Javier Ruibal triunfó en el templo de la canción de autor. La sala Galileo Galilei de Madrid se llenó para escuchar al músico portuense y, a la sazón, pregonero del Carnaval de Cádiz 2009, quien desgranó piezas de ayer y de hoy, lo mejorcito de su amplio y rico repertorio, ante un público heterogéneo repleto de amigos, entre ellos muchos artistas que acudieron en calidad de anónimos. Javier Ruibal, acompañado de su hijo Javi a la percusión, y del gran pianista vasco Iñaki Salvador, ofreció visiones dispares y diferentes de parte de su obra, encandiló de nuevo a la audiencia, como no podía ser menos, y su ondulada voz llenó cada recoveco del lugar y sació la sed de tantos aficionados a su original y respetada música, un compendio de poesía de muchos quilates, canto al amor y ritmos y hechuras de varios continentes. El maestro Ruibal atrajo también a numerosos gaditanos residentes en Madrid, o que viajaron con motivo de la Feria Internacional de Turismo a la capital, y volvió a cosechar un éxito morrocotudo y a atraer a nuevos admiradores. A partir de ya mismo, el cantautor portuense se dedicará casi de pleno a la preparación del pregón de Carnaval de Cádiz, al que le faltan algunos pespuntes. Como adelantó días pasados a este Diario, colabora estrechamente con él uno de los autores más prolíficos y respetados de la fiesta, el Gómez. El pregonero ya ha estado una noche en el Concurso de Agrupaciones para ir abriendo boca y en cuanto pueda a buen seguro volverá al templo de las coplas a escuchar de cerca a las agrupaciones participantes en el certamen oficial. Entretanto, se irá metiendo de lleno en la preparación del pregón, que se celebrará el próximo 21 de febrero, primer sábado de Carnaval, justo al día siguiente de la gran final del Concurso. La foto es de Fito Carreto
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