domingo, 28 de marzo de 2010

Las cantiñas de Cádiz serán declaradas Bien de Interés Cultural

Larga vida a las alegrías de Cádiz. Camino de la Unesco, que este año tendrá que dilucidar si el flamenco se consagra como Patrimonio de la Humanidad, las cantiñas será declaradas Bien de Interés Cultural. Pasando de "los discursos a los hechos", de la teoría al cante libre e imperecedero, la Agencia Andaluza para el Desarrollo del Flamenco, embarcada de veras en la promoción y difusión de la industria cultural al sur de la seña de identidad de esta tierra, quiere demostrar su apuesta por conservar el patrimonio inmaterial andaliz, el inmenso caudal de arte intangible. Lo mismo que ocurre con los verdiales o las zambombas de Jerez, expediente abierto a las cantiñas de Cádiz. En junio culminará el proceso previo, abierto en enero de este ejercicio, el trabajo de campo encargado al prestigioso musicólogo, compositor y profundo conocedor del flamenco Faustino Núñez.
El director de la Agencia de Flamenco, Francisco Perujo, confirma que Faustino Núñez acomete las últimas fases del "andamiaje técnico, la fundamentación teórica" que abrirá las puertas a la declaración de BIC, que se traducirá en garantía de supervivencia de las cuatro variedades de cantiñas surgidas al viento de Cádiz, repertorio habitual de cantaores de aquí y de allá: alegrías, romeras, mirabrás y caracoles. Perujo, que resalta el papel trascendental que han desempeñado las cantiñas a lo largo de dos siglos de flamenco, subraya las múltiples influencias que ha recibido el conjunto de especialidades de otros rincones del mundo hasta aflamencarse en Cádiz, siempre pendiente de contagios y complicidades con ritmos y hechuras musicales aún por conocer. Y enfatiza que las cantiñas necesitan descansar sobre una figura como el BIC para fortalecerse y expandirse. "Existen grabaciones poco conocidas, variedades y estilos menos estudiados que se encuentran en peligro de extinción, así que nuestra obligación y nuestra responsabilidad no son otras que intervenir en el ámbito del reconocimiento, el análisis y la catalogación, persuadidos por la voluntad de la Consejería de Cultura de emplear la nueva Ley Andaluza de Patrimonio Histórico, que permite, por primera vez, trabajar con el patrimonio inmaterial". Camino de la Unesco, camino de la eternidad. Por fiesta, al compás de la soleá, el tiempo vuela, aspirando jotas gaditanas, fantaseando con juguetes ligeros, el espíritu de Cádiz, los Puertos y Jerez.
Perujo elogia la figura y la trayectoria de Faustino Núñez, quien amén de músico exquisito formado en altas escuelas, imparte música y guitarra flamenca en el Conservatorio de Música de Córdoba. "Uno de los más grandes musicólogos con que cuenta Andalucía, sin duda, y un maestro a la hora de plasmar sus conocimientos acerca del arte", de interpretar lo abstracto y de poner en valor, como se dice ahora, la riqueza cultural de la tierra. "Faustino sabrá dejar negro sobre blanco la arquitectura del flamenco, única en el mundo". Valora también Perujo la labor iniciada por Manolo Sanlúcar, que continúa elaborando la Enciclopedia Audiovisual del Flamenco, un trabajo definitivo y exclusivo.
En aras de la conservación del patrimonio cultural andaluz, el director de la Agencia manifiesta que "igual que ahora se acometen esfuerzos para rehabilitar y preservar el Oratorio de San Felipe Neri, para la cultura y el constitucionalismo, podemos acudir a la extrapolación y decir que igual de relevante es la declaración de las cantiñas de Cádiz". Y calcula que tras la incoación del expediente administrativo, en diez o doce meses, un año a lo sumo, habrá culminado el proceso y los cantes, tan volátiles de por sí, dispondrán de una protección especial en Andalucía y la Humanidad, por así decirlo. Medidas de salvaguarda y tutela que desembocarán en caminos nuevos. "Vamos a primar la interpretación de las cantiñas en los circuitos de flamenco, vamos a registrar viejos cantes, a catalogar, recoger y divulgar todo lo concerniente a las cantiñas, y el Observatorio de Flamenco tendrá mucho que decir, priorizando investigaciones, estudios y publicaciones". Alegrías para el cuerpo y para los cantes de ida y vuelta, "un gesto y una acción en la antesala de la Capitalidad Cultural de Iberoamérica" y de los fastos de 2012, ya se sabe que La Pepa es prima hermana y coetánea del flamenco.

 
Faustino Núñez, trabajando contra el olvido

"El Kiki cantará por alegre". Así titulaba el diario El Comercio, en 1869, la primera noticia en torno a las cantiñas de Cádiz, la primera refrencia histórica que ha hallado Faustino Núñez en su investigación. "La más antigua hasta ahora. Cualquier día te llevas una sorpresa", matiza el musicólogo gallego. "Estoy recopilando y clasificando el repertorio de las cantiñas propiamente dichas y las alegrías, ya cuento con bastantes cuerpos de alegrías, numerosas letras y músicas de gente como Pastora, la Perla o Aurelio, muchísimas cantiñas a secas y cantiñas con la jota metida con aire de soleá. Es un trabajo muy gratificante".
Núñez, que valora sobremanera estudios anteriores como los de Fernando Quiñones y Antonio Barberá, en la tarea de trazar el desarrollo histórico del estilo gaditano, dispone de un extenso material, ya cuenta con setenta folios repletos de letras. "Sabemos lo que influyeron Enrique el Mellizo y sus alumnos, sabemos que se cantan las mismas letras en algunos casos, la investigación va muy bien, siempre en contacto con la Agencia. El flamenco, pese a que se hable tanto de pureza, es lo más impuro que existe, por fortuna. Se habla de pureza como signo de autenticidad a la hora de interpretar, pero el flamenco no es sofisticado. Ya quisiéramos disfrutar de la universalidad del blues, por ejemplo", sostiene, pero "el flamenco sigue en buena forma, las alegrías se cantan hasta en Japón y no corren peligro, pero conviene recopilar y tener a mano la historia de los cantes para que no caigan en el olvido, tanto en lo literario como en lo musical. La actividad del flamenco ya es mundial". Núñez guarda como oro en paño, por cierto, los diez volúmenes que el investigador musical por antonomasia, Alan Lomax, elaboró sobre el folklore español. Núñez, que se doctoró en Viena con una tesis sobre Puccini, amante de la ópera, conocedor de los entresijos de los ritmos de la Tierra, también se emociona con un pasodoble de Carnaval, otra musiquita de ida y vuelta donde gobierna la intuición. Como escribió Javier Osuna, Cádiz, cuna de dos cantes.

2 comentarios:

Charo Barrios dijo...

No sabes cuanto me alegro de esta noticia. Estos cantes siempre me han emocionado; por ejemplo el mirabras de Pericón, una joya....

Enrique Alcina Echeverría dijo...

musha alegría de Cádiz, Charo, también me emocionan estos cantes, cuando aparecen, en medio de un recital o de un disco, enganchan a la primera ... un saludo y buenas vacaciones, salud !!