarán gratis en Barcelona el 17 de junio, el mismo día de publicación de su esperado disco, "Viva la vida".
Mayo 08, Cultura (Diario de Cádiz)
sábado, 24 de mayo de 2008
Feliz cumpleaños, buen viaje
Hoy cumple 67 años y mañana viaja a Europa para continuar su gira interminable. Bob Dylan, forever young, ha dejado de nuevo a un lado su guitarra y, desde que retornó a los escenarios días atrás, toca el piano eléctrico durante todo el concierto, con leves guiños a la armónica. Hace cuatro años que decidió sentarse a un costado del escenario. Cierto concejal garrulo coruñés dijo el otro día, para justificar la ausencia de Dylan en su ciudad, que éste canta de espaldas y que tiene composiciones poco conocidas all over the world, qué arte más grande, qué oportunidad de achantar la muí.
Dylan nació en Duluth, Minnesota, un grisáceo pueblo minero sin futuro más allá de la tienda de electrodomésticos de su padre. Bob descubrió la música en la radio y del tirón quiso ser Hank Williams y Little Richard, a la par, y de veras que lo logró, con creces, unas décadas después. Hoy es Bob Dylan y hace lo que quiere con sus canciones; en seis noches ha interpretado cincuenta temas diferentes. Deja para el final las concesiones mitológicas, pero antes juega con su memoria, quizá para sorprenderse a sí mismo.
Felicidades, Bob, buen viaje, nos vemos en Jerez. (Me dirijo a él con tanta confianza porque somos amigos, aunque él todavía no lo sabe).
Dylan nació en Duluth, Minnesota, un grisáceo pueblo minero sin futuro más allá de la tienda de electrodomésticos de su padre. Bob descubrió la música en la radio y del tirón quiso ser Hank Williams y Little Richard, a la par, y de veras que lo logró, con creces, unas décadas después. Hoy es Bob Dylan y hace lo que quiere con sus canciones; en seis noches ha interpretado cincuenta temas diferentes. Deja para el final las concesiones mitológicas, pero antes juega con su memoria, quizá para sorprenderse a sí mismo.
Felicidades, Bob, buen viaje, nos vemos en Jerez. (Me dirijo a él con tanta confianza porque somos amigos, aunque él todavía no lo sabe).
viernes, 23 de mayo de 2008
Istmo de turismo
Para que el turismo no se vaya del mismo istmo lo mejor será liarse a cosquis o algo, tremendo turismo, y cerrar la Mangomunidad del tirón, tomarse un helado en los italianos y chapar el chiringuito metropolitano. Tira y afloja con los cruceristas. El turismo se mueve por donde le da la gana. El Puerto afea ahora la conducta a Cádiz por querer apropiarse del turismo marítimo, como si las cosas fueran tan sencillas. Cádiz moldea las estadísticas, por así decirlo, y pone en solfa a quien se pire a Sevilla, que no pierde su silla de milagro. Tendríamos que estar agradecidos a la cercanía de Sevilla, al encanto de Arcos, al poderío de Jerez. A los turistas no se les caza al lazo, oiga, ni se les convence con pamplinas de la plaza Mina. Vamos a ofrecer atractivos, más imaginación y menos sablazos, menos cateteo y más amplitud de miras. Mira tú que linda está la Bahía del Istmo Istmo.
El Puerto haría de Don Tancredo si entrase en una guerra turística, y Cádiz, el canelo si contase los visitantes como si fueran números, pollos sin cabeza, en lugar de personas con gustos, costumbres, culturas, pies en polvorosa y una mirada libre. Ya dice Cádiz que casi nadie se va a Sevilla o Jerez, los enemigos virtuales en esta errónea disputa. Las cifras oficiales mienten por la cara. Y ahora dice El Puerto que Cádiz está jalando demasiado, que se va romper la cuerda, cuando en realidad la soga va cobrando vida propia y la tarde menos pensada se rebelará, con causa, contra los que manejan la barca. El día que los fenicios levanten la cabeza nos vamos a enterar. Por cierto: las viejas Cádiz y El Puerto porfían en silencio por su edad verdadera. Si tú tienes tres mil, yo tres mil y pico. Los fenicios, desde su cacofonía cibernética, pa dar por saco a quienes quieren gobernar el sol con su control remoto, cuentan maravillas de la calle Sierpes, se quejan de los atascos a la altura del Río San Pedro y se están construyendo un chalecito pirata a la vera del mar. Kramer contra Kramer. Cádiz versus Cádiz. De aquí al 2013. ¡Socorro! Insumisión.
El Puerto haría de Don Tancredo si entrase en una guerra turística, y Cádiz, el canelo si contase los visitantes como si fueran números, pollos sin cabeza, en lugar de personas con gustos, costumbres, culturas, pies en polvorosa y una mirada libre. Ya dice Cádiz que casi nadie se va a Sevilla o Jerez, los enemigos virtuales en esta errónea disputa. Las cifras oficiales mienten por la cara. Y ahora dice El Puerto que Cádiz está jalando demasiado, que se va romper la cuerda, cuando en realidad la soga va cobrando vida propia y la tarde menos pensada se rebelará, con causa, contra los que manejan la barca. El día que los fenicios levanten la cabeza nos vamos a enterar. Por cierto: las viejas Cádiz y El Puerto porfían en silencio por su edad verdadera. Si tú tienes tres mil, yo tres mil y pico. Los fenicios, desde su cacofonía cibernética, pa dar por saco a quienes quieren gobernar el sol con su control remoto, cuentan maravillas de la calle Sierpes, se quejan de los atascos a la altura del Río San Pedro y se están construyendo un chalecito pirata a la vera del mar. Kramer contra Kramer. Cádiz versus Cádiz. De aquí al 2013. ¡Socorro! Insumisión.
Mayo 08, El alambique, El Puerto (Diario de Cádiz)
jueves, 22 de mayo de 2008
Pena, penita, pena máxima
Un resbalón en el último instante lo tiene cualquiera, pero en el penalti decisivo de la final de la Liga de Champiñones, sólo uno. Un tío con nombre de bodega portuense, Terry, que iba camino de crucificar a Ronaldo en su propia cruz del famoseo y la egolatría. El Cristiano erró su pena máxima, penita, pena, y esta vez no miró a la cámara, ni se atusó el pelito tó engreído. Tampoco lo hizo cuando su equipo se alzó con la victoria, se arrojó al suelo del tirón, de espaldas a la reality tontería football club. Cura de humildad para ganadores y vencidos, castigo a la arrogancia y cruel tributo al azar. Como ya no quedan apenas emociones en este mundo cuadriculao, la emoción de los penaltis causa sensación. Qué manera de sufrir, los atléticos conocemos los síntomas. La tanda de penaltis, por cierto, se inventó en Cádiz, con motivo del prestigioso Trofeo Carranza. Allá por 1962, el Ayuntamiento encargó a Rafael Ballester Sierra, a la sazón miembro del comité organizador, que idease una fórmula para finiquitar los partidos y evitar empates interminables o encuentros de desempate, que es lo que se estilaba entonces.
La primera tanda de penaltis, en cambio, duró una eternidad. Zaragoza y Barcelona igualaron en los noventa minutos reglamentarios, la prórroga y los cinco penales correspondientes, que por cierto tiraron de una vez ambos equipos. Al segundo intento, el Barsa anotó los cinco intentos y el Zaragoza, al fallar el primero, se despidió del Trofeo. El zaragocista Duca fue el futbolsta que inauguró el sistema de penaltis. La tierra de las alegrías inventó la pena máxima.
No obstante, los penales no se implantaron en el fútbol mundial hasta la Eurocopa de Checoslovaquia de 1976, que dejó para la historia el legendario penalti de Panenka, con paradiña y vaselina por el centro de la portería. Qué nervios.
La primera tanda de penaltis, en cambio, duró una eternidad. Zaragoza y Barcelona igualaron en los noventa minutos reglamentarios, la prórroga y los cinco penales correspondientes, que por cierto tiraron de una vez ambos equipos. Al segundo intento, el Barsa anotó los cinco intentos y el Zaragoza, al fallar el primero, se despidió del Trofeo. El zaragocista Duca fue el futbolsta que inauguró el sistema de penaltis. La tierra de las alegrías inventó la pena máxima.
No obstante, los penales no se implantaron en el fútbol mundial hasta la Eurocopa de Checoslovaquia de 1976, que dejó para la historia el legendario penalti de Panenka, con paradiña y vaselina por el centro de la portería. Qué nervios.
miércoles, 21 de mayo de 2008
Prohibido celebrarlo
Todavía habrá gente que celebre la permanencia. Si acaso, un suspiro de alivio, pero festejar algo semejante en esta rocambolesca temporada sería de chuflas. Al tiempo. Cuidado con la ley de Murphy, que vienen curvas. "Nos hemos complicado", admite el gran Chico Linares, el futbolista que más veces ha lucido la camisola amarilla. ¿Quién se entretiene en contar estas cosas? Antes de conmemorarlo, y de recibir los correspondientes parabienes y placas, Linares prefiere ver cómo su Cádiz de toda la vida salva el cuello. Viene el Nástic de Plástic, recuerdos de principios de siglo, cuando tarraconenses y gaditanos se enzarzaron en una dura pugna dialéctica, con motivo de la liguilla de ascenso a Segunda. Fue el año de Orúe, un año antes de Linares, y el Submarino estuvo a pique de un repique, del hundimiento titánico por mor de unos gestores con escasos escrúpulos. Grandes similitudes entre el 01 y el 08, vaivenes caprichosos, nubes negras con más veras.
Por la parte de Tembleque, bella localidad toledana, a los cadistas les traquetean hasta las canillas. Linares acaba de cumplir cincuenta años, como Mágico González, como Pepe Mejías,. Los ídolos alcanzan el medio siglo, el Cádiz se acerca a la centuria y hacen falta cincuenta puntos. Hay que ver lo que cuesta llegar a los cincuenta puntos, toda la temporada ejerciendo de violinista en el tejado, si yo fuera rico, Baldasano dixit, hasta los delirios de pobreza, made in Muñoz, pasando por el hipotético condicional gaditano, que se ha transformado en función del optimismo o zangangui imperante, del "si ganamos tres partidos seguidos" al "si perdemos los dos próximos". Un año de finales. El acabóse, como en el 2001, cuando los jugadores permanecieron cinco meses sin cobrar y se encajaron en la liguilla y la perdieron a manos del Nástic. Sólo sobreviven Raúl López, quien precisamente comparte con Linares otra marca, la de partidos de Liga disputados con el Cádiz, y Abraham Paz. El Submarino acabó la primera vuelta el quinto por la cola, pero encadenó nueve victorias consecutivas, se alzó campeón del grupo IV y, ya en el momento culminante, se acordó de las castas de dos trencillas de turno: Ceballos Silva y Lizondo Cortés, que protagonizaron sendos robos del siglo recién iniciado. Ese año, Ejido y Xerez subieron a Segunda y el Almería, que ha tocado esta temporada con los dedos la Uefa, concluyó en undécima posición. Los cadistas, medio turulatos, encuentran claves amarillas en cada situación relacionada con el balón envenenado. Este domingo bajaron a Segunda Zaragoza y Murcia, los dos clubes donde militó Pepe Mejías tras dejar el Cádiz, y se salvó el Recre, donde jugó Linares durante dos temporadas. Envidia de Recre y Almería, compasión por los maños, víctimas de otro año loco y de sus malditos gestores. Más piedras en el camino: salen de la quema Jerez y Jose González, se salva el Marbella de Oli y el destino travieso hermana en el último choque del año a Rácing y Osasuna, uno para la Uefa, otro salvado de milagro, precisamente los dos equipos damnificados por la célebre liguilla de la muerte súbita inventada por Irigoyen hace ya tanto tiempo ... El año que viene habrá tiros para subir a Primera.
