Jamás una banda de rock con tan escasa vida, cinco años de carrera entre 1978 y 1983, dejó tal estela entre los músicos españoles de diversa clase y condición. Casi tres decenas de artistas y grupos rinden tributo ahora a Leño y reinventan veintiséis piezas de su repertorio en un doble álbum, acompañado de su correspondiente deuvedé, que pone de manifiesto la vigencia y la calidad de las composiciones de Rosendo Mercado y compañía. Los supervivientes del trío se reunieron la otra noche en la sala Caracol, en Madrid, y tocaron cinco temas en la presentación del disco. Dos gaditanos integran el extraordinario plantel, el cantautor Javier Ruibal, que hace suya la canción "Calendario" de un modo exquisito, y el grupo Más Madera, historia viva del rock duro gaditano, con diez años de carretera y un nombre precisamente tomado de un disco de Leño. Nobleza obliga, Más Madera borda "Castigo".
"¿Por qué se fueron cuando más falta nos hacían?", se pregunta Javier Ruibal en el libreto del disco "Bajo la corteza". El artista portuense grabó el tema junto a Raúl Rodríguez y el impar Tomasito, mientras que Más Madera dedica una expresión lapidaria a los Leño: "La música buena es la que permanece para siempre". Verdad como un puño. El documental no tiene desperdicio, y a lo largo del álbum, cobran nueva vida las historias de Leño en boca de Extremoduro, Mago de Oz, Mc Clan, Barricada, Celtas Cortos, Pereza y Burning y muchos más exponentes del rock en castellano, género de catacumbas en este país, el rock nunca logró huir de la condición de "underground". Leño siempre a su aire: no fueron jevis, ni mucho menos poperos, pero encandilaban a todos con su peculiar estilo rompedor, simple pero arrebatador, castizo y universal, como su guitarrista y cantante, el gran Rosendo. Un respeto para Rosendo, escritor automático, técnico de la pasión, maestro del punteo cañí.
Rodrigo, el hijo de Rosendo, toca en el disco la legendaria "Este Madrid", pieza que precisamente grababa Leño en una tarde de 1978 cuando la mujer de Rosendo daba a luz y el guitarrista tenía que salir pitando hacia el hospital. Rodrigo, que tiene la misma edad de "Este Madrid", lo festeja por reggae, de la misma manera que el disco congrega de nuevo a Miguel Ríos y Luz Casal y cierra el círculo de la gira El Rock de una Noche de Verano, año 83, la despedida de Leño por todo lo alto, en grandes estadios ante variopintas audiencias. Pasaron por el estadio Domecq de Jerez, donde triunfaron a pesar del endeble sonido. Miguel Ríos, que revisita la célebre "Maneras de vivir", intentaba reeditar la gloria del Rock & Ríos mostrando su admiración a Leño y abriendo puertas a una jovencita Luz Casal. Tiempos veloces y salvajes.
El tributo a Leño ofrece la última canción grabada por Antonio Vega, una hermosa versión de "Sin solución" que el cantante y también guitarrista, quien fuera colíder de Nacha Pop, interpreta como un canto de esperanza y lucha. "Las noticias van a peor / pero estamos tranquilos / frente al televisor". Nueve meses después de su muerte, por cierto, anuncian un festival en señal de homenaje, el nueve de abril en Madrid, con las actuaciones de Nacha Pop, Burning, Antonio Carmona, Diego el Cigala, Miguel Ríos, Enrique Morente, Mamá, Manolo García, La Unión, Quique González y Rosario, entre otros.
Marzo 10, Cultura, Diario de Cádiz
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