Glazz en Londres, picadillo y circo

Glazz no para. Próxima estación: Londres. Una semanita en la city, tres conciertos para captar publiquito anglosajón y algún que otro españolito erasmus o por cuenta propia. Nubes por nubes. El trío formado por José Rechaca, Dani Escortell y Javi Ruibal, que ya prepara su segundo disco, no tiene más ambición que la de sembrar en tierra remota, tras los buenos resultados obtenidos en Madrid. Aprovecharán los músicos portuenses para dejarse ver en los garitos, sumarse a jam sessions y conocer compañeros de oficio. "Iremos de exploradores", anuncia Javi. "Vamos con algunos contactos previos, pero nunca se sabe, parece que en el mundo musical todas las puertas están abiertas gracias internet, pero en realidad siguen mandando los peces gordos, entre la multitud resulta difícil destacar y al final funciona mucho el azar", además del trabajo y el talento, la calidad y el olfato. Glazz busca nuevos públicos.
Segundo disco, otra vuelta de tuerca, adiós al viaje de la urbe a la playita, ahora toca el circo, las nuevas canciones de Glazz girarán, mayormente, en torno al espectáculo circense. "Lo estamos pasando muy bien grabando los temas", comenta Ruibal, quien cita a algunos colaboradores de postín como el pianista Iñaki Salvador, que colorea de jazz la pieza "El lanzador de cuchillos" o el violinista y cantautor Joaquín Calderón. Equilibristas, domadores, funambulistas y demás personajes del circo ejercen de hilo conductor del disco. Cuando el circo llega a la ciudad ocurren cosas extrañas, se revoluciona el ambiente, quiebra la rutina, perturba la normalidad y apunta maneras oscuras, inquietantes y también encantadoras. Un chaval del pueblo se enamora de la aventura y se alista al circo. También trabajarán en la obra los músicos de Leda Tres, con Perles a la cabeza, y barruntan composiciones libres, naturales, unas sencillas y otras barrocas, pobladas de baterías y bajos, al gusto heterogéneo del conjunto.
"Algunos temas no podremos tocarlos en directo por su complejidad, pero no nos preocupa mucho, jugaremos con la experimentación, editaremos el álbum en 5.1, será un mundo lleno de sorpresas", enfatiza el percusionista. Glazz no cambia su sonido, ese sello particular inaugurado en el primer disco, pero "quizá sea más abierto ahora que nunca". Ritmos flamencos entroncados en el rock instrumental. Sonidos inciertos en la cuerda floja. Batidora de influencias dispares, Glazz no hace fotos fijas. "Tocamos lo que escuchamos y queremos", apunta, al estilo de "somos lo que comemos". "José apuesta por King Crimson o Yes, Dani por el funk y yo sigo cultivando ritmos étnicos y flamencos". Y mucho más, claro, no conviene simplificar, pero sí recordar que el grupo actúa "condicionado a la historia que se cuenta".
Durante su estancia en Londres, Glazz tocará en Jazz After Dark (día 10), Charlie Wright's International (día 14) y Road Trip (día 15). Picadillo y circo para los jóvenes "cocineros" portuenses en el corazón de la música europea. Elegancia y buen gusto.
Contentos de su primera etapa, que les ha granjeado cierto prestigio y abierto los caminos, Javi sostiene que los músicos ya no viven necesariamente de sus discos, acaso más del directo, pero subraya que la compra de un disco "ayuda, se interpreta como un gesto de apoyo y fidelidad; ahora tiene más valor comprar un disco, quienes se hicieron con el primero lo hicieron para escucharlo, y no para acumularlo, como ocurre con los mp3, o arrinconarlo en una estantería". Música viva.

Marzo 10, Cultura, Diario de Cádiz