La agónica visita del Nástic evoca el año del principio del fin de la peseta, eurosablazos por doquier, del redondeo de la poquita vergüenza y del capítulo en que Muñoz el Grande intentó recuperar el Cádiz para después revenderlo y volverlo a trincar en escasos siete años. Dice la leyenda que tó lo malo y tó lo bueno se repite en siete años, siete mares, siete colores tiene el arco iris, y están cayendo chuzos de punta, y la gente echa la vista atrás, cuando los foros de internet echaban chispas, catalanes y gaditanos se peleaban por un puesto en Segunda y la suerte fue esquiva. El Nástic, desde entonces, ha comprobado en sus carnes el discreto encanto del esquizofútbol, de Segunda B a Primera y ... quizá viceversa.
Callan hoy los agoreros, ¿quién iba a esperar el descenso del Zaragoza, el glorioso puesto del Almería o el éxito del Numancia? Pero el hombre cadista es el único que tropieza mil veces en el mismo canto rodado, like a rolling stone, así que no descartemos tiempos estrambóticos antes del Centenario, se acerca el centenario y el Cádiz con estos pelos (de punta).
Sobre el tejado de la incertidumbre y los nervios en adobo, el violionista cadista encarga una caja de actimel, al Cádiz le fallan los defensas, y un botón para el portero automático, el gafe de los guardametas pasa de castaño oscuro. Quitan a Contreras porque no se entera y le endilgan cinco a Limia y, por si fuera poco, cuatro chicharros a Armando en Sevilla, para que no quedase ni un rescoldo para los listillos. La venda en los ojos. La victoria en Soria, menos mal que ganó el Submarino en los Pajaritos, paradojas de la vida, el gorrión de Puertatierra no da crédito, yo creo que sufre ansiedad, "porejito", y le tiemblan las piernas, como a ciertos jugadores a los veinte minutos de juego. Y se escucha de pronto la voz de Procopio Amor Propio, el responsable del enésimo marrón del año, actor principal de la peli "Jugando con fuego", patrocinada por Capricho Andalú. "No me hablen del descenso". Y su voz hace eco, "descenso, descenso, descenso", y el publiquito cadista escucha voces. Si yo fuera rico. Ni Villarreal, ni Getafe, ni Almería. Esto es Cádiz. Y punto. Hacen falta cuatro puntos, admite el mismo Rául López. Fíjate tú cómo estará la cosa que el gran Raúl López, que sale a por todas hasta en el "dómino", sueña con cuatro puntitos de doce. Y a tomar por saco la "bijicleta".
Antes de soplar las velas, los agraciados con el mayor número de presencias amarillas, Rául López, Barla y Chico Linares, esperan acontecimientos. Ojo, que pinta. Tras el Nástic de Plástic, a Málaga del tirón. Que los dioses del 203 nos cojan confesaos. "Vamos a ganar", vaticina Linares, que considera que se truncarán ambas rachas, la descendente del Cádiz y la ascendente del Nástic. No es momento de contar batallitas del pasado reciente, cuando Linares disfrutó del Cádiz matagigantes, de los maravillosos años ochenta, de las fatiguitas amargas ... En realidad, Linares lo ha vivido casi todo, posee un historia impoluto incluso como técnico. Y ahora triunfa en la tele con su colección de nikis. "Hablamos cuando estemos a salvo". Vale.
Mayo 08, Submarino Amarillo (Diario de Cádiz)
Por la parte de Tembleque, bella localidad toledana, a los cadistas les traquetean hasta las canillas. Linares acaba de cumplir cincuenta años, como Mágico González, como Pepe Mejías,. Los ídolos alcanzan el medio siglo, el Cádiz se acerca a la centuria y hacen falta cincuenta puntos. Hay que ver lo que cuesta llegar a los cincuenta puntos, toda la temporada ejerciendo de violinista en el tejado, si yo fuera rico, Baldasano dixit, hasta los delirios de pobreza, made in Muñoz, pasando por el hipotético condicional gaditano, que se ha transformado en función del optimismo o zangangui imperante, del "si ganamos tres partidos seguidos" al "si perdemos los dos próximos". Un año de finales. El acabóse, como en el 2001, cuando los jugadores permanecieron cinco meses sin cobrar y se encajaron en la liguilla y la perdieron a manos del Nástic. Sólo sobreviven Raúl López, quien precisamente comparte con Linares otra marca, la de partidos de Liga disputados con el Cádiz, y Abraham Paz. El Submarino acabó la primera vuelta el quinto por la cola, pero encadenó nueve victorias consecutivas, se alzó campeón del grupo IV y, ya en el momento culminante, se acordó de las castas de dos trencillas de turno: Ceballos Silva y Lizondo Cortés, que protagonizaron sendos robos del siglo recién iniciado. Ese año, Ejido y Xerez subieron a Segunda y el Almería, que ha tocado esta temporada con los dedos la Uefa, concluyó en undécima posición. Los cadistas, medio turulatos, encuentran claves amarillas en cada situación relacionada con el balón envenenado. Este domingo bajaron a Segunda Zaragoza y Murcia, los dos clubes donde militó Pepe Mejías tras dejar el Cádiz, y se salvó el Recre, donde jugó Linares durante dos temporadas. Envidia de Recre y Almería, compasión por los maños, víctimas de otro año loco y de sus malditos gestores. Más piedras en el camino: salen de la quema Jerez y Jose González, se salva el Marbella de Oli y el destino travieso hermana en el último choque del año a Rácing y Osasuna, uno para la Uefa, otro salvado de milagro, precisamente los dos equipos damnificados por la célebre liguilla de la muerte súbita inventada por Irigoyen hace ya tanto tiempo ... El año que viene habrá tiros para subir a Primera.
La agónica visita del Nástic evoca el año del principio del fin de la peseta, eurosablazos por doquier, del redondeo de la poquita vergüenza y del capítulo en que Muñoz el Grande intentó recuperar el Cádiz para después revenderlo y volverlo a trincar en escasos siete años. Dice la leyenda que tó lo malo y tó lo bueno se repite en siete años, siete mares, siete colores tiene el arco iris, y están cayendo chuzos de punta, y la gente echa la vista atrás, cuando los foros de internet echaban chispas, catalanes y gaditanos se peleaban por un puesto en Segunda y la suerte fue esquiva. El Nástic, desde entonces, ha comprobado en sus carnes el discreto encanto del esquizofútbol, de Segunda B a Primera y ... quizá viceversa.
Callan hoy los agoreros, ¿quién iba a esperar el descenso del Zaragoza, el glorioso puesto del Almería o el éxito del Numancia? Pero el hombre cadista es el único que tropieza mil veces en el mismo canto rodado, like a rolling stone, así que no descartemos tiempos estrambóticos antes del Centenario, se acerca el centenario y el Cádiz con estos pelos (de punta).
Sobre el tejado de la incertidumbre y los nervios en adobo, el violionista cadista encarga una caja de actimel, al Cádiz le fallan los defensas, y un botón para el portero automático, el gafe de los guardametas pasa de castaño oscuro. Quitan a Contreras porque no se entera y le endilgan cinco a Limia y, por si fuera poco, cuatro chicharros a Armando en Sevilla, para que no quedase ni un rescoldo para los listillos. La venda en los ojos. La victoria en Soria, menos mal que ganó el Submarino en los Pajaritos, paradojas de la vida, el gorrión de Puertatierra no da crédito, yo creo que sufre ansiedad, "porejito", y le tiemblan las piernas, como a ciertos jugadores a los veinte minutos de juego. Y se escucha de pronto la voz de Procopio Amor Propio, el responsable del enésimo marrón del año, actor principal de la peli "Jugando con fuego", patrocinada por Capricho Andalú. "No me hablen del descenso". Y su voz hace eco, "descenso, descenso, descenso", y el publiquito cadista escucha voces. Si yo fuera rico. Ni Villarreal, ni Getafe, ni Almería. Esto es Cádiz. Y punto. Hacen falta cuatro puntos, admite el mismo Rául López. Fíjate tú cómo estará la cosa que el gran Raúl López, que sale a por todas hasta en el "dómino", sueña con cuatro puntitos de doce. Y a tomar por saco la "bijicleta".
Antes de soplar las velas, los agraciados con el mayor número de presencias amarillas, Rául López, Barla y Chico Linares, esperan acontecimientos. Ojo, que pinta. Tras el Nástic de Plástic, a Málaga del tirón. Que los dioses del 203 nos cojan confesaos. "Vamos a ganar", vaticina Linares, que considera que se truncarán ambas rachas, la descendente del Cádiz y la ascendente del Nástic. No es momento de contar batallitas del pasado reciente, cuando Linares disfrutó del Cádiz matagigantes, de los maravillosos años ochenta, de las fatiguitas amargas ... En realidad, Linares lo ha vivido casi todo, posee un historia impoluto incluso como técnico. Y ahora triunfa en la tele con su colección de nikis. "Hablamos cuando estemos a salvo". Vale.
Mayo 08, Submarino Amarillo (Diario de Cádiz)
martes, 20 de mayo de 2008
Más allá de Cai
Un miércoles cualquiera, Cai se sienta alrededor de unas cervezas fresquitas, alguien da la vez y suena "El mercadillo del Piojito". Se nota la mano de El Niño pródigo, José Antonio Fernández Mariscal, cuya guitarra se habla con la de Paco Delgado. Con Fopi, el legendario batería y vocalista, ya son tres los miembros originales de la banda gaditana. Mucho más allá de las mentes diminutas que les cerraron puertas a principios de los ochenta, impidiendo el desarrollo de una carrera plagada de hitos y evolución, en la casa chiclanera de Ignacio Olivera, reconvertido milagrosamente en bajista de rotundo pulso, una sonrisa delata a Blas Lago, a las teclas blancas y negras. Tiene tela suplir en la memoria colectiva al genio Chano Domínguez, pero él lo hace con desparpajo y humildad. Mañana, a las seis de la mañana, en planta, que Blas trabaja a pie de obra. Una cosa es el talento y otra el parné, la creación y la construcción.
La nueva formación de Cai, desprovista de la sección de vientos, retorna a sus raíces y ensaya con intensidad de cara a los conciertos del estío y la cita de la Bienal de Sevilla, que ilusiona a los músicos como si fuera un punto de partida. Por vez primera, en septiembre, el flamenco rendirá tributo al rock andaluz, más vale tarde que nunca, y un montón de grupos se reunirán para regocijo del personal. Veinte minutos tendrá cada banda. Fopi y compañía ya preparan el escueto repertorio, y aprovechan la reedición de su álbum de debut para montar la totalidad de sus temas, tan fieles como sugerentes. Tocan ahora la fascinante "Extraña seducción", saben que el mundo presenciará el ensayo a través del ojo que todo lo ve, ahí está Washy grabándolo todo para colgarlo en Youtube y otras páginas de internet. El ubicuo Washy, brigada amarilla y dj rapero, es primo hermano de El Niño, y en un año de reaparición de Cai ha hecho más por la promoción del grupo que todo un departamento de márquetin de la Cbs en muchas temporadas. Desde que volvieron a la escena, el 28 de abril del pasado año en Bornos, no hay concierto caitano que se le escape a la cámara de Washy. De Cai al mundo desde un rincón mancomunado de la Bahía de la luz. Hoy toca Cai. Pronto estará en el Youtube.
Ignacio y Blas, que ejercieron de seguidores quinceañeros de Cai en sus tiempos gloriosos, disfrutan a lo grande con el trío de ases. Recuperan la onírica "El viaje", de la injustamente tratada "Canción de la primavera", el tercer y postrero disco de Cai, y luego bordan "La roca del diablo". Palabras mayores. La guitarra de Delgado transporta a muchos años atrás, Fopi alarga las frases y El Niño corretea por los trastes de la alegría de estar aquí y ahora. Temas punteros de los dos primeros discos confluyen en el cuarto de ensayo y dan la bienvenida a una pieza poco habitual: "Solución a un viejo problema", que recuerda a institutos, grises, melenas al viento, conciertos a la luz de la luna, el Cádiz de finales de los setenta.
Un siglo después, los músicos se adaptan a las nuevas tecnologías, aprenden trucos de electrónica, un mundo a su alcance, y apenas necesitan palabras o correcciones. Se miran y tocan del tirón, apuntan alguna idea al margen pero la música fluye de manera especial. La música anda sola. Luego, tras el partidillo de entrenamiento, del que no desvelaremos estrategias y jugadas a balón parado, rememoran viejas peripecias y el sol deja paso a una luna recostá en el país de las flores, los acordes y las aventuras sin fin. Salvo que salgan algunos contratos entreverados, la próxima cita en directo será el 26 de julio en El Bosque, junto al gran Javier Ruibal.
Mayo 08, Cultura (Diario de Cádiz)
La nueva formación de Cai, desprovista de la sección de vientos, retorna a sus raíces y ensaya con intensidad de cara a los conciertos del estío y la cita de la Bienal de Sevilla, que ilusiona a los músicos como si fuera un punto de partida. Por vez primera, en septiembre, el flamenco rendirá tributo al rock andaluz, más vale tarde que nunca, y un montón de grupos se reunirán para regocijo del personal. Veinte minutos tendrá cada banda. Fopi y compañía ya preparan el escueto repertorio, y aprovechan la reedición de su álbum de debut para montar la totalidad de sus temas, tan fieles como sugerentes. Tocan ahora la fascinante "Extraña seducción", saben que el mundo presenciará el ensayo a través del ojo que todo lo ve, ahí está Washy grabándolo todo para colgarlo en Youtube y otras páginas de internet. El ubicuo Washy, brigada amarilla y dj rapero, es primo hermano de El Niño, y en un año de reaparición de Cai ha hecho más por la promoción del grupo que todo un departamento de márquetin de la Cbs en muchas temporadas. Desde que volvieron a la escena, el 28 de abril del pasado año en Bornos, no hay concierto caitano que se le escape a la cámara de Washy. De Cai al mundo desde un rincón mancomunado de la Bahía de la luz. Hoy toca Cai. Pronto estará en el Youtube.
Ignacio y Blas, que ejercieron de seguidores quinceañeros de Cai en sus tiempos gloriosos, disfrutan a lo grande con el trío de ases. Recuperan la onírica "El viaje", de la injustamente tratada "Canción de la primavera", el tercer y postrero disco de Cai, y luego bordan "La roca del diablo". Palabras mayores. La guitarra de Delgado transporta a muchos años atrás, Fopi alarga las frases y El Niño corretea por los trastes de la alegría de estar aquí y ahora. Temas punteros de los dos primeros discos confluyen en el cuarto de ensayo y dan la bienvenida a una pieza poco habitual: "Solución a un viejo problema", que recuerda a institutos, grises, melenas al viento, conciertos a la luz de la luna, el Cádiz de finales de los setenta.
Un siglo después, los músicos se adaptan a las nuevas tecnologías, aprenden trucos de electrónica, un mundo a su alcance, y apenas necesitan palabras o correcciones. Se miran y tocan del tirón, apuntan alguna idea al margen pero la música fluye de manera especial. La música anda sola. Luego, tras el partidillo de entrenamiento, del que no desvelaremos estrategias y jugadas a balón parado, rememoran viejas peripecias y el sol deja paso a una luna recostá en el país de las flores, los acordes y las aventuras sin fin. Salvo que salgan algunos contratos entreverados, la próxima cita en directo será el 26 de julio en El Bosque, junto al gran Javier Ruibal.
Mayo 08, Cultura (Diario de Cádiz)
Las gafas de Calamaro
Calamaro se deja ver como nunca lo había hecho, aparece cada día en la tele pa promocionar la gira española que le trae entusiasmado y, como siempre, conversador disperso. Hace un rato, Andrés se quitó las gafas al final del telediario de la 2, con el mate en la mano. Aquí estoy yo. Antes, acusó a la Policía argentina de introducir coca en la casa de Maradona, desvelando algunas claves de letras y actitudes. Qué grande, Calamaro, cuando dijo que si entre los rockeros aún escuecen los "te quiero", pues "escribí mil veces te quiero". Y aludió a la ceniza, a los ceniceros y al caso de Maradona. Los conductores del programa, Mara Torres y Carlos del Amo, se quedaron sin palabras, hasta se levantaron para despedir al artista.
Por la tarde, en la ventana de la Nierga tocó el piano para la web de la ser y canturreó un poco, desafine incluido para rematar la exhibición de arte accidental. Honestidad brutal. Puede que mucha gente conozca ahora a Calamaro, que no se prodigó ante los focos en sus tiempos salvajes. Siempre fue un tipo locuaz, a su manera. Concedió kilométricas entrevistas, escribió proclamas y manifiestos surrealistas, pero lo hacía de un modo discreto, acaso desde un encierro voluntario que duró años. Andrés parece feliz en su matrimonio y paternidad, limpio de fantasmas, y mantiene la vehemencia y el espíritu tanguero, todo el mundo pierde neuronas, Calamaro en su tinta televisiva, lo nunca visto.
Por la tarde, en la ventana de la Nierga tocó el piano para la web de la ser y canturreó un poco, desafine incluido para rematar la exhibición de arte accidental. Honestidad brutal. Puede que mucha gente conozca ahora a Calamaro, que no se prodigó ante los focos en sus tiempos salvajes. Siempre fue un tipo locuaz, a su manera. Concedió kilométricas entrevistas, escribió proclamas y manifiestos surrealistas, pero lo hacía de un modo discreto, acaso desde un encierro voluntario que duró años. Andrés parece feliz en su matrimonio y paternidad, limpio de fantasmas, y mantiene la vehemencia y el espíritu tanguero, todo el mundo pierde neuronas, Calamaro en su tinta televisiva, lo nunca visto.
Posdata: en los comentarios, enlace para ver la entrevista de la 2
lunes, 19 de mayo de 2008
Grandes cagadas en el festival de canes
Ha vuelto el indiano Paco Jones del festival de canes hablando maravillas de la peli de Woody Allen y porquerías de la de Hárrizon Fó. No ha caído bajo el festival de canes, oiga, va camino de ser el macdonald del cine mundial. Puro fachion glamú dermoestético. Antes las pasarelas de las estrellas del celuloide levantaban la admiración y envidia del resto de mortales. Hoy, cuando todo está atado y bien matado, con toa la pechonalidad globalisá, actrices y actores lucen sin vergüenza sus últimas operaciones antiestéticas, será cosa de la ética de la cosmética, y todo parece de plástico, todo mentira. El cine siempre fue una linda mentira, pero ahora se asemeja a la mentira colectiva y pierde gracia. Vamos a contar mentiras, pero en condiciones, Paco Jones.
Aprovecho pa recordar una chirigota gaditana, la del Love y cía, que no triunfó pero sorprendió sobremanera por su originalidad y dificultad. El festival de canes.
domingo, 18 de mayo de 2008
Bodas, comuniones y libros
Contrastes en la Alameda de Cádiz. En la iglesia del Carmen, bodas deluxe ante la atenta y cotilla mirada de guiris curiosos. Junto a la balaustrada, ágapes diversos, comuniones de nueve mil euros y vestidos de largo a las seis de la tarde. Y en el Baluarte de Candelaria, la Feria del Libro y del aire acondicionado. En esta tierra, las ferias superan a los libros, y las juergas a las reflexiones. Ahora se leen los partidos de fútbol, se estila mucho decir que el equipo talymecual ha sabido leer el partido. Los libros, muertos de la risa, asisten impávidos a la ceremonia, se dejan firmar por sus autores y toquetear por la concurrencia. El saber no ocupa lugar, y el lugar de los libros, tan escueto como hermoso, reinventa metáforas. Hace años, al Baluarte se le llamó el Museo del Ná, en eso quedó el frustrado Museo del Mar, primo hermano del Museo del Carnaval, el Museo del Taratachán, que sigue en el aire, por no hablar de los tropecientos proyectos de futuro incrustados en el pretérito imperfecto. Talacozamuymal. Así que la gente dedica unos minutos a morsegar las hechuras, los trajes, los maquillajes, los bolsos dorados, las gafas descomunales, los zapatos de charol, las camisas con chorreras, las lentejuelas y el terciopelo, los peinados estrambóticos y el aire que se dan los que esperan la llamada del Señor. Al otro lado, el supersónico divorcio de la cultura, la secta de las letras, el círculo cerrado del papel, un oasis dentro de otro oasis.
viernes, 16 de mayo de 2008
Slow train coming
Dibujos impresos digitalmente y luego coloreados con acuarelas y témperas. Retratos, bodegones, interiores, paisajes, desnudos, simbolismo y claroscuros. La obra pictórica de Bob Dylan, que un museo alemán ha expuesto por primera vez en público, contiene guiños a sus canciones, su impar manera de ver la vida, en varias perspectivas, y la exhuberancia y variedad que el gran Leonard Cohen atribuyó al cantante antes de saber que pintaba. Cohen comparó a Dylan con Picasso, precisamente el pintor favorito del juglar de Minnesota. La afición de Dylan por las artes gráficas viene de lejos, de 1968, cuando comenzó a tomar clases, y el cantante ya ilustró la portada del primer disco de The Band y su propio Selfportrait, así como otras cubiertas de trabajos propios y ajenos. Artista global impredecible, maestro siempre en movimiento.
Ya se han puesto a la venta las entradas para el concierto de Dylan en Jerez, ocho de julio, 21,30 horas. La gira se inicia esta noche en Worcester y pronto llegará a Europa. Hoy también se conoció otra visita de postín: Caetano Veloso, 28 de julio en Cádiz.
Ya se han puesto a la venta las entradas para el concierto de Dylan en Jerez, ocho de julio, 21,30 horas. La gira se inicia esta noche en Worcester y pronto llegará a Europa. Hoy también se conoció otra visita de postín: Caetano Veloso, 28 de julio en Cádiz.
jueves, 15 de mayo de 2008
La grúa y el gorrión
La grúa municipal está desatada estos días. Va a por todas. Está la cosa muy mal. La revancha de Seisdedos. Crimen y castigo. El que la hace la paga (demasiado para el cuerpo y la cartera), y quien apenas tiene, menos tiene que perder. Dos de la mañana. Una pareja de visitantes, desnortados por la luz cegadora de Cádiz y la noche de tapitas, camina azorada hacia ninguna parte, la Jefatura de la Policía Local, el depósito de vehículos trincados in fraganti donde sea con tal de recuperar el bólido. El ponientazo despeina su paciencia. Habían dejado el "rent a car" en lugar prohibido, junto al parque Genovés. Hay que ser sangangui, aparcaron a la vera del mar, a un paso de Santa Bárbara. Y por ahorrarse tres euros deben limpiar ahora los platos de la Tacita: 83 euros por la simpática grúa, 150 euros por el multazo. Un dinero. Vaya viaje. No está la economía para tales sablazos. Puñalada trapera. Nunca más. La próxima vez, en bici o un ratito a pie y otro caminando. Los turistas apoquinaron, pero en la ciudad de la ayuda familiar y el chapú no todo el mundo está en condiciones de costear menudo dispendio.
Ni que decir tiene que la recogida, la de los visitantes y la del coche, se convierte en aventura. De primeras, marcan el 092 en el móvil y sale la Poli de Rota, que además es bilíngüe, y mandan a los gachós a un rincón invisible. Luego encuentran Cádiz en las ondas, esto es Cádiz y aquí hay que pagar, y los guardias no se aclaran tampoco: Campo del Sur en extranjero no es tan fácil de explicar, ¿cuál es el depósito del South Country? Al final llegan con la lengua fuera al siniestro lugar subterráneo donde su cochecito llora ya de pena. Pocas facilidades para todo, eso sí, menos para pagar, ahí sí que admiten tarjetas de crédito, porca miseria.
A este paso, el queso gruyere de Cádiz se presentará ante el visitante en varios niveles estratosféricos, prohibido aparcar en la superficie, impuesto indirecto en las entrañitas de la ciudad que sonríe de milagro, que sonríe gracias a la economía submarina.
Por tierra, mar y ¡aire! Llegó el Ave a la ciudad del paro, el absentismo y la luz prodigiosa. Doña Teo se adelanta a su rival Magdalena y trae el Ave del tirón. No es que se le hayan roto los frenos, es que después del Toro de Osborne, el Gorrión de Puertatierra. Non Plus Ultra. El nuevo pollo pión de Cádiz sugiere estos días miles de porfías ciudadanas. Mientras azules y rojos se disputan el 2012, rindiendo autohomenajes mutuos en las ciudades o países políticamente amigas, ahora Valladolid, ahora Venezuela, esta gente sí que sienten sus colores. Cuatro páginas de autobombo para el pájaro-jaula. Cuando llegue el tren de lenta velocidad de verdad, ¿qué será de nosotros? Y durante los fastos del Doce, harán falta muchas multas de tráfico para cubrir el presupuesto. O nombrar a Rodríguez de Castro como comisario de la Expo del Doce, o como se llame. Dicen que Rodríguez de Castro vive dentro de la jaula. Los pájaros del Doce también sobreviven a gusto repartiéndose el pastel.
Ya hay tipazo pa los Carnavales. "Yo no imaginaba que el Bicentenario iría dedicado a Casa Crespo", suelta El Libi, Emilio Gutiérrez Cruz, vigilante del humor con denominación de origen, propietario de la retranca indígena. "Sólo falta el monumento al alpiste. Dios quiera que al pájaro no se le ocurra hacer nido, nos tendremos que ir a Somalia y cerrar hasta el Cortinglé". El Libi cree que el pajaro de la Consti del 78 se ha situado en el lugar perfecto, en contra de la opinión de tanto derrotista, pues entre otras cosas "está tol día pendiente de las pibas de la gasolinera, este pájaro nadie sabe si es de gasoil o sin plomo, pero listo sí qué es, mira cómo mira a la rubia mientras repone gasofa". Y un poco de reojo a los de agricultura y pesca.
"Fíjate si es carajote el gorrión que trae hasta jaula, como los kits de herramientas, y en permanente postura de esperar el 2 pa la Zona Franca. Qué mejor sitio que a la vera de Hacienda, con la de pájaros que hay en Hacienda". El Libi, tras unos días de observación y reflexión, sostiene que el pájaro viene ya oxidado, embolado, poco ágil, encarajotao, en flexión como pa echarse, y se pregunta cuánto habrá costao tamaña maravilla de la creación. "Menos mal que lo han hecho sin plumas, que si no, ya tendríamos el disfraz del año, tol mundo iría de plumas aprovechando las mudas del gachó. Yo creo, hablando ahora en serio, que el nivel de la grifa ha bajado mucho en Cádiz".
Si lo ve claro, el pájaro terminará haciendo nido en el campo hondo, sospecha El Libi. "Ahí hay hueco". Sálvese quien pueda. Casa Crespo ha dejado huella. Pronto, cuando el Ave aprenda a escaquearse, colgará el mismo cartel que la legendaria tienda de pájaros: "Ahora vengo".
Foto: Joaquín Pino
Mayo 08, Crónicas Urbanas (Diario de Cádiz)
Ni que decir tiene que la recogida, la de los visitantes y la del coche, se convierte en aventura. De primeras, marcan el 092 en el móvil y sale la Poli de Rota, que además es bilíngüe, y mandan a los gachós a un rincón invisible. Luego encuentran Cádiz en las ondas, esto es Cádiz y aquí hay que pagar, y los guardias no se aclaran tampoco: Campo del Sur en extranjero no es tan fácil de explicar, ¿cuál es el depósito del South Country? Al final llegan con la lengua fuera al siniestro lugar subterráneo donde su cochecito llora ya de pena. Pocas facilidades para todo, eso sí, menos para pagar, ahí sí que admiten tarjetas de crédito, porca miseria.
A este paso, el queso gruyere de Cádiz se presentará ante el visitante en varios niveles estratosféricos, prohibido aparcar en la superficie, impuesto indirecto en las entrañitas de la ciudad que sonríe de milagro, que sonríe gracias a la economía submarina.
Por tierra, mar y ¡aire! Llegó el Ave a la ciudad del paro, el absentismo y la luz prodigiosa. Doña Teo se adelanta a su rival Magdalena y trae el Ave del tirón. No es que se le hayan roto los frenos, es que después del Toro de Osborne, el Gorrión de Puertatierra. Non Plus Ultra. El nuevo pollo pión de Cádiz sugiere estos días miles de porfías ciudadanas. Mientras azules y rojos se disputan el 2012, rindiendo autohomenajes mutuos en las ciudades o países políticamente amigas, ahora Valladolid, ahora Venezuela, esta gente sí que sienten sus colores. Cuatro páginas de autobombo para el pájaro-jaula. Cuando llegue el tren de lenta velocidad de verdad, ¿qué será de nosotros? Y durante los fastos del Doce, harán falta muchas multas de tráfico para cubrir el presupuesto. O nombrar a Rodríguez de Castro como comisario de la Expo del Doce, o como se llame. Dicen que Rodríguez de Castro vive dentro de la jaula. Los pájaros del Doce también sobreviven a gusto repartiéndose el pastel.
Ya hay tipazo pa los Carnavales. "Yo no imaginaba que el Bicentenario iría dedicado a Casa Crespo", suelta El Libi, Emilio Gutiérrez Cruz, vigilante del humor con denominación de origen, propietario de la retranca indígena. "Sólo falta el monumento al alpiste. Dios quiera que al pájaro no se le ocurra hacer nido, nos tendremos que ir a Somalia y cerrar hasta el Cortinglé". El Libi cree que el pajaro de la Consti del 78 se ha situado en el lugar perfecto, en contra de la opinión de tanto derrotista, pues entre otras cosas "está tol día pendiente de las pibas de la gasolinera, este pájaro nadie sabe si es de gasoil o sin plomo, pero listo sí qué es, mira cómo mira a la rubia mientras repone gasofa". Y un poco de reojo a los de agricultura y pesca.
"Fíjate si es carajote el gorrión que trae hasta jaula, como los kits de herramientas, y en permanente postura de esperar el 2 pa la Zona Franca. Qué mejor sitio que a la vera de Hacienda, con la de pájaros que hay en Hacienda". El Libi, tras unos días de observación y reflexión, sostiene que el pájaro viene ya oxidado, embolado, poco ágil, encarajotao, en flexión como pa echarse, y se pregunta cuánto habrá costao tamaña maravilla de la creación. "Menos mal que lo han hecho sin plumas, que si no, ya tendríamos el disfraz del año, tol mundo iría de plumas aprovechando las mudas del gachó. Yo creo, hablando ahora en serio, que el nivel de la grifa ha bajado mucho en Cádiz".
Si lo ve claro, el pájaro terminará haciendo nido en el campo hondo, sospecha El Libi. "Ahí hay hueco". Sálvese quien pueda. Casa Crespo ha dejado huella. Pronto, cuando el Ave aprenda a escaquearse, colgará el mismo cartel que la legendaria tienda de pájaros: "Ahora vengo".
Foto: Joaquín Pino
Mayo 08, Crónicas Urbanas (Diario de Cádiz)
miércoles, 14 de mayo de 2008
Santos hinchas amarillos
Antes del ritual dominical, de la fiesta del sol y del cambio climático del humor repentino, botellón en los contornos del estadio. Macrobotellón vascoandaluz, una buena manera de coger el punto por adelantado. Gafas ahumadas pa controlar. Hay gente que se pone cardíaca. Adentro multan con tres mil euros la dosis de felicidad fugaz, así que mejor será pillar tono. Dame tono. A la vera del bar Gol, donde se barruntan ya los tantos tontos que esperan al personal, un gachó analiza la obra de Fondo Norte a fondo, "el enfoscado está perfecto, lo que yo te diga", musita a su compañero de tarde de fútbol. Beben, fuman, bombean el corazón cadista con la matraca, pintan el cielo de amarillo y azul. Donostiarras con pelucas, gaditanos con carita de póker. Comienza la terapia de grupo. Doctor, ¿qué me pasa?
Incrustado en el corazón de las Brigadas Amarillas, se sienten los colores de otra manera, con vehemencia y pasión, la experiencia que da un cuarto de siglo de vaivenes cadistas. Explosión inicial, al enemigo ni agua, bufandas al aire, eslóganes a la yugular del futuro inmediato, en el Fondo Sur reina el caos ordenado, los hinchas, acaso por inercia y por pura intuición, se sitúan estratégicamente en el partido. Cánticos guerreros para empezar, consignas onomatopéyicas, ojo avizor al balón y al marcador simultáneo. Cuando marque el Córdoba se le verán las ideas a medio Carranza, "va perdiendo el Jeré, va perdiendo el Jeré", y recorre la grada un suspiro de alivio, no se llama alegría, se llama alivio de luto. En el primer tiempo, los ánimos se confunden con los murmullos, Contreras hace méritos, alguien se acuerda de sus castas, Contreras pega saltitos, atento a la jugada. Tras "lo" de Ferrol, si alguien enciende un pitillo en Tribuna, Contreras pega un respingo. Hasta que la pelota hace un extraño, De la Cuesta se muestra blandito, Contreras no se entera y en el Sur del Sur se hace un silencio, y luego las sílabas golpean entrecortadas, y la gente deja de charlar sobre sus cosas: música, cine, la nochecita del sábado, el trabajo imposible, ¿qué pasará el día que tiren la Tribuna, si es que algún día se atreven?, ¿dónde acomodarán a los comodones de Tribuna? Al otro lado, en Preferencia, un carajote muestra una bandera de España y le dan la del pulpo. "¡Fuera los fachas del estadio!" Los Brigadas lucen su condición rebelde antifascista, Che Guevarra en pecho, e invitan a najarse al tontaina que provoca a las dos Españas, una de ellas se quedará con el balón. La basca se rebela, en defensa de los vascos de noble corazón. Ya estamos liaos. Carranza simboliza la sorda lucha de clases, los pilares de la religión gadita.
Con el cero a uno, los más jóvenes del Sur entonan un irascible "¡Menos millones y más cohones!" que suena rotundo y extraño. Y un significativo "¡once ráules lópez, queremos once raúles lópez!". Washy, brigada pionero y juicioso, asegura que se trata de la bronca más elevada de la temporada, pero sintetiza la filosofía del colectivo ultracadista: "Una buena pitada a tiempo no viene mal". Y acerta de pleno, no veas cómo salen los gachós tras la bronca de Procopio, que rima con amor propio. Los "oooohs", "ayyyys" y "uuuuys" se transforman en exclamaciones primarias, desahogo vital, pura psicología de masas. Ya en el primer tiempo, los brigadas alternan el desencanto con el ánimo a los suyos. "Si pitamos a los nuestros por cualquier cosa, perdemos de todas todas. Esto es un estado de ánimo". A una bronca repentina le sigue un "vámonos que nos vamos". Un toque y un cariño. El público aprende de anteriores etapas; "fuimos demasiado condescendientes", apunta un hincha de junto; "hay que vivir el partido con ellos, desde dentro", sentencia otro, "ahora toca empujar", y el repertorio amarillo se transforma en una voz. De pronto, el bombista de abajo sube las escaleras azorado, con un cabreo del quince, y exige al bombista de arriba que coja el ritmo, joé, y la gente se ríe, vamos todos, everybody, y el árbitro silba la melodía incierta y toca echar cuentas, vaya temporada. Pecando de ingenuo, que es gerundio.
Descanso dominical. La barra, vacía. Las caritas, un poema. La charla, esclarecedora. Algún hincha analiza el encuentro con brillantez y medida, toca hablar de fichas frustrados, de los ausentes, del año en que el Cádiz vivió peligrosamente. Muñoz en boca de casi todos. División de opiniones. "Muñoz no arriesga mucho, pero la afición se ha acostumbrado malamente, no somos el Villarreal, ni el Getafe, somos pobres, no tenemos pelotazos urbanísticos, somos de Segunda. Cádiz es de Segunda". "De Segunda B", tercia un derrotista. El Cádiz de boquilla, el Cádiz de corazón. Carranza, por un momento, representa las quimeras y escasas certezas de la sociedad gaditana. Así que mejor callarse y soñar con un punto, al menos.
Las nubes se levantan, las cámaras digitales hacen click, y en un cuarto de hora de ná, cambio climático del tirón, de la desazón a la esperanza, el esquizofútbol en do mayor. Los Brigadas exhiben su poderío, el Cádiz regala veinte minutos de categoría, la pelliza de Lillo protagoniza escenas de cachondeo, Riesco se la lleva mortal, alguien la da un cosqui a Kosowsky, que "está paecharlo, ha venido quemao", y caen en desuso las palabras de antes, cuando el equipo necesitaba un organizador, un tipo que las ponga al hueco, un poco de porfavó, y se pasa del vacío absoluto al clímax. El fútbol es así. "Ira, ira, ¡gooooool!" Dani y Natalio enfervorizan al personal, se suceden las emociones fuertes, "vamos a meterles cuatro", fútbol vertical desde la vertical de Fondo Sur. En Tribuna se ve el fútbol horizontal. Por lo menos cuatro. Nuevo repertorio de cánticos en do mayor. Y en menos que canta un gallo cambian otra vez las tornas, Paz ordena a los suyos que den un pasito atrás y la cosa queda en manos de Contreras. "Y Armando, haciendo paradones en San Mamés", se escucha de fondo en el Fondo Sur. "A Armando no le hubiesen perdonado ni la mitad de errores". "¿Qué queda del espíritu de Chapín?" Hasta Preferencia explota. Todos los fantasmas de la temporada recorren la mente y las conversaciones del hincha cadista. Tembleque, hay que hermanarse con la localidad toledana de Tembleque. El cadismo oye voces, doctor, ¿qué me pasa? Cada jugador del Cádiz recibe su merecido en los corrillos amarillos. Es curioso, en noventa minutos, algunos de los futbolistas pasan del infierno al cielo y viceversa, el público cambia de opinión por nones, cosas de la pelota caprichosa, de villanos a héroes, del infinito asl término medio, en Cádiz no hay término medio. Y los jugadores seguro que escuchan la voz del cadista ahí abajo, hay para todos. Sólo se salvan unos pocos. Mejor no reproducir algunos epítetos que se ganan el polaco, el castellonense hasta que redime sus pecados, el cordobés o la santanderina, que no está, "no se ve a la rubia desde aquí".
Un puntito, algo es algo, "por lo menos tendremos emociones fuertes hasta el final", señala Washy a la postre, mientras recibe consignas y apresurados resúmenes del encuentro. "La culpa, de Muñoz", dice un chavalito, que se acuerda de Lobos, Pavoni, Sesma, Armando ... ¿Y Baldasano? No mienten la bicha. Afuera, donostiarras y gaditas vuelven a colmar los bares y celebran juntos el punto conseguido.
Mayo 08, Submarino Amarillo (Diario de Cádiz)
Incrustado en el corazón de las Brigadas Amarillas, se sienten los colores de otra manera, con vehemencia y pasión, la experiencia que da un cuarto de siglo de vaivenes cadistas. Explosión inicial, al enemigo ni agua, bufandas al aire, eslóganes a la yugular del futuro inmediato, en el Fondo Sur reina el caos ordenado, los hinchas, acaso por inercia y por pura intuición, se sitúan estratégicamente en el partido. Cánticos guerreros para empezar, consignas onomatopéyicas, ojo avizor al balón y al marcador simultáneo. Cuando marque el Córdoba se le verán las ideas a medio Carranza, "va perdiendo el Jeré, va perdiendo el Jeré", y recorre la grada un suspiro de alivio, no se llama alegría, se llama alivio de luto. En el primer tiempo, los ánimos se confunden con los murmullos, Contreras hace méritos, alguien se acuerda de sus castas, Contreras pega saltitos, atento a la jugada. Tras "lo" de Ferrol, si alguien enciende un pitillo en Tribuna, Contreras pega un respingo. Hasta que la pelota hace un extraño, De la Cuesta se muestra blandito, Contreras no se entera y en el Sur del Sur se hace un silencio, y luego las sílabas golpean entrecortadas, y la gente deja de charlar sobre sus cosas: música, cine, la nochecita del sábado, el trabajo imposible, ¿qué pasará el día que tiren la Tribuna, si es que algún día se atreven?, ¿dónde acomodarán a los comodones de Tribuna? Al otro lado, en Preferencia, un carajote muestra una bandera de España y le dan la del pulpo. "¡Fuera los fachas del estadio!" Los Brigadas lucen su condición rebelde antifascista, Che Guevarra en pecho, e invitan a najarse al tontaina que provoca a las dos Españas, una de ellas se quedará con el balón. La basca se rebela, en defensa de los vascos de noble corazón. Ya estamos liaos. Carranza simboliza la sorda lucha de clases, los pilares de la religión gadita.
Con el cero a uno, los más jóvenes del Sur entonan un irascible "¡Menos millones y más cohones!" que suena rotundo y extraño. Y un significativo "¡once ráules lópez, queremos once raúles lópez!". Washy, brigada pionero y juicioso, asegura que se trata de la bronca más elevada de la temporada, pero sintetiza la filosofía del colectivo ultracadista: "Una buena pitada a tiempo no viene mal". Y acerta de pleno, no veas cómo salen los gachós tras la bronca de Procopio, que rima con amor propio. Los "oooohs", "ayyyys" y "uuuuys" se transforman en exclamaciones primarias, desahogo vital, pura psicología de masas. Ya en el primer tiempo, los brigadas alternan el desencanto con el ánimo a los suyos. "Si pitamos a los nuestros por cualquier cosa, perdemos de todas todas. Esto es un estado de ánimo". A una bronca repentina le sigue un "vámonos que nos vamos". Un toque y un cariño. El público aprende de anteriores etapas; "fuimos demasiado condescendientes", apunta un hincha de junto; "hay que vivir el partido con ellos, desde dentro", sentencia otro, "ahora toca empujar", y el repertorio amarillo se transforma en una voz. De pronto, el bombista de abajo sube las escaleras azorado, con un cabreo del quince, y exige al bombista de arriba que coja el ritmo, joé, y la gente se ríe, vamos todos, everybody, y el árbitro silba la melodía incierta y toca echar cuentas, vaya temporada. Pecando de ingenuo, que es gerundio.
Descanso dominical. La barra, vacía. Las caritas, un poema. La charla, esclarecedora. Algún hincha analiza el encuentro con brillantez y medida, toca hablar de fichas frustrados, de los ausentes, del año en que el Cádiz vivió peligrosamente. Muñoz en boca de casi todos. División de opiniones. "Muñoz no arriesga mucho, pero la afición se ha acostumbrado malamente, no somos el Villarreal, ni el Getafe, somos pobres, no tenemos pelotazos urbanísticos, somos de Segunda. Cádiz es de Segunda". "De Segunda B", tercia un derrotista. El Cádiz de boquilla, el Cádiz de corazón. Carranza, por un momento, representa las quimeras y escasas certezas de la sociedad gaditana. Así que mejor callarse y soñar con un punto, al menos.
Las nubes se levantan, las cámaras digitales hacen click, y en un cuarto de hora de ná, cambio climático del tirón, de la desazón a la esperanza, el esquizofútbol en do mayor. Los Brigadas exhiben su poderío, el Cádiz regala veinte minutos de categoría, la pelliza de Lillo protagoniza escenas de cachondeo, Riesco se la lleva mortal, alguien la da un cosqui a Kosowsky, que "está paecharlo, ha venido quemao", y caen en desuso las palabras de antes, cuando el equipo necesitaba un organizador, un tipo que las ponga al hueco, un poco de porfavó, y se pasa del vacío absoluto al clímax. El fútbol es así. "Ira, ira, ¡gooooool!" Dani y Natalio enfervorizan al personal, se suceden las emociones fuertes, "vamos a meterles cuatro", fútbol vertical desde la vertical de Fondo Sur. En Tribuna se ve el fútbol horizontal. Por lo menos cuatro. Nuevo repertorio de cánticos en do mayor. Y en menos que canta un gallo cambian otra vez las tornas, Paz ordena a los suyos que den un pasito atrás y la cosa queda en manos de Contreras. "Y Armando, haciendo paradones en San Mamés", se escucha de fondo en el Fondo Sur. "A Armando no le hubiesen perdonado ni la mitad de errores". "¿Qué queda del espíritu de Chapín?" Hasta Preferencia explota. Todos los fantasmas de la temporada recorren la mente y las conversaciones del hincha cadista. Tembleque, hay que hermanarse con la localidad toledana de Tembleque. El cadismo oye voces, doctor, ¿qué me pasa? Cada jugador del Cádiz recibe su merecido en los corrillos amarillos. Es curioso, en noventa minutos, algunos de los futbolistas pasan del infierno al cielo y viceversa, el público cambia de opinión por nones, cosas de la pelota caprichosa, de villanos a héroes, del infinito asl término medio, en Cádiz no hay término medio. Y los jugadores seguro que escuchan la voz del cadista ahí abajo, hay para todos. Sólo se salvan unos pocos. Mejor no reproducir algunos epítetos que se ganan el polaco, el castellonense hasta que redime sus pecados, el cordobés o la santanderina, que no está, "no se ve a la rubia desde aquí".
Un puntito, algo es algo, "por lo menos tendremos emociones fuertes hasta el final", señala Washy a la postre, mientras recibe consignas y apresurados resúmenes del encuentro. "La culpa, de Muñoz", dice un chavalito, que se acuerda de Lobos, Pavoni, Sesma, Armando ... ¿Y Baldasano? No mienten la bicha. Afuera, donostiarras y gaditas vuelven a colmar los bares y celebran juntos el punto conseguido.
Mayo 08, Submarino Amarillo (Diario de Cádiz)
martes, 13 de mayo de 2008
Rocanrol burbuja
La eclosión de festivales musicales no cesa. Este verano traerá a España un carrusel de figuras del rock, el pop y los miles de estilos que subsisten en estos tiempos salvajes siempre con la guadaña de la crisis de la industria en vilo. Precisamente la madre de todas las crisis, la del ladrillo, el acabóse de la burbuja inmobiliaria, influye sobremanera en la proliferación de festivales de rock en la Piel de Toro. Nunca se vio nada igual. Promotores de toda la vida confirman la entrada en el sector de empresarios recién llegados del urbanismo feroz. Dinerito fresco, parné moreno, limpieza de conciencias y nuevas inversiones para luchar contra el barruntado ruinazo. La música en directo, por una vez en la vida, sale ganando de tales circunstancias. Basta con echar un vistazo al calendario de macrofestivales del período estival. Lástima que la provincia de Cádiz vuelva a quedar la mar de lejos de la fiebre musical. Aquí, por no llegar no ha llegado ni la peli de Scorsese sobre los Rolling Stones, estrenada en todas las capitales de provincia andaluzas menos la gaditana. Para colmo, la ciudad de Cádiz pierde por obras uno de los escasos recintos, el teatro Pemán, aunque ya antes carecía de un local en condiciones, la ansiada plaza multiusos. Aquí tardan un mes en levantar un emporio comercial y mil años en montar un espacio cultural digno y necesario. Cádiz ha perdido oportunidades de oro por la escasez de un auditorio, desde Bob Dylan a Van Morrison, en años precedentes.
Mientras, en el resto del territorio hispano surgen los conciertos bajo las piedras. Roger Waters observó días atrás el lado oscuro de la luna en Atarfe (Granada), vuelven Extremoduro y Tequila, vienen los herederos de los Doors, los Sex Pistols, Radiohead, Police, Bob Dylan, Neil Young, Alanis Morrisete, Amy Winehouse, Rem, Andrés Calamaro, Cat Power, Stranglers, Kiss, Chemichal Brothers, Metallica o Bruce Springsteen, entre otros muchos. Habrá festivales en los lugares más insospechados: pueblos de la meseta, rincones del litoral, el Rock in Rio de Madrid, un despliegue inusual y poco acorde con los tiempos cortitos que corren. En algún lugar recóndito hay que colocar el dinero. Cuando no interese, con la música a otra parte.
En el desierto, un oasis, Jerez no sólo traerá a Bob Dylan el 8 de julio. En septiembre recalará el gran Lito Vitale, en el Festival de Músicas Avanzadas.
Mayo 08, Cultura (Diario de Cádiz)
Mientras, en el resto del territorio hispano surgen los conciertos bajo las piedras. Roger Waters observó días atrás el lado oscuro de la luna en Atarfe (Granada), vuelven Extremoduro y Tequila, vienen los herederos de los Doors, los Sex Pistols, Radiohead, Police, Bob Dylan, Neil Young, Alanis Morrisete, Amy Winehouse, Rem, Andrés Calamaro, Cat Power, Stranglers, Kiss, Chemichal Brothers, Metallica o Bruce Springsteen, entre otros muchos. Habrá festivales en los lugares más insospechados: pueblos de la meseta, rincones del litoral, el Rock in Rio de Madrid, un despliegue inusual y poco acorde con los tiempos cortitos que corren. En algún lugar recóndito hay que colocar el dinero. Cuando no interese, con la música a otra parte.
En el desierto, un oasis, Jerez no sólo traerá a Bob Dylan el 8 de julio. En septiembre recalará el gran Lito Vitale, en el Festival de Músicas Avanzadas.
Mayo 08, Cultura (Diario de Cádiz)
Gary Louris, un vagabundo en El Puerto de Santa María
El Puerto Skyline. Gary Louris, quien fuera líder de los Jayhawks, el grupo renovador de la tradición del rock americano por excelencia, actuará en el teatro Pedro Muñoz Seca, en El Puerto de Santa María, el día 17 de junio. El músico y arquitecto nacido en Toledo (Ohio), que reside largas temporadas en la ciudad portuense, alejado del mundanal ruido, presentará su primer disco en solitario, "Vagabond", que ha sido producido por Chirs Robinson, de los grandiosos Black Crowes.
Amigo y vecino del productor asturiano Paco Loco, que desde hace años registra numerosos discos cerquita de la Base Naval de Rota, en su prestigiosos estudio de grabación, el guitarrista, pianista y cantante mantiene estrechos vínculos con España, y desde hace una década con Andalucía, merced a su amor por la obra de Gaudí, la filosofía vital de Miguel de Unamuno y otros factores, algunos de ellos religiosos y culturales. Louris compartió liderazgo de los Jayhawks con Mark Olson, entre 1985 y 2003, grabando siete discos de alta calidad, hasta el extraordinario "Rainy day music", con el que se despidió la banda; su último concierto, por cierto, sucedió en Valencia cuatro años atrás. Los Jayhawks tocaron en Puerto Real a principios de siglo. Procedente de una banda de rockabilly, Gary Louris se embarcó en la linda aventura de revolucionar el rock tradicional yanqui, con talento y respeto a las fuentes, aunque también ha editado discos con una banda paralela, Golden Smog. Para huir de los largos y fríos inviernos de Minnesota, su lugar de residencia en los Estados Unidos, ha elegido El Puerto este hombre criado en un colegio de jesuitas que quedó impactado por la obra "Del sentimiento trágico de la vida", de Unamuno. El disco "Smile", de los Jayhawks, posee una clara influencia de dicho libro ensayo.
Louris ha participado en algunas producciones "portuenses" de Paco Loco, desde su colaboración con los Jet Lag hasta el sello que ha impregnado en el disco de los Sadies, que también actuaron en el teatro Muñoz Seca meses atrás.
Mayo 08, Cultura (Diario de Cádiz)
Amigo y vecino del productor asturiano Paco Loco, que desde hace años registra numerosos discos cerquita de la Base Naval de Rota, en su prestigiosos estudio de grabación, el guitarrista, pianista y cantante mantiene estrechos vínculos con España, y desde hace una década con Andalucía, merced a su amor por la obra de Gaudí, la filosofía vital de Miguel de Unamuno y otros factores, algunos de ellos religiosos y culturales. Louris compartió liderazgo de los Jayhawks con Mark Olson, entre 1985 y 2003, grabando siete discos de alta calidad, hasta el extraordinario "Rainy day music", con el que se despidió la banda; su último concierto, por cierto, sucedió en Valencia cuatro años atrás. Los Jayhawks tocaron en Puerto Real a principios de siglo. Procedente de una banda de rockabilly, Gary Louris se embarcó en la linda aventura de revolucionar el rock tradicional yanqui, con talento y respeto a las fuentes, aunque también ha editado discos con una banda paralela, Golden Smog. Para huir de los largos y fríos inviernos de Minnesota, su lugar de residencia en los Estados Unidos, ha elegido El Puerto este hombre criado en un colegio de jesuitas que quedó impactado por la obra "Del sentimiento trágico de la vida", de Unamuno. El disco "Smile", de los Jayhawks, posee una clara influencia de dicho libro ensayo.
Louris ha participado en algunas producciones "portuenses" de Paco Loco, desde su colaboración con los Jet Lag hasta el sello que ha impregnado en el disco de los Sadies, que también actuaron en el teatro Muñoz Seca meses atrás.
Mayo 08, Cultura (Diario de Cádiz)
lunes, 12 de mayo de 2008
This land is your land
Bien nos diste coba, Cristóbal. Otan sí, bases dentro. Greetings from Rota, Spain, y el que no diga ole que se le seque la yerbabuena. De las palabras a los hechos, un trecho. El Gobiennnnno va a remodelar el muelle de la base aeronaval de Rota por un puñado de millones de "leuros". Esto es, va a pagar el pato a la Nato, a costa del contribuyente pazguato. Trabajito sucio, que se dice. Miss Condolencias Rice le guiñó el ojo al Moratinos y ¡zas!, flechazo inmediato. Ayer marcharon un montón de valientes a la puerta de la Base, para protestar contra la ídem, y se toparon con la indiferencia general, la de los medios, la de la gente, la de los guardias. Pasado el boom mediático contra la guerra, viva los B52s, los peinados y el grupo de baile yanqui, que vuelve a volar en colorines. Por cierto, los aviones a ras de suelo pasan de castaño oscuro, la norma impide a los valerosos pajaritos de los Usa acercarse a los términos municipales, y mucho menos acojonar al personal. Lo hacen a diario, que pa eso this land is your land, colega. Como se les caiga una caja de herramientas nos vamos todos al Caribe. Lo de "Bases fuera" parece una guerra perdida, los socialistas se bajan los cucos rápido, ya se sabe que querer no es poder, y que el poder quema, y que ya no volverá Rota a ser ese pueblo encantador cultivador de tomates. Pero que no nos tomen el pelo, please. Tener que pagarles a los yanquis las obras de ampliación del muelle, pa llenarlo enterito de submarinos nucleares y demás naves pacifistas, ya suena a cachondeo, será que les sale cara la obra al cambio, pobrecito dólar, una limosnita, cagüendié. Algunas cosas buenas ha traído la Base: trabajo, cierto espíritu cosmopolita y el rocanrol. Oh, yeah.
domingo, 11 de mayo de 2008
Bulerías de Creta
Manolo habla claro, por primera vez. Su cuarto disco en soliario, que se publica el 13 de mayo bajo el título de "Saldremos a la lluvia", contendrá sinceridad, compromiso, esperanza y las imágenes abstractas a las que acostumbra el músico catalán, aunque menos. Manolo García anuncia que "es el primer disco en que digo claramente lo que me preocupa". Y la primera vez que sale de gira con el patrocinio externo de La Primera. De El Último a la Primera. Manolo nunca se dejó llevar por las luces de neón, la vanidad sobredimensionada o el márquetin, pero en esta ocasión aprovecha el tirón de la tele, y no de una empresa de hamburguesas de tornillos, para dar a conocer su nuevo álbum y las versiones de sus temas célebres. De momento, se conocen algunas fechas de la inminente gira hispana, que se inicia el 30 de mayo en Granada, y parece que pasará por Algeciras el día 18 de julio.
Aires mediterráneos, lienzos rítmicos, escritura automática, producción esmerada, dos años de preparación, la colaboración de Ojos de Brujo en los temas más aflamencados, e incluso instrumentos tradicionales griegos ofrece la nueva entrega de quien fuera cantante de Los Burros, Los Rápidos y El Último de la Fila. Catalán con raíces albaceteñas, ciudadanos de un mundp pequeño, el suyo, y enorme, el de los demás, que compone y edita discos en total libertad de creación, a su ritmo. Y pinta por necesidad. Coincidiendo con la gira del 08 montará una exposición gráfica para ilustrar las canciones y su momento vital, siempre tan peculiar.
Bulerías de Creta con bailes incorporados, ríos de vida, consuelo para los desamparados y tristes y un estilo particular, un sello inconfundible que sus detractores critican por redundante, ya desde los tiempos de El Último. Sambenito que no cuelgan a otros. Como decía el gran Quimi Portet, retirado ahora a la segunda fila pero editando discos magníficos en catalán, la Constitución no obliga a cambiar de estilo. No obstante, García ya demostró en 2005, durante la gira de presentación del anterior disco, que es capaz de reinventar su repertorio y no aburrirse en la escena. Manolo ha actuado en la provincia en multitud de ocasiones desde los años ochenta, desde los tiempos en que el santuario del colegio La Salle de Puerto Real reinaba en el huérfano musical gaditano hasta su última visita a San Fernando. A Manolo le llaman Manolito sus fieles seguidores, quienes ya esperan sus nuevas canciones como se aguarda a la lluvia.
Mayo 08, Cultura (Diario de Cádiz)
sábado, 10 de mayo de 2008
¡Ahí va la Virgen!
Del culto neolítico a la incultura popular, del salto de la verja al turismo supersticioso, el fanatismo, la feria de las vanidades, la nueva aristocracia, fontanería y electricidad moral, cada uno bebe su religiosidad como le viene en gana, hace con su cuerpo y su espíritu lo que le place. Un respeto. Ahí va la Virgen, zarandeada por las circunstancias, ignorante de lo que ocurre a su vera, o quizá lo vea todo en tecnicolor, para vergüenza del personal, que va hasta las trancas, nieve en cantidades industriales, mollate hasta el amanecer, matrimonios en el alambre, con los cuernos, mi capitán, con los cuernos. Viva la Blanca Paloma, que es el nombre de una pizzería portuense propiedad de Vincenzo, un simpático italianín que nunca ha cruzado el Coto, nunca ha pisoteado a la madre naturaleza, no sabe, ni contesta cuando le preguntan si prefiere el ambiente del Rocío o el medio ambiente de Doñana, el polvazo del camino o las moscas de caballo, que gastan lo que no tienen con tal de fardar en la aldea global. Señoritos de ayer y de hoy, tiran más dos carretas que la personalidad de un pueblo, el famoseo viste mucho, los socialistas lo primero que hicieron al llegar al poder fue encabezar la procesión sin fin, por algo será. Votos y devotos. Vaya espectáculo, la romería de la redención eterna. Cada pueblo tiene su fiesta y su desmadre, y cuanta menos cultura se inculca más culturas nacen: la cultura del vino, la cultura del papeo, el culto al cuerpo, el culturismo, los cultos al señor don gato y más culturas más. La cultura popular, otro eufemismo. Mañana, cuando la Virgen y la Tele digan ahora, a saltar la valla. El gran trance.
viernes, 9 de mayo de 2008
Colgados del youtube
Te colgarán en el youtube. Si te escantillas, y cuando menos te lo esperes, te buscarás la ruína, enrojecerás de furia, sonrojarás a tu pueblo, vergüenza propia, vergüenza ajena, El Puerto reina en el youtube, escriba las palabras mágicas, haga click y se abrirá un mundo aparte. Lo peorcito de cada casa a toda pantalla, los hechos más repugnantes, las declaraciones más impresentables, el bolillón del quince que cogiste el otro día, tú no te acuerdas, pero te pillaron, grabaron el morazo en una birria de teléfono y ahora te ven cada noche desde Filadelfia. Ira, ira, el Lolo ... será carajote. Pa toa la vida. Al garete los vicios y la virtudes privadas, todo se hace público, cuidaíto con lo que hacemos, usted, que le pueden colgar en el youtube. Haciendo el candao hasta los restos. El Puerto hace tiempo que reina en la paginita de marras, una web morsegona especializada en grabaciones caseras, series de toda la vida, la tele a la carta y el gamberreo colectivo. Hoy, cualquiera alcanza notoriedad, está tirao lograr un minuto de gloria, no hace falta acudir a concursos o castings, basta con encender la cámara y rodar, a ser posible, el momento más indeseable de nuestras puercas vidas. La Feria, como no podía ser menos, ha dejado imágenes de El Puerto en el youtube realmente significativas: colocones en do mayor, palabritas subidas de tono, caritas desencajás, la incultura al poder y el fanatismo del Sur del Sur. Ojalá hubiera existido un youtube en los tiempos azarosos y oscuros de la política y la sociedad portuenses. Esos chanchullos de andar por casa, los pactos antinatura, los escándalos de Puerto Churri, los coches regalaos, los billetes de lotería premiados, las reuniones misteriosas, la mafia con mayúsculas y toda la gente que tuvo la oportunidad de callarse y no lo hizo. Lástima que no quedase registrada, ni en imagen ni en sonido, ni siquiera una mínima parte de lo ocurrido. De todos modos, lo mejor de la Feria, con diferencia, ha sido la entrevista de Antena Bahía con el susodicho. El fin de los días.
Mayo 08, El Alambique, El Puerto (Diario de Cádiz)
Mayo 08, El Alambique, El Puerto (Diario de Cádiz)
jueves, 8 de mayo de 2008
Dylan Tour, from Maine to Spain
Ya queda menos. Dos meses. Hagan juego, ñores. La página Never Ending Pool, heredera indirecta de la chapada Dylan Pool, ha abierto las apuestas, lo que traducido resulta que falta ná y menos pa que se inicie la enésima gira de Bob Dylan. From Maine to Spain, anuncian. Jerez aguarda. Será el 8 de julio, aunque algunos aún no lo crean. Dylan estará en Jerez, pero no dormirá en Jerez. Visto y no visto, viajará en jet privado, según aseguran fuentes de las organización. Vendrá, tocará y se najará. Eso dicen, claro, con Dylan nunca se sabe. El Ayuntamiento ofreció al representante del legendario artista el estadio Chapín al completo, pero Dylan no llena recintos mastodónticos, salvo excepciones como Buenos Aires, donde reunió semanas atrás a 25.000 personas. Así que el juglar actuará en el mismo fondo donde volaron los pájaros de Serrat y Sabina.
miércoles, 7 de mayo de 2008
Pichichis gaditanos
Dos pichichis gaditanos y ninguno juega en el Cádiz. Lo nunca visto. Güiza y Yordi, jerezano y xerecista, respectivamente, lideran las tablas de goleadores en Primera y Segunda. Y el Submarino, erre que erre, jugando con fuego, la maldición del nueve al cuadrado. Como dijo el Yuyu, a este paso van a pasar los resúmenes de los goles del Cádiz en Canal Historia. El gol, para el Cádiz, es un misterio de la antigüedad. Cosas del National Geographic y de la antropología del tanto aunque sea tonto. "Ya no quedan nueves. Ni en Cádiz ni en ninguna parte. Con la desaparición de los extremos, se ha perdido el ariete", apunta el máximo goleador de la historia del club amarillo, Paco Baena. Sólo él y Salvador Mejías alcanzaron el título de Pichichi con el Cádiz. Temporadas 73-74, con 23 dianas, y temporada 84-85, con 17 goles. Nunca más. Sueña Carranza con un goleador de los de antes mientras los gaditanos la van metiendo por ahí. Porca miseria. Maldonado, Barral, Pablo Sánchez ... muchos goles en la recámara, pocas oportunidades. Brindis al gol. Cádiz no sólo exporta palabras castizas, como pisha y killo; también exporta pichichis ... de Jerez. El gol se está perdiendo y es una pena. El goleador, como la raza cadista que viajó a Jerez en el verano del 05 en el tren de la Lista de Schindler, en vías de extinción. Como el lince ibérico. Cero a cero patatero ¿Será también culpa de Zapatero?
¿Dónde estabas tú en mayo del 68? Paco Baena estaba en el Balón de Cádiz, iniciando su particular revolución del gol por toda la escuadra. El año que bajó el Cádiz a Tercera, el legendario delantero centro gaditano alternaba el segundo equipo de la cantera, que este año retorna a la Primera Andaluza cuarenta años después, con el Cádiz de sus amores. No figura en las estadísticas, no obstante, hasta el rotundo ascenso a Segunda. "Hice diez doce goles, me parece recordar, pero el número de goles que marqué con el Cádiz no queda claro, creo que logré entre 110 y 115 goles". Palabra de goleador. Se dice pronto, centenario Baena, que tomó el testigo de otro sabueso del gol, Machicha, 17 y 19 goles contemplaron sus últimas temporadas en Cádiz. Al siglo siguiente, nadie recuerda cotas similares de puntería, más bien se acuerda de las castas de la maldición del nueve. Víctimas del mal fario no han faltado en las últimas décadas: desde el larguirucho Gallis, que en realidad jugaba de defensa central del equipo rival, hasta el megacrack Acuña, pasando por Arica Hurtado, Cabrera, Loreto, Puente, Quino, Mortadelo, Medina o los actuales Casas y Natalio. Se admiten cargas de profundidad. Hoy, la afición espera a Borja Rubiato Martínez, 1,82 de estatura, 77 kilos, nacido en el 84, 17 goles en el Atlético B en lo que va de competición. "Ya veremos", señala con cierto escepticismo Baena, cadista y rojiblanco hasta la médula, no en vano jugó en la ribera del Manzanares junto a Pereira y Leivinha. "La Segunda B de Madrid no es tan fuerte como la nuestra. Es extraño que con 24 años no haya debutado en el primer equipo o no figure entre los futbolistas que pueden servir de moneda de cambio. Además, no sé qué haremos el año que viene con tantos delanteros". Baena piensa en primera persona de cantera. Baena ha sido seis veces máximo goleador del Cádiz. Su mejor gol, ante el Madrid de Stielike. Un testarazo que aún resuena por Preferencia, y que Miguel Ángel ni siquiera sintió. La primera derrota del Madrid en Carranza. Baena guarda una fotocopia de la foto que apareció en el Diario, obra de Juman, pero suspira por la imagen original de su célebre gol. Los aficionados veteranos lucen ese gol grabado en el corazón.
Entre el peruano Mosquera, "mete un gol y vamos a Primera" y los milagrosos Tilico y Dertycia media un abismo histórico. El año 63, el Balón estuvo a punto de subir, y el Cádiz también. Fue el primer intento del asalto a Primera, con Riera como técnico. Pero tuvo que pasar mucho tiempo para que las mieles del triunfo fuesen saboreadas precisamente por Baena, el exquisito Quino, los extremos Villalba y Mané y un mediocampo de categoría. "Ibáñez por la izquierda, Eloy en el centro y Carvallo por la derecha". Y por todo el campo. Baena sabía que le iban a llegar balones en condiciones desde todos los rincones del campo. Y remataba. "Hoy sólo juega Enrique por la banda", lamenta.
Un tipo que anote quince goles al año es lo que necesita el Cádiz, la comidilla de cada lunes al mediodía. Y un portero con más vista, sentencian los derrotistas, Contreras, que no te enteras. Y Armando, haciendo paradones en San Mamés, yo creo que es algo. Puertas ajenas, puertas propias. Puerta al gafe. Vaya añito. La próxima ocasión convendría no pecar de ingenuos. Ya lo dijo el sportinguista Barral: "Al gaditano no se le valora". Cuarenta goles anotó Pablo Sánchez en el Cádiz B, por citar un ejemplo.
Otros sufrieron la suerte esquiva en sus carnes abiertas, como el pujante Puente, que se partió la rodilla hace una década, con Ramón Blanco como sufrido morador del banquillo cadista.
El Balón (de Cádiz) es de todos. Antes se escenificaban auténticos dramas en el teatro del Balón de Cádiz. Aguardan emociones fuertes. Viene la Real Sociedad, el segundo equipo que visitó Carranza en Primera División, y uno de los últimos que jugó en Cádiz en la última temporada allende los cielos celestes. Poco después, reconvirtieron a la prisa corriendo a entrenador a un ariete de los de antes, el asturiano Oli, y pasó lo que pasó.
Desde que la mujer de hierro soterró la vía férrea, Loreto no ve puerta y el tren del gol pasa por bajini. Así no hay manera.
Mayo 08, Submarino Amarillo (Diario de Cádiz)
martes, 6 de mayo de 2008
Grandes marrones de la literatura
Ha llamado Dan Brown. Está indignao. Dice que no piensa comerse el marrón en La Viña. Si acaso, una caballita con piriñaca. El renombrado literato no ha entendido ni papa de la chirigota. Será sieso. El mundo no ha entendido su novela, y mucho menos la peli, un tostonzazo que no tiene ni un pase de preliminares, y el tío se ha forrao. Dan Brown pasa de la religión del tataratachín; se decanta por las comparsas. El año que viene, Ángeles y Demonios. Él se lo pierde, sobre todo el cuplé best seller del niño equivocao y el exquisito popurrí, que contiene los platos fuertes que otros sirven en pasodoblés y demás. Tó condensao. Cuatro finales seguidas, y decían que la final iba a ser cortita. Ya está aquí el Covirán. Castigo divino.
Los escritores de Cádiz emplean sus recursos lingüísticos que ríete tú el Dan Brown. Comedias pa tirar palante, dramaturgia de andar por casa. Si algunos abusan del recitado para subrayar el mensaje, otros mecen sus coplas al compás de una musiquita redentora. Tres por cuatro. La gloria. Las castas de Dan Brown: su madre es pianista y su padre matemático. Y el nota no coge los cuplés. Imperdonable. Ni siquiera se cosca de la guasa del dios Momo con respecto a Iberia y Telefónica. Grandes cuplés pa perder las maletas varias veces y llamar a cobro revertido a la inspiración. Por no hablar de la conexión que logran los divorciados con el GPS y las operaciones de estética. "Se ha puesto tetas hasta Joselito", gran maldad. "Yo tengo un poblema de tamaño, y un complejo horroroso, voy a tener que ir a cortarme un trozo". Manolo, cásate, que se pasa rasca separao. "Ustedes reirse", farfulla el Selu al publiquito fiel.
Ha llamado Ildefonso Falcones, autor de la Catedral del Mar, y lo hemos tenido que mandar a por una tapita de chicharrones. Confiesa que jamás habría imaginado un tipo como el de la comparsa de Rivero, y tampoco su estilo. Se ha quedao tieso al comprobar la manera de ocultar la clave del pasodoble hasta el final, al más puro estilo enigmático de las novelas de hoy, y la moraleja que confluye en ambos cupleses. Falcones también comentó maravillas del tango a Kiko Zamora, regalito de su "enemigo más sincero", Julio Pardo, pero apenas se ha enterao del significao de las cartas selladas por Rivas: Carta del Padre de la Postura del Misionero al Padre de la Postura del Perrito, y Carta de Fray Eloy Makoki sobre los Pensamientos y Actos Impuros. Ay, qué gustito me dan los suministros del Covirán.
Como Falcones estudió pa abogado, ha fletao a un notario amigo suyo pa que levante acta del testamento sonoro de Quiñones, que este año viene quemao con ciertos comentarios en torno a su grupo y ya ha disparado dos letras en defensa propia y de su gente. Amén de tocar el cielo con la música del Noly y practicar el 4-3-3 en el popurrit.
Ya puesto, el notario se quedó a intentar pactar una sentencia favorable con los divorciados y flipó en colores con el pasodoble del matrimonio. Conflisto gordo. "Sin darse cuenta han tirao tó por la borda, y al final el pobre gordito acaba sin una gorda". Tieso. Ya ha llamao al Cofidís.
Ya en serio, Falcones y el de los Marrones habrían desentrañado los misterios y pasiones de Cádiz con sólo escuchar las recetas de cariño envueltas en papel de tirititrán, los redobles de nudillos del ritmo vital viñero, la diatriba contra los pescadores de inmaduros sexuales, la confesión de un hombre que quiere a otro hombre o la separación de males de la provincia. Cádiz tiene los dientes mu separaos, y los dos grandes, picaos entre sí. Ya tenía que haberse hecho el segundo puente, señora. Grite cuando le duela, que se sufre más en silencio. Oh, Cádiz, con los quince sentidos. Y ese triple sentido tan sevillano. "Mi novia es derechas, es una estrecha, en vez de raja tiene a Rajoy. Y yo le digo: por lo menos acaba con Gallardón y le da una alegría a Esperanza Aguirre". Ha llamao otra vez Dan Brown. Que ná. Que dice que cantamos con faltas de ortografía. Aro, cohone.
Febrero 08, Carnaval (Diario de Cádiz)
Aviso: Irán apareciendo por aquí artículos fuera de tiempo, textos de Carnaval, columnas sueltas o antigüedades del siglo pasado. Y más fotos de Fito Carreto.
Los escritores de Cádiz emplean sus recursos lingüísticos que ríete tú el Dan Brown. Comedias pa tirar palante, dramaturgia de andar por casa. Si algunos abusan del recitado para subrayar el mensaje, otros mecen sus coplas al compás de una musiquita redentora. Tres por cuatro. La gloria. Las castas de Dan Brown: su madre es pianista y su padre matemático. Y el nota no coge los cuplés. Imperdonable. Ni siquiera se cosca de la guasa del dios Momo con respecto a Iberia y Telefónica. Grandes cuplés pa perder las maletas varias veces y llamar a cobro revertido a la inspiración. Por no hablar de la conexión que logran los divorciados con el GPS y las operaciones de estética. "Se ha puesto tetas hasta Joselito", gran maldad. "Yo tengo un poblema de tamaño, y un complejo horroroso, voy a tener que ir a cortarme un trozo". Manolo, cásate, que se pasa rasca separao. "Ustedes reirse", farfulla el Selu al publiquito fiel.
Ha llamado Ildefonso Falcones, autor de la Catedral del Mar, y lo hemos tenido que mandar a por una tapita de chicharrones. Confiesa que jamás habría imaginado un tipo como el de la comparsa de Rivero, y tampoco su estilo. Se ha quedao tieso al comprobar la manera de ocultar la clave del pasodoble hasta el final, al más puro estilo enigmático de las novelas de hoy, y la moraleja que confluye en ambos cupleses. Falcones también comentó maravillas del tango a Kiko Zamora, regalito de su "enemigo más sincero", Julio Pardo, pero apenas se ha enterao del significao de las cartas selladas por Rivas: Carta del Padre de la Postura del Misionero al Padre de la Postura del Perrito, y Carta de Fray Eloy Makoki sobre los Pensamientos y Actos Impuros. Ay, qué gustito me dan los suministros del Covirán.
Como Falcones estudió pa abogado, ha fletao a un notario amigo suyo pa que levante acta del testamento sonoro de Quiñones, que este año viene quemao con ciertos comentarios en torno a su grupo y ya ha disparado dos letras en defensa propia y de su gente. Amén de tocar el cielo con la música del Noly y practicar el 4-3-3 en el popurrit.
Ya puesto, el notario se quedó a intentar pactar una sentencia favorable con los divorciados y flipó en colores con el pasodoble del matrimonio. Conflisto gordo. "Sin darse cuenta han tirao tó por la borda, y al final el pobre gordito acaba sin una gorda". Tieso. Ya ha llamao al Cofidís.
Ya en serio, Falcones y el de los Marrones habrían desentrañado los misterios y pasiones de Cádiz con sólo escuchar las recetas de cariño envueltas en papel de tirititrán, los redobles de nudillos del ritmo vital viñero, la diatriba contra los pescadores de inmaduros sexuales, la confesión de un hombre que quiere a otro hombre o la separación de males de la provincia. Cádiz tiene los dientes mu separaos, y los dos grandes, picaos entre sí. Ya tenía que haberse hecho el segundo puente, señora. Grite cuando le duela, que se sufre más en silencio. Oh, Cádiz, con los quince sentidos. Y ese triple sentido tan sevillano. "Mi novia es derechas, es una estrecha, en vez de raja tiene a Rajoy. Y yo le digo: por lo menos acaba con Gallardón y le da una alegría a Esperanza Aguirre". Ha llamao otra vez Dan Brown. Que ná. Que dice que cantamos con faltas de ortografía. Aro, cohone.
Febrero 08, Carnaval (Diario de Cádiz)
Aviso: Irán apareciendo por aquí artículos fuera de tiempo, textos de Carnaval, columnas sueltas o antigüedades del siglo pasado. Y más fotos de Fito Carreto.
lunes, 5 de mayo de 2008
Salvapatrias
Nunca satisfecha la ambición, y por la ley de la compensación, los incautos pertinaces a los que alude el gran Rosendo Mercado vuelven por sus fueros. Con lo que gusta un buen funeral, murió uno de los próceres de la patria, la alegría de la huerta, y se apresuraron los secuaces del embuste a resaltar las virtudes del insigne salvapatria. Oh, la transición, también llamada la capitulación, la resignación, la triste cagalera del pueblo soberano, gran brandy. Los obituarios rechinan, los imberbes de entonces que aún conservamos la memoria entre el maremágnum neuronal nos parece recordar un tiempo gris y peligroso, y sin embargo vibrante y emocionante. Con tiempo por delante. Hoy, con tiempo por detrás, los padres putativos de la Constitución dan portazos a la verdad jamás contada, de cómo nos metieron en la Otan mediante un golpecito de Estado; de cuando el centro se devoró a sí mismo, o quizá fuera la derecha del centro o el centro derecha; de cuando los socialistas dejaron de ser obreros. Es curioso, los intolerantes de antes y de ahora ensalzan la figura de Calvo Sotelo, a quien habrían desplumao en su día si hubieran podido. Por no hablar de quienes se cuelgan las medallas de la lucha invisible, la lucha imposible, la cantidad de españolitos que lucharon contra Franco y va Franco y se muere en la cama. Amos, anda. So baranda. Date por disimulao. La idiotez consuela. Eres un iluminao. Las letras de Rosendo admiten mil significados y ninguno a la vez, como la historia de la democracia, que rima con demos las gracias a nuestros padres superiores. Ahora sólo falta que, en el gran funeral, la Letizia luzca el peinado que desean los lectores del Diez Minutos, los vasallos de la democracia orgánica, que es la democracia que se dedica a tocarle los órganos a la gente. Total, la gente mañana no se acordará de lo que ocurrió Dios mediante. No se acuerdan ni los presidentes, que sufren alzheimer o desolación.
La foto es de Fito Carreto y pertenece a la serie "Paseantes"
La foto es de Fito Carreto y pertenece a la serie "Paseantes"
domingo, 4 de mayo de 2008
Ruibal y Cai, en El Bosque
Otra de festivales para los cuerpos serranos y las mentes despiertas. Si el 5 de julio Bornos revivirá su festival del Lago con Imán (Califato Independiente), Bloque y Gwendal, el 26 del mismo mes El Bosque se descolgará con la reedición del Aljibe Rock, salvando las distancias, completando el mes de citas con el rock andaluz con un cartel espectacular: Cai y Javier Ruibal. La banda gaditana por antonomasia de finales de los setenta y el cantautor universal portuense, dos en uno a la luz de la luna. Los "caitanos" presentarán su reeditado "Más allá de nuestras mentes diminutas" sin aditamentos, esto es, emulando el sonido de su disco de debut, sin sección de vientos y con la incorporación del Niño a las guitarras. Cai también prepara nuevos temas. Ruibal, por su parte, colmará la noche de guiños andalusíes, poesía de la luz y ese sello especial que posee el prestigioso músico de El Puerto, quien curiosamente ofrece en su página web consentida una original forma de conocer su obra y pasarlo en grande: los conciertos a domicilio. Llamas a un teléfono, juntas a treinta amigos, entre todos ponen unos mil euros y Javier se acerca a tu casa y ofrece un pedazo de recital en clave acústica, íntima pero plenamente profesional, lo cual no riñe con lo humano. Increíble pero cierto. La fórmula funciona. Ruibal en las distancias cortas. Bonita manera de acercarse a su gente y de pugnar contra la crisis del ladrillazo. Volviendo a Cai, en septiembre participará en una noche dedicada al rock andaluz, en la Bienal de Flamenco de Sevilla, junto a otros grupos señeros de la época, incluido Imán.
Mayo 08, Cultura (Diario de Cádiz)
Mayo 08, Cultura (Diario de Cádiz)
sábado, 3 de mayo de 2008
Murió la primavera
Hoy salió el sol con lo puesto. Otro puente en el Sur del Sur, los turistas colman los hoteles, bajan a la arena, almuerzan a las seis y media, rinden culto al sol insomne. En las esquinas del viento se escuchan acentos diversos, el italiano suena pastoso y alegre, el madrileño suaviza el tono, la gente parece distraída y nunca llegará mañana. Inaugurada por su cuenta la temporada de playas, el sol abre fuego sin permiso de la autoridad y lo inunda todo de sal. ¿Quién nos robó la primavera? Días raros, sol a plomo, noches fresquitas. Hasta el Telepicha, con esto del cambio climático, ha dejado de despachar las pizzas cuatro estaciones. Hoy sólo venden dos ingredientes, el sol y la luna con un poco de picante. El sol tiene una mancha, mire la foto, no rasque en la pantalla ajín con er deo, es una mancha. El sol necesita crema de caracol. Hoy salimos con ropa de primavera-invierno y el sol nos pilló por sorpresa y nos arrojó un martillo y un cubo de agua. Luego, una nube negra, premonitoria o no, mandó a la gente a tomar por saco, y en fila india se despidió el día hasta mañana, si acaso. Ahora, de pronto, hace rasca. Los tiempos están cambiando.
